P R O T E C T O R

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La princesa estaba aterrada. Se agarró los cabellos con desesperación, ella no recordaba toda esa historia, pero la había vivido.

-¿Como es posible que yo no recuerde eso?- preguntó ella.

-Creo que estar tres años dentro de una torre, sin nada que hacer, pensando en un principe perfecto no te hizo bien a la cabeza... supongo que sólo pensabas en eso y aislaste los demás pensamientos de tu cabeza- dedujo el lobo.

-Esto no puede ser...¿Que vamos a...? ¿que haremos? ¡Tenemos que salir!

-Pero no se puede, aceptalo.

-¡Debería poderse!

-¡No se puede! ¡El muro es infinito, el bosque es pequeño y lleno de monstruos incluyendome! Si sales de esta cueva o de la torre, la niebla te poseería y te usaría para salir, entonces ¿quién pierde? ¡Yo lo haría! Y no quiero quedar aquí encerrado.

La princesa suspiró. De pronto una pregunta había llegado a su cabeza.

-¿Es por eso que me estás cuidando?- preguntó.

-No te estoy cuidando, sólo te alejo de la niebla...

-Si, me estás protegiendo.

-Cállate, no quiero enojarme contigo.

-Eres una especie de protector para mi- ella sonrió al ver que lo molestaba.

-Me iré a buscar mi comida, te traeré fruta como siempre...- el lobo se transformó y se fue corriendo.

Esperen...¿como siempre?

El Lobo Y La Niebla |ONESHOT| #EDreamsAwards #ECAwardsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora