Lo seguí hasta la pequeña puerta donde se había parado y con un movimiento de mano me dijo que pasara por ella.
Al otro lado de la puerta me encontré con un jardín precioso al que te adentravas por un camino de piedras cubierto por arcos de rosas blancas.
-Es.....es precioso- dije yo mas bien para mi.
-Lo se, probablemente sea esto lo mas preciado que tenemos en el palacio- dijo el con una sonrisa amistosa.
Sabía que este hombre no podía ser trigo limpio ya que era el jefe de Karl y por lo tanto también el jefe de Dave, pero de alguna forma no podía imaginarme a este hombre con los ojos rojos y con colmillos afilados que sobresalen de su boca.
-Vamos, acompañame- dijo el señor adentrándose en el camino de piedras.
Como pude lo seguí con los tacones que eran aun mas difíciles de manejar si tenias que ir a un ritmo tan rápido.
Suspire de alivio cuando se paró enfrente de una fuente.
Al llegar a su lado pude contemplar que lo que de lejos parecía una figura amorfa que soltaba agua, en realidad era un lobo de piedra blanca que soltaba agua por la boca.
El hombre o mejor dicho vampiro se quedo mirando la estatua del lobo por la que salia agua tan clara, que con solo verla te entraba sed.
-¿Lo reconoces?- dijo el señor refiriendose a la estatua.
Yo lo miré por un tiempo.
-Es una replica de un licantropo- dije yo.- ¿Porque deberia reconocerlo?
-¿Adam no te contó la leyenda del hombre lobo?- preguntó y en el momento sabía a lo que se referia.
-¿Era una leyenda?- pregunté confundida.
-Algunos dicen que si y otros dicen que no, pero yo sinceramente no creo en esa historia- dijo con la mirada fija en la estatua.
-No lo entiendo.......si es una leyenda........vosotros no deberiais tener el veneno que Lucifer os otorgo, y sin embargo lo teneis- dije yo todavia insegura.
-Es cierto, pero los hombres lobo tambien lo tienen- replico el.- O al menos uno parecido que hace lo mismo en los vampiros, se vuelven medio humanos y medio vampiros y luego mueren o como en el caso de tu amigo, se quedan en coma.
Yo lo miré perpleja y por un momento su cara hizo un gesto de comprension.
-Entiendo- dijo el.- Al parecer Adam intento otra vez ponernos en el puesto del malo.
-Eso no es cierto- dije yo.- No tiene sentido que Adam apoye a los hombres lobo ¡El es un vampiro!
-Algo que no le enorgullece demasiado si te soy sincero.
Yo le mire con el ceño fruncido, a lo que el solto un suspiro.
-Ay querida, veo que no te han contado nada.
-¿Contarme el que?- pregunté.
-¿No te has preguntado por que te hemos llevado aqui y porque la familia Conley no queria que te fueras de su casa?
-Bueno....si....- dije yo pero fui interrumpida.
-Sky nostros ya esperabamos tu nacimiento antes de que tus padres siquiera nacieran- dijo el.
-Eso es ilógico- dije yo.
-¿Y que es lógico Sky? Hace apenas unos dias pensabas que el mundo solo era habitado por humanos y animales y ahora convives con licántropos y vampiros.
Me quedé callada, el tenia razón aunque no lo quisiese admitir.
-Sky tu tienes algo que la familia Conley quiere mas que nada.
Suspire profundamente.
En el fondo supe desde el principio que tenia que tener algo por lo que la familia Conley quisiera que no me fuera de su casa.
Pero simplemente me daba miedo empezar a pensar que querrian de mi.
-¿Que es ese algo que ellos tanto quieren?- pregunté antes de que me pudiera arrepentir.
-No lo se, pero lo averiguare- dijo el con una leve sonrisa en los labios.
-No entiendo.....
Fui interrumpida.
-¿Adam te contó la Profecía de la Elegida?- preguntó, y yo reaccione al instante al oír esas palabras.
-¿Que es 'La Elegida'?- pregunté.
-Eso depende de a quien se lo preguntes, algunos dicen que es un castigo de Lucifer, otros dicen es la solución para todos los vampiros y otros simplemente no creen en ello- respondió el.
-¿Y usted que cree que es?- pregunté.
-Creeme, no quieres saber lo que yo pienso que es- dijo.
-¿Porque?
-Sky tu eres La Elegida.
Yo lo miré perpleja aunque no era la primera vez que me llamaban asi.
-¿La elegida para que?- pregunte.
-La elegida para liberarnos de nuestra maldicion eterna.