baby heart ; clemmings.

xxiv.

con insistencia siguió frotando la piel de sus antebrazos, se sentía mareado y estaba tomando color. estaba sentado fuera de la enfermería esperando que saliera el par de chicos que habían entrado antes que él, según el conserje.

puso ambas manos en su frente y recargó el peso de su cabeza sobre éstas, soltando largos suspiros de aire caliente, movía sus pies alternándolos a un ritmo ficticio, sus dedos se sentían fríos dentro de los calcetines. levantó un poco su frentr y pegó sus palmas para frotarlas una y otra vez, calentando su piel, aunque ni siquiera notase que su piel hervía como si de un leño se tratase.

dio un pequeño salto cuando el asiento junto a él se hundió, y pensó que realmente estaba enfermo, pues nunca reaccionaba ante cosas tan pequeñas.

"no te asustes." rió la chica a su lado. "no voy a lastimarte."

"hmh." asintió mirando hacia el frente ahora.

"¿estás intoxicado?" preguntó, viendo el rojo en su piel.

"no lo sé." suspiró. "¿qué haces aquí? te ves sana."

"unos pequeños moretones."

"¿pelea? no te ves como si pelearas."

"no lo hago, al menos no aquí." suspiró. "pero tengo problemas en casa."

"¿y lo dices tan tranquila?" preguntó frunciendo el entrecejo.

"eres un extraño, no me importa tu opinión." rió. "no puedes juzgarme."

"tienes razón." susurró. "¿quieres pasar antes que yo?"

"pasa tú, te urge irte a casa y algunos medicamentos."

rió, quizás era verdad, pero él no estaba realmente pendiente de eso. apenas la puerta se abrió vio salir a ashton sosteniendo junto a su mejilla una toalla que dejaba caer gotas, posiblemente donde envolvía hielo. seguido a éste arrastraba sus pies calum, mientras con su mano derecha acariciaba la izquierda, que se encontraba vendada. se preguntó por unos segundos si pelearon, lo cuál era más que probable. tosió antes de levantarse y dio una sonrisa torcida a la chica que estaba sentada junto a él.

"lie." dijo ella. "me llamo lie."

"luke."

"lo sé." rió.

el rubio sólo entró a la sala, sentándose en la fría camilla.

la enfermera comenzó a preguntarle cosas.

y para cuando salió, michael esperaba por él, dispuesto a cuidarlo el tiempo que fuese necesario.

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disculpen lo tarde <//3

gracias por estar en mi vida, o sea, aunque sea sólo leyendo y aunque sean fantasmas, son fantasmas buenos