Empezando mi Historia+18

Chapter 6: Capitulo VI Conociendo al enemigo+18

Hola! Aquí con un nuevo capitulo.

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Ya Sai le había puesto al tanto de la misión, y mientras seguían las indicaciones de Hinata, y continuaban saltando de árbol en árbol... iba recordando los sucesos de hace dos meses.

Flash back

Después de haber dormido en los brazos de Kurama, cuando despertó era aproximadamente las 10 de la mañana, era la primera vez que se quedaba dormida y mas a un en brazos de un hombre, mejor dicho, de un demonio, pero la verdad era que se sentía muy a gusto con él.

En el momento que abrió los ojos lo encontró viéndola fijamente, lo único que pudo hacer fue verlo directamente a esos color rojo fuego como la sangre, lo primero que vio fue una mezcla de duda y perturbación, pero viéndolo detenidamente descubrió un gran vacío y gran soledad, algo parecida a la de Naruto en los momentos que lo vio tan roto, tan destruido.

Por alguna extraña razón le dieron ganas de abrazarlo y eso fue lo que hizo, era algo que sin darse cuenta ambos necesitaban, después de ese abrazo el la acompaño a casa lo invito a pasar, y además donde se enteró por medio de una nota que sus padres habían decidido irse de viaje una segunda Luna de miel por tiempo indefinido ya que irían a la capital del fuego y otras Capitales... preparo un desayuno casi almuerzo para ambos comieron en un silencio muy agradable... al terminar kurama se fue, no sin antes recordarle la promesa hecha, dejándola sola y con una extraña sensación de que algo le faltaba, después de ahí todo el día paso realmente rápido, no había pensado ni en Naruto ni en lo ocurrido ese día.

Al otro día después de salir de su turno del hospital de Konoha, al pasar justo en frente de la plaza principal se encontró con la peor escena que pudo haber visto, Naruto y Hinata besándose y tocándose por suerte pudo irse sin que ninguno de los dos se diera cuenta de su presencia, ese día lloro sin control en su cuarto, sola y abandonada como se sentía.

Al siguiente día cuando salía del hospital se sintió observada, aunque no le presto mucha atención y siguió de largo camino a la cascada que estaba en el bosque, cuando estaba en medio del bosque... Ya creo que puedes salir le dijo...de un momento a otro frente a ella apareció su perseguidor, como sabías que te venía siguiendo...Soy ninja Kurama-kun, pero la pregunta aquí es que haces siguiéndome?

Kurama: Simplemente porque no tengo nada que hacer y como el mocoso esta ocupado y no tengo mas amigos a parte de ti pues vine a verte.

Sakura: Mmmmm ok si es así. (Dijo mientras seguía caminando rumbo a la cascada, siendo seguida por Kyu-kun) pero la próxima puedes acercarte en vez de seguirme, lo dijo con una gran sonrisa.

El no dijo nada solo la siguió al llegar, ella se empezó a desvestir ante la mirada de el que estaba mas rojo que un tomate, que lo veía con una gran sonrisa por el estado en el que estaba jamás pensó que el pudiera estar tan rojo por los cielos el era un demonio, ni en sus mas locos sueños sucedía algo así, cuando terminó de desvestirse quedó con un short negro tipo lycra y un top rojo, ya cambiada se metió al agua de un salto, ahí lo invitó a meterse con ella al principio se negó, pero a Haruno Sakura no se le ganaba tan fácilmente, así que aprovechando que el estaba cerca de la orilla del río cuidando su ropa, se acercó a el levantando su mano que el tomo para ayudarla a Salir, pero ella haciendo gala de su descomunal fuerza tiro del y lo lanzó a la mitad del río, al voltear al lugar y no verlo, creyó que se estaba ahogando, inmediatamente se acercó nadando pero nada que lo encontraba sintió un escalofrío, recorrer su espalda, y al dar media vuelta se lo encontró con la cabeza gacha todo empapado y la franela se le pegaba al cuerpo como segunda piel, pensó que estaría molesto y mas aun cuando alzó la cabeza y pudo ver sus ojos brillaban con un deje de maldad, y mas cuando con una voz gruesa y fuerte le dijo: Huye... sin pensarlo dos veces empezó a nadar a la orilla siendo seguida por el, se sentía asechada como una presa que estaban a punto de comer, cuando estaba por llegar a la orilla el halo de ella hacia lo profundo del río donde sin saber como ambos empezaron a jugar como dos niños pequeños y así pasaron el restó de la tarde juntos.