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¿Y quién no se iba a sentir triste sabiendo que te ibas a ir internada por tiempo indefinido?

(...)

Se despidió de su nana y su hermana, ellas irían a Beacon Hills​ y ella a aquella clínica, ya sabía que estaría ahí por un año, pasaría ahí su cumpleaños y cualquier otra festividad, no le preocupaba, las clínicas de Australia eran de calidad. Sabía que sus padres estaban apuntó de morir y eso era lo que más le dolía, aun no entendía por que ellos no iban a luchar, se iban a rendir fácil.

—Te vendemos a ver ¿si?—Dijo su hermana tomando sus mejillas.

—Si.—Susurró ella.

Pronto su vuelo salió, regresó a su casa a empacar lo que necesitaría, quería llorar.

—Hija.—Dijo su padre.

-¿Sí?

—Cuando estés en Beacon Hills​ ayuda a Scott McCall y su manada, no seas parte de ella solo ayudalos.

—¿Y cómo sabré quien es el?.

—Solo hazlo.

Se apresuró, hoy mismo la internarían.

Hoy mismo sus padres morirían, si eso era posible.

(...)

Estaba parada enfrente de la clínica, por fuera se veía bonita, no como las que había visto en las películas.

Paso por el registro y entraron a una oficina.

—Muy bien ____, dejarás aquí lo que tengas en tus bolsas, te daré las indicaciones después de que te pongas tu ropa cómoda.—Dijo la enfermera, ella era muy agradable.

Le entregó un pantalón tipo pijama algo ajustado, una playera blanca y unos tenis sin agujetas, solo entraba su pie. Lo demás que le entregó era ropa interior, calcetines, ligas de cabello, artículos de limpieza personal, una toalla de baño y algunas prendas más. Se termino de cambiar y salió de ahí.

—Despídete _______.—Había llegado el momento. Las despedidas son terribles.

Lloro, se despidió de ellos y esta vez si podría decir que se despidió de ellos como si fuera la última vez que los tendría cerca.

—No olvides la promesa—Dijo su padre antes de irse.

Lloró unos minutos más mientras los vio salir por la puerta, unas manos cálidas la hicieron tranquilizarse.

—Bien _______ estarás en el área libre, mientras tu no agredas a nadie y te portes bien estarás en el jardín el tiempo que gustes ¿si?—Dijo la enfermera, _______ sólo asintió.

Le mostró su habitación, al parecer aquí se compartían las habitaciones y era muy raro era 'hombre y mujer'.

Examinó el nombre de la puerta y decía.

Nombre: Theodore Raeken.
Edad:17 años.
Padecimiento:Esquizofrenia nerviosa.

La enfermera puso abajo la tabla en donde también estarían los datos de ______.

Nombre:______ Brooklyn.
Edad:17 años.
Padecimiento:Esquizofrenia neurótica y bipolar.

Entro en la habitación, la enfermera cerro la puerta sin llave. Se instaló en la cama que supo que estaba vacía, el sonido de la regadera se escuchaba, supuso que su compañero de habitación estaba ahí.

Estaba tan triste que olvidó que estaría con un niño de su edad y tendría que hablar con él, había hablado con otros niños en la escuela pero nada cercano y con el estaría un año entero o no, si es que el salia antes o ella.

Se asomó por la ventana, había varias personas con iguales enfermedades y otras con sus familias. Escuchó el sonido de la puerta de el baño rechinar y volteo. Se encontró con un niño más alto que ella, sus ojos eran muy azules, su cabello era castaño y caía en su frente, traía su ropa puesta, similar a la de ella.

—Hola, tu debes ser mi nueva compañera.—Dijo él amablemente​.

—Hola, si soy tu nueva compañera.—Respondió tímidamente, tenía la manía de jugar con sus manos cuando estaba nerviosa. Él olía a jabón y aparte de eso a nervios, igual que ella.

vapor [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora