-Vamos a la azotea, allí podremos hablar tranquilos.-Damon tomó la iniciativa y se dirigió a la puerta del ascensor.
-Espera...¿Que? Ah, no, ni hablar. No pienso subir contigo a la azotea.- Molly se cruzó de brazos y intentó poner una cara autoritaria, fallando por completo.
-¿Y porque no? ¿No querías explicaciones?
-Y las quiero... Pero eso no quita que puedas ser un psicopata asesino en serie. Eres un completo desconocido para mi, no me puedo fiar de ti... Es como en las películas cuando las mamás les dicen a sus hijas que no hablen con desconocidos.
-¿Pero que dices? ¿Es eso lo que te preocupa?- Molly asintió- No debes preocuparte por eso, no mato a niñas delgaduchas.
"Hijo de..."
-Oh! Madre mia... ¿Yo soy una niña? Perdóneme hijo de Matusalén!
Damon se rio a carcajadas, y luego se detuvo de golpe.
-Un momento... ¿Has dicho en las películas? ¿Me estas diciendo que tus padres nunca te han dicho que no hables con extraños?
Molly se sintió incómoda y enfadada a la vez.
-Yo no tengo padre, y sí alguno de mis progenitores me lo dijo en algún momento yo no lo recuerdo... Era muy pequeña.- Molly agachó la cabeza y miro al suelo.
-Oh...Lo siento mucho, no debería haber preguntado... Entonces...¿Quieres venir a la azotea conmigo...? Sí no quieres lo entenderé.
-No, está bien... Vamos. ¡Pero yo no me meto en ese ascensor!.- dijo Molly apuntando con el dedo hacia la jaula de hierro haciendo reír a Damon.
-¿Que pasa?¿Te dan miedo los ascensores? ¿O a lo mejor son los espacios reducidos? O...- Se acerco a ella-. O a lo mejor lo que te da miedo es estar conmigo a solas en un espacio reducido.
"Sera cretino."
Molly levantó la barbilla y lo miro directamente a los ojos.
"Madre mia, me saca tres cabezas... Este tío tiene la constitución del armario de Narnia."
-Ninguna de esas cosas, pedazo de idiota. Tengo por norma no usar ese ascensor, Nunca.
-¿Y eso porque?- se separo un poco y cruzandose de brazos se apoyo en la pared con movimientos despreocupados.
-¿Como que porque? ¿Eres tonto o simplemente te has dado muchos golpes en la cabeza?.- El simplemente se rio-. me parece que no eres consciente de el sitio en el que estas... Esto es la maldita zona cero, y este edificio es bastante conflictivo, toda la zona lo es.
-¿Así que te subes tú solita diecisiete pisos andando?
-Por mi seguridad y mi bienestar, si.-Damon la miro con incredulidad-. Además, asi me mantengo en forma.
-¿En la forma delgaducha?.- Damon volvió a partirse de risa con la mirada mortal de Molly-. Vale, vale, ya paro.
Empezaron a subir escaleras hasta el piso veintitrés, con Damon en cabeza tarareando una canción que a Molly le recordaba a algo pero no conseguía identificar a que recuerdo exacto.
Damon abrió la puerta de la azotea sin dificultad alguna y la sostuvo para que pasará Molly.
-Muy bien, ya estamos aquí. ¿Y mis explicaciones? ¿Que leches a sido eso?-.dijo Molly apuntando con el dedo hacia la puerta.- ¿O esque realmente me has hecho subir hasta aquí para asesinarme? Porque sí es para eso ya te digo que sería el crimen perfecto.
-¿Otra vez con eso? No pienso matarte Molly, no soy ningún psicopata ni mucho menos.Simplemente soy un loco sin frontera. Que no es lo mismo.
-Eso a sido completamente estúpido-.Damon sonrio con malicia y Molly se aguanto la risa, se recompuso y miro fijamente al chico que tenía delante de ella-. En serio, explícame lo de abajo.
Damon se puso serio y la miro antes de apoyarse en la pared de al lado de la puerta.
-No te voy a dar muchos detalles, simplemente el que a entrado es mi tío, tiene algunos problemas con el alcohol, sí nos hubiera visto las cosas podrían haberse puesto muy feas.
-Entiendo...¿Es por eso que has salido tan rápido que ni me has visto y casi me matas?
Damon apartó la mirada de ella y fijó su mirada en la puesta de sol. "¡Mierda Molly no hagas eso, no lo conoces, ni eres policía, nada de interrogatorios joder!"
-Lo siento, no tendría que haber preguntado, no es de mi incumbencia.- Damon estaba a punto de decir algo cuando el móvil de Molly comenzó a sonar en su bolsillo.- Mierda, espera un segundo-.sacó el móvil del pantalón y se dio la vuelta.- ¿Si?
-¿Molly?.-"Mark joder, me he olvidado de el".- Te he mandado un montón de mensajes.
-¡Mark mierda! Lo siento mucho, no estaba pendiente del móvil, ¿Aún quieres quedar conmigo?
-¡Claro que sí Mo, no seas tonta!
-Uf, que alivio, ¿Donde nos encontramos?-. Molly escucho el golpe de la puerta de la azotea, al darse la vuelta Damon se había marchado.- Será gilipollas.
-¿Molly? Te recuerdo que eres tú la que se a olvidado de mi...
-¿Que? ¡No! No iba para ti Mark.
-Mmm... Vale, nos vemos en media hora en la puerta tú edificio.
-¿Estas bien?-. Molly notó la voz de Mark molesta.
-Perfectamente-. Mark colgó antes de darle tiempo a Molly para decir nada más.
Molly volvió a suspirar. "Que día más raro, no entiendo porque nunca tengo un día tranquilito." Bajó las escaleras hasta su puerta, donde todavia colgaban sus llaves de la cerradura. Miró una vez la puerta de Damon antes de coger coraje y entrar en su propio infierno.
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Al otro lado de la pared
Teen FictionMolly es una chica marginada, con una familia desastrosa y problemas en el instituto. Pero cuando todo parece estar apunto de estallar aparece alguien que hará que Molly vea el mundo de otra manera.