Capitulo 13

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Un sonido infernal me despertó de mi hermoso sueño, en realidad, ni siquiera recuerdo que carajo estaba soñando... Fue mi celular quien me impidió seguir durmiendo, lo levante del suelo, y mire quien me llamaba... era... ¿Anthony? ¿Cómo mierda consiguió mi número?

-Te juro que cuando te vea cara a cara. ¡Te voy a quemar el rostro!- le grite con furia y amenazándolo.

-Hay, Dios mío. ¿Siempre eres así de agresivo?-dijo burlándome.

-Habla...

-Shh, calla pequeño. Escucha, ya estoy en el edificio central de la ciudad, necesito hablar contigo. Tu hermana dejara de trabajar para mí, pero no creas que la dejare solo así- y soltó una risa demoníaca y malévola, mientras yo vi que se abrían las puertas de la celda, puesto que la prisión estaba vacía, ni siquiera los prisioneros estaban despiertos, sentí una extraña sensación de miedo que golpeo en mi garganta y se entrometió en las zonas más profundas de mí, a continuación Anthony colgó el teléfono, y vi que una sombra se encontraba al final del pasillo, camine lentamente en posición de defensa para no toparme con nada malo ni despertar a nadie haciendo un alboroto.

Logre ver que la celda de Milton tenía la llave puesta en la puerta, me invadió una intriga enorme... ¿Cómo Anthony tenía mi numero? ¿Por qué las llaves estaban en la puerta de la celda? ¿Por qué no había nadie despierto? ¿Dónde estaban los guardias?

Luego un aviso que al parecer venia de Lucy, interrumpió mis pensamientos.

-Hey, ¿sabes en donde se encuentran todos?- me dijo apuntándome con una M4 sosteniéndola con las dos manos.

-Lo mismo te iba a preguntar...

-Pues no funciona, no encuentro a Max y Ariel.

-Vaya, vaya, vaya...- escuchamos la voz de la silueta que veía al fondo... esa desgraciada silueta era de... Anthony... ese desgraciado se acercó caminando lentamente hacia nosotros con las manos en alto, primero vimos la parte inferior de su cuerpo acercarse porque una luz estaba rota y luego el resto.

-¿Qué quieres?- le grite con tono amenazador. Pero el muy "Fucking" lanzo una soga electrocutadora a Lucy, a la cual la hizo derribar al suelo y retorcerse como si tuviera frío pero aún más potente.

-¡Corre!- me grito rápidamente Lucy.

-No.

-¡Corre!- volvió a gritar.

-Haz lo que ella te pide, Brian, te salvara la vida- me dijo con voz amenazadora como si fuera un fantasma, y como solía hacer lanzo su risa macabra. Yo comencé a correr, no sabría explicar hacia cual lugar, pero que debía irme era cierto y seguro. Pero antes de irme mire el rostro de Anthony, quería ver por lo menos la cara del desgraciado que ha hecho cosas horribles a este mundo. Era de piel blanca, cabello castaño casi negro, ojos celestes, cuerpo un poco grueso y no muy fuerte al parecer, pero como dicen: Las apariencias engañan.

Luego de ver su desgraciado rostro, note que extendía la mano como si tuviera poder, psíquico, con la mano abierta y el pulgar hacia arriba, mientras echaba alguno que otro temblor. No tenía idea del por qué lo hacía, me dio intriga pero luego pensé "Brian, concéntrate, debes irte lo más rápido posible de este lugar... Pero no puedes debes ayudar a Lucy a escapar, si tal vez lo otros escaparon seriamos los últimos en irse... ¿Tal vez? Estas basando esto en un tal vez, y si todos escaparon pero era una trampa afuera y Anthony quiere que vayas afuera..." (Suelo tener debates en mi cabeza)

-Brian, se acabó el momento de pensar- me sorprendí y quise pegar un grito pero en vez de eso solo un gemido. ¿Me había leído la mente? ¿De dónde saco esos poderes? ¿En dónde mierda estaba Lucy? Mientras yo me hacía un estúpido cuestionario en mi cabeza y lo miraba con cara de sorprendido, mientras caminaba hacia atrás sobre mis pies.

-¿De dónde sacaste esas habilidades?- dije mirándolo con furia y algo de temor.

-Tranquilo- y me hizo el gesto de STOP, poniendo su mano en vertical con los dedos hacia arriba.

Yo creí que estaba haciéndome algo a mí pero en realidad, estaba atrayendo algo con su mano, mientras me miraba con rostro diabólico. Maldito "Fucking" Anthony, me daba asco hasta pronunciar su nombre.

Con su mano derecha colocada en vertical, atraía... a Lucy...

Intente tomarla de la mano, pero Anthony hizo un gesto la mano izquierda, el cual lanzo una ráfaga de viento como si fuera un tornado y me sostuvo ahí con mis brazos en dirección hacia abajo, mi cuello derecho como si fuera un militar, nada más que parado en el aire, definitivamente no me podía mover... trate de agarrar una madera que había hacia uno de los pasillos a mi derecha, la cual estaba la madera sobre un escritorio pequeño.

-Tu vienes conmigo...- le dijo con voz suave pero maldita a Lucy, ella iba como flotando en un ambiente dormida en un sueño, pero claro, quien no estaría durmiendo en un profundo sueño si te electrocutan. Trate de moverme pero el desgraciado me lo impidió, lo más extraño fue que yo estaba todavía en el aire mientras él se iba caminando con Lucy a su costado derecho.

El cuerpo me dolía, nunca había estado tan quieto, mis brazos se me acalambraban, me incomodaban la posición en la que estaba mi espalda al igual que mi cintura. Grite para poder dejar salir mi dolor interno, y después grite de nuevo el nombre de ella dos veces, pero Anthony seguía caminando. Hasta ahí llegue, comprendí que ya no se podía hacer nada, estaba hecho de que no podía moverme ni hacer algo por ella.


Ley y Justicia (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora