Sombras Frías (Camren)

Capítulo 17

Narra Lauren

Ha pasado un año desde que huimos de Italia, no hemos vuelto a saber nada de esa mafia excepto que siguen siendo nuestra mayor competencia, Cabello es muy inteligente en los negocios y se nota que tiene la misma mente que su asqueroso padre.

Normani se esfuerza mucho en volver a la normalidad pero aquella bala le rompió los ligamentos cruzados y aunque ya puede andar y moverse con agilidad, le falta bastante para poder meterse en cualquier misión, necesita poder correr como antes, saltar sin miedo, lo que le caracterizaba. Se frustra demasiado y es normal, entiendo que odie estar así y puedo jurar que si se encuentra a Cabello ahora mismo la mataría con sus propias manos.

Estas últimas semanas nos ha llegado información de que la mafia china está un poco debilitada, podríamos atacar y llevarnos toda su riqueza, destruir todo su imperio para expandir el mío. Sé que todas las mafias quieren lo mismo que yo pero casi ninguna se atreverá a actuar sabiendo que nosotros participamos, nos hacemos respetar y nadie tiene una plantilla como la nuestra, nadie excepto Camila. 

Estoy en mi despacho mirando las finanzas de los chinos cuando pican a la puerta.

Sean: Es importante -dice entrando sin permiso-.

Lauren: ¿Qué pasa? -despego la mirada de la pantalla para prestarle atención-.

Sean: Como habíamos planeado la mafia italiana también pretende atacar a la china, enfrentarnos entro las dos sería correr el riesgo de tener muchas bajas y aunque al final les consiguiéramos ganar, costaría mucho volver a tener una plantilla de tanto nivel.

Lauren: No voy a renunciar a toda esa riqueza solo por no perder a unos cuantos -digo seriamente para volver a mirar a la pantalla-.

Sean: Ahí está el punto de la cuestión, Camila Cabello quiere reunirse contigo -levanto la cabeza de golpe al oír su nombre- Quiere llegar a un tipo de acuerdo.

Lauren: ¿Qué acuerdo?

Sean: Eso no lo sé, aún no le hemos contestado, queríamos saber si estás dispuesta a esto o no, hay que pensarlo bien y.. 

Lauren: Llámala, -le corto- quiero que le digas que quedamos aquí dentro de exactamente una semana, te dejo a ti elegir el restaurante.

Sean: ¿Estás segura? -pregunta al ver como ni siquiera lo he pensado-.

Lauren: Sí, pero ya os podéis estar preparando todos, esta semana va a ser muy dura, necesito a la mitad de mis hombres en el restaurante y alrededores, ¿estamos?

Sean: En la ciudad ahora mismo hay 300 hombres.

Lauren: Me da igual cuantos hayan, quiero a la mitad en la zona de entrenamiento, te dejo elegir a los mejores.

Sean: ¿Y Normani? -mierda, no me acordaba de este pequeño detalle- No creo que le haga mucha gracia el asunto.

Lauren: Déjame a mí hablar con ella, ahora vete a avisar a Cabello, no hay tiempo que perder.

Mi vida ha estado relativamente tranquila hasta que ha aparecido de nuevo la imbécil de Camila, y es que encima no sé cómo contarle a Normani que voy a volver a verme con ella y además seguramente lleguemos a un acuerdo, me va a matar.

Entro a la zona de entrenamiento y veo a Normani en su sesión de rehabilitación sudando por volver a su rutina de antes. Me acerco por la espalda y le toco el hombro, se gira y me sonríe y yo no puedo resistirme a devolvérselo.

Normani: ¿Qué haces por aquí? -dice cogiendo su toalla y pasándosela por la cara-.

Lauren: Verás.. necesito hablar contigo -digo seria-.