Bienvenida

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Soy Eren Jaeger y tengo 15 años, para ayudar a mi familia mi padre me ha mandado a trabajar en una mansión nueva. Me darán un trabajo dependiendo de mis capacidades, puedo ser desde un campesino de sus tierras hasta él mayordomo del dueño de la casa.
Estoy muy nervioso, he llegado caminando, la casa es enorme y toco él timbre de la reja que esta enfrente. Las puertas se abren de par en par dejándome entrar, camino por un enorme patio antes de llegar a la puerta de esa enorme casa. Al llegar toco nuevamente un segundo timbre, un joven de cabello rubio y unos grandes ojos azules me abre la puerta, se ve joven, creo que tendría la misma edad que yo.
-él amo lo esta esperando, sigame- me dice amablemente él muchacho y camina mientras yo lo sigo.

Esa casa era demasiado grande, caminamos por varios pasillos antes de llegar al lugar donde se encontraba él dueño.
-Disculpe por no presentarme antes, mi nombre es Armin Arlerth- me dice muy amablemente él rubio mientras me sonreía.
-mucho gusto yo soy Eren Jaeger- digo.

Armin toca a la puerta, desde adentro le responden algo que no logro escuchar y Armin abre la puerta. Estoy muy nervioso, no se que decir o hacer.
-Muy buenos días señor- me dirijo con una reverencia hacia una persona que esta sentada hasta él fondo de la habitacion. Logro ver una silueta, lo demás esta oscuro.
-Por favor sientese- me dice Armin señalando una silla que se encontraba casi en medio de aquella habitación, camino hacia la silla y me siento, escucho un pequeño portazo, Armin había salido de la habitación, me sentía mucho mas nervioso que nunca.
-Y bien ¿Quien se supone que seas tu y que quieres? Eres un simple mocoso que aun no sabe hacer nada, me imagino- una voz muy fría y cortante me habla desde él fondo.

-S-soy Eren Jaeger, engo 15 años y he venido a trabajar aquí, espero que usted me reciba, no le decepcionare.

-mmm, veamos lo que tienes- contesto aquella persona, llamo a Armin y le dijo algo que no logre escuchar, al terminar, Armin me llevo a una habitación, demasiado grande, pero no tanto como en la que estaba ese hombre.
-Él amo me ha dicho que limpie esta habitación- me dice él rubio, yo asentí y él se fue.

Entre allí y estaba todo lleno de polvo, en una esquina se encontraban los instrumentos necesarios para limpiar y comencé a trabajar en ello.

Tarde dos horas en limpiar todo, debía conseguir un puesto alto para beneficiar a mi familia, mis padres estaban pasando por mucho y yo necesitaba ayudarlos.
Salí de allí, Armin llego corriendo cuando salí y le dije que había terminado, de alguna manera él me miro sorprendido, entro e inspecciono todo para verificar que todo había estado bien.
Me llevo nuevamente a la habitación de aquel hombre y entramos.
-Amo, él joven ha terminado- dijo Armin y salio de allí.

Vi que la silueta de aquella persona se levantaba y caminaba hacia mi, su rostro salio a la luz, tenia una piel de porcelana, muy blanca y fina, sus ojos oscuros penetraban cuando me miraban de una manera muy fría, su cabello negro, un negro oscuro que brillaba con los pequeños rayos de luz que entraban. Me avergonze por ver a aquel hombre que se dirigía hacia mi y retire mi mirada. Sentía que sus ojos me observaban e inspeccionaban.
-Bien hecho, ahora te daré un trabajo- me dijo aquella persona. Llamo a Armin y le dijo algunas palabras, él rubio abrió los ojos de par en par, no se que le habrá dicho. Me saco de esa habitación y me llevo a otra, ahí habían varias prendas.
-A partir de ahora usted sera él mayordomo del amo- me dijo ofreciendome un traje negro. Yo estaba tan sorprendido, no sabia que hacer o decir, era la oportunidad para sacar adelante a mi familia
-E-esta ...b-bien- dije tartamudeando, me habían dado mas nervios, ahora hiba a servir a aquel hombre.

Armin se fue y me cambie, salí de ahí, Armin me estaba esperando afuera y me enseñó toda la casa, pasamos por varias habitaciones, no pude contarlas pero sabia que habíamos pasado mas de 20, había una que me llamo la atención, una puerta muy decorada, tenia incrustaciones de cristal y rosas talladas en la madera.
-Esa es la habitación de la señorita Mikasa, muy pronto la conocera- afirmo él rubio.
Seguimos caminando y terminamos de recorrer todo aquello, me llevo a una habitación que se encontraba al fondo de un pasillo, al lado de esa habitación había otra con la puerta muy grande, un poco mas grande que él de la señorita Mikasa.
-Esta es la habitación del amo Levi-afirmo Armin- y la habitación que se encuentra al lado sera la suya-
No dije nada, él rubio me explico todo lo de ahí, ese hombre que me había mirado tan fríamente se llamaba Levi Ackerman. Armin me llevo a su oficina y entramos.
-muy buena suerte, Eren- me dijo y se fue caminando por él pasillo.
Nervioso, entré, él seguía sentado en su silla, revisaba unos papeles, sentí que se paro camino hacia donde yo estaba.
-Toma esto y pontelo- me dijo entregándome una caja.
Abrí la caja y lo que encontré fue un traje ¡de maid! Era negro lleno de encajes y estaba algo corto.
-Pe-pero s-señor esto...-

-No te atrevas a contradecirme y pontelo, y para ti soy amo a partir de ahora- me dijo bruscamente- trabajas para mi así que ahora harás lo que yo te diga- me dijo disparándome con sus penetrantes ojos oscuros y frunciendo la frente.
Me puse él traje, lo sentía raro, incluso tenia unas medias negras, este señor es un pervertido, entre nuevamente a su oficina y me quedo mirando.

-muy bien- ahora ve a limpiar, me dijo.

Salí apresuradamente de ahí y me puse a limpiar la casa, estaba demasiado avergonzado, había tirado mi orgullo a la basura, ese traje se sentía raro e incómodo.

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Narra Levi:

Ese chico no es mas que un mocoso, pero de alguna manera me hace sentir tranquilo, creo que sera gracioso divertirse un rato con él.





Esto es solo un inicio, mas adelante vendran celos, y umm ..un poco de Lemon (≧∇≦).
Bye bye 7w7

Porque Me Cambiaste (Riren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora