Creí Que Era El Amor De Mi Vida

Capítulo 37

Terminando de cenar, Rubén llevó a dormir a Gadel, yo estaba en la habitación y luego de minutos apareció Rubén. Se acostó conmigo y me beso pero no reaccione a su besó

R: ¿que pasa? ¿estáis enojada?

Le mire seria aparentando que estaba enojada, pero sinceramente nunca estaria molesta con alguien como él

A: ¿con que el bebé se llama "¡uy!"?

Me miro y trato de aguantar su risa, cerro los ojos rendido

R: bueno... es que ese nombre es perfecto, porque en realidad si lo piensas... aquel día nisiquiera teníamos idea de...

Le seguí mirando seria pero sonrei un poco, el soltó una pequeña risita

R: jeje, admitelo, te da risa

A: un poco, si. Ya mejor hay que dormir Rubén, descansa

Le besé y se giro dandome la espalda, lo abracé por detras y me acerqué a su oido

A: ¿a donde iremos de luna de miel?

Susurre a lo que el se giró mirándome un poco sorprendido

R: ¿a donde quiereis ir tu?

A: donde estéis tu y Gadel, todo sería perfecto

R: dejame pensarlo bien

Dijo sonriendo, le besé y luego de rato nos quedamos dormidos

|AL DIA SIGUIENTE|

Desperté algo perdida, sentí que había dormido mucho, mire el reloj y eran 8:01 am. Estaba entrando Rubén con el desayuno, sonrió

R: hola, te he traido el desayuno

Le sonreí agradecida

A: gracias Rubén, ereis el mejor

Se sentó a mi lado y empecé a comer

A: ¿ya desayunaste?

R: si, me levanté temprano porque mi madre me habló, dijo que era algo importante, quiere que valla en la tarde con ella ¿me acompañas?

A: si

Estaba por comer otro bocado y me llegaron unas náuseas tremendas, hice todo a un lado y salí corriendo al baño a vomitar

R: ¿todo bien?

Le hice una seña como para decir: "un segundo" terminé y me lave los dientes, salí un poco mas tranquila, Rubén me miro esperando

A: perdon Rubén, tu comida estaba deliciosa, pero nose, me entraron unas náuseas que ¡ay Dios!

Dije poniéndome la mano en la frente, solo sonrió

R: no te preocupes, es normal por el embarazo, mejor dime que se te antoja y yo lo preparó

A: por ahora nada, pero gracias por la oferta, ire a cambiarme

|HORAS DESPUÉS|

Estabamos llegando a la casa de mi suegrita, lose, es una amor. Bajamos del auto y Gadel nos tomó de la mano, Rubén tocó y abrió el padrino

P de R: ¡hola, pasen!

Dijo dándonos un abrazo, entramos y nos sentamos en el sofa

P de R: ahora viene tu madre Rubén, ¿gustan algo, agua?

R: no, gracias

A: yo si

Dije apenada, sonrieron