Tocó la puerta de su oficina, él no tarda en abrir la puerta y sonreírme, le devuelvo la sonrisa aunque no estoy nada feliz por dentro.
— Me alegra que hayas venido, sígueme por favor- Asiento, cierro la puerta de su oficina cuando ya estamos dentro—Este es tu uniforme, puedes ir a cambiarte ya, aunque te ves muy bien con el traje que llevas puesto.
Pongo mis ojos blanco.
Ross me entrega una diminuta falda negra y una blusa algo corta, lo maldigo por dentro, luego de esto, me da la placa que debo de llevar en el pecho con mi nombre.
— ¿Por qué una falda y una blusa? He visto a las demás chicas y no visten con esto.
— Seguramente aún no conoces a ninguna secretaria, todas las secretarias llevan ese uniforme, las demás no- Se sienta en la silla principal—Me alegra que ya hallas hecho el contrato, es bueno tenerte cerca otra vez.
Ignoro sus palabras.
Voy al baño que Ross tiene en su oficina para poder cambiarme, me aseguro de cerrar la puerta con seguro para evitar cualquier acto de chismosería.
Al terminar de cambiarme, me miro al espejo, una mueca se forma en mi rostro.
Parezco una puta, por suerte no tengo maquillaje en exceso.
Trato de bajar un poco más la falda, pero aún así me queda por los muslos.
¿Cómo fue que llegué a cambiarme en este baño?
Al salir, Ross estará sentado en una silla, y me verá salir, vestida... así.
Puedo notar, a través del espejo que tengo las mejillas sonrojadas.
Dobló y junto mi ropa para poder salir del baño.
Saco mi cabeza, comprobando si había alguien allí.
Al ver que Ross ya no estaba en su oficina, salgo.
Pero al instante, alguien me pone contra la pared.
Y no es nadie más y nadie menos que Ross Lynch. Mis ojos se abren como platos.
Su cuerpo estaba pegado al mío, su respiración se mezclaba con la mía mientras que sus labios rozaban con los míos.
— Aléjate.
Murmurro empujándolo, pero no logro nada.
Ross me rodea con sus brazos. Cierro los ojos al sentir su respiración en mi cuello.
— Sólo quiero que todo sea como antes- Susurra—Quiero tenerte entre mis brazos, ya te amo, quiero que tu lo hagas también.
Cierro mis ojos fuertemente.
Mi cuerpo necesitaba volver a caer entre sus brazos.
Pero mi mente no me lo iba a permitir.
R:
Su cuerpo estaba junto al mío, y mis labios a milímetros de los suyos.
Es reconfortable tenerla así de cerca.
Su olor a vainilla llega hasta mi nariz. Me encanta. Nunca dejo de encantarme.
Daría lo que fuera por volver a enamorarla, si es que alguna vez ella realmente estuvo enamorada de mí.
Sus ojos están cerrados, y su cuerpo esta tenso.
¿Tiene miedo? ¿Esta nerviosa? ¿Intenta no caer en mi juego?
Me gusta creer que sí.
Muerdo mi labio inferior.
Comienzo a besar su cuello, ella se estremece e intenta no gemir.
Una de mis manos se dirije a su abdomen.
Quería tocarla, pero no sabía como reaccionaría.
Pero decido ignorar mis miedos y hacerlo.
Mi mano recorre mi abdomen hasta tocar uno de sus senos.
Ella gime.
Mi miembro no tarda en ponerse aún más erecto. Duele.
— Déjate llevar- Susurro en su oído—Déjame amarte otra vez.
Suplico mientras mi mano acaricia uno de sus pechos.
Podía sentir como el pezón se ponía duro y erecto.
Mis labios se acercan a los suyos.
Paso mi lengua por ellos.
Quiero hacerlo, quiero besarla.
Volver a sentir sus deliciosos labios contra los míos.
Estoy por besarla, pero ella me detiene de la peor manera.
Dándome con la rodilla en la entrepierna.
***
Al llegar a casa, dejo estacionado mi auto en el garage. Decido sentarme en los sofás a descansar por lo menos un poco.
Emito un suspiro.
Por suerte, _____ no se fue del trabajo luego de ese incidente, si no, siguió haciendo sus cosas ignorándome completamente. Pero tuvo que irse antes de la 1:00pm, volver a la 1:35pm hasta las 3:00pm, y se fue del trabajo a las 3:30pm, supongo que para cambiarse para ir a la universidad, ya que si no me equivoco, estudia desde las 4:00pm hasta las 8:00pm
Estaba decidido a volver a atraparla en mis redes.
Quería que me ame.
Yo siempre la amé, y sigo haciéndolo.
No me importa todos los secretos que me esconda, yo la amaría igual, de la misma forma que la amé cuando me dijo que estaba embarazada.
De tan sólo pensarlo me pongo triste.
¿Habría abortado?
Si bien recuerdo, ella quería abortar, pero lo conversamos, y acordamos en estar juntos. O al menos eso es lo que recuerdo. Pero, ella se fue el siguiente día, sin despedirse de mí.
Supongo que se despidió de mí de esa forma, hicimos el amor.
Por alguna razón, al parecer no tiene a nuestro bebé, así que podría haberlo abortado, dejarlo en adopción, etc.
Me obligaría a descubrirlo, yo mismo me encargaría de descubrir todo lo que me esconde, al igual que volver a enamorarla.
Si no puedo pasar como su amigo. Podría pasar como su enemigo.
O si no, podría seducirla.
De cualquier manera, haría lo que fuera para que _____ pudiera volver a caer en mis brazos.
Y la protegería.
Y la amaría.
Y sobre todo, no la volvería a dejar ir, no la volvería a perder.
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Empleada II | Ross Lynch
FanficSegunda Temporada. Pueden encontrar la primera temporada; sólo en mi perfil. TERMINADA✅ Copyright©; 2016.