SENTIMIENTOS OCULTOS

SALIDA 25

Desperté, fui a desayunar algo ligero, luego de eso encendí la lluvia artificial y empecé a bañarme.

Salí de ducharme y empecé a cambiarme, mi atuendo consistía en un vestido color azul turquesa por encima de las rodillas y con un escote en corazón, unas zapatillas color beige, cabello suelto, un maquillaje sencillo y unos aretes y un brazalete en la mano derecha a juego con las zapatillas.

Escuche el timbre y baje las escaleras, pase por el living y abrí la puerta color blanca y hay estaba Jeysson con una rosa en la mano, una camiseta color azul rey, un pantalón de negro, unos zapatos color negro.

Me entrego la rosa y me pregunto si ya estaba lista.
Yo accedí con la cabeza, deposite la rosa en un florero de la mesa de vidrio y tome mi bolso.

Le pregunte a donde íbamos y el me respondió:

-Ya lo veras, recuerdo que yo era así de curioso a tu edad.

-Jaja te recuerdo que sólo eres tres años mas grande que yo.-respondí en un tono sarcástico

Subimos a su auto color rojo y el empezó a conducir, en el camino íbamos hablando sobre nosotros, el me platicaba que estaba estudiando enfermería y algunas cosas que ya había aprendido. Mientras que yo le platicaba sobre mis gustos.

-Llegamos.- dijo

Luego de casi 2 horas de viaje llegamos, después de que estacionara el auto empezamos a caminar, de la nada el me tapó los ojos con sus manos y me dijo si confiaba en el, yo respondí que si y me empezó a guiar con su voz.

(...)

-Bien, habré los ojos.-dijo

Me lleve una gran y hermosa sorpresa al ver esto

-Es hermoso, gracias.- dije

-No agradezca señorita, quise que se distrajera un poco y dejara de pensar en esos idiotas.-dijo

-En verdad te lo agradezco.- dije

-Espera un momento.-dijo

-Esta bien.-dije

Salio y lo seguí con la mirada hasta que se perdió entre los árboles.

Luego de poco más de 5 minutos regreso con una cesta, la coloco en el pasto y yo me agache para ver que contenía.
Empezó a sacar primero un mantel color carmesí, luego un agua de frutos rojos, un trasto con lasagna dentro, cubiertos, servilletas, vasos, y de poste flan.

Era algo un tanto sencillo pero era muy lindo que alguien se hubiera tomado la molestia de hacer eso por mi.
El sirvió la comida de ambos, empezamos a platicar, yo me senté en el pasto.

Terminamos de comer, guarde las cosas en la cesta, caminamos hacia el auto y el me llevo a mi casa.

-Espero que te ayas distraído un poco.-dijo

-Gracias, y si me distraje.-dije con una sonrisa

-Adiós señorita Collins.- dijo con una pequeña sonrisa

-Adiós señorito Brown.-dije con una gran sonrisa
El por mi respuesta comenzó a reír.

Me dio un beso en la mejilla y yo hice lo mismo.
Entre a mi casa, cerré la puerta y me asome por el ventanal, el subió en su auto y se marcho.

Subí las escaleras hacia mi recamara, me puse la pijama, me acomode en mi cama y me quede dormida.