Fue por pura coincidencia - Justin Bieber

¡Es Justin Bieber! - Capitulo 2.

 Estaba sola, aunque prefería estar aquí que estar allá adelante toda apretada como sardina para ver a un simple chico, lo malo es que me dieron ganas de ir a hacer pis pero no había nada cerca a donde poder ir, entonces me fui a la puerta del costado del hotel y le dije al guardia:

 

 -Oiga señor, me deja ir al baño es que no me puedo aguantar –dije tratando de aguantarme y haciendo un bailecito medio raro.

 

 -No creo que sea posible –dijo sin moverse, como si fuera de piedra, sin expresión alguna. 

 

 -Pero es que no puedo aguantar le prometo que voy y vuelvo rápido.

 

 -¿Pero y si no vas al baño y vas a ver a Justin Bieber? –respondió él.

 

 ¿Esto es enserio? COMO IBA A PREFERIR IR A VER A UN CHICO ANTES DE IR AL BAÑO, okey, okey, tal vez eso lo haría una fan de él, pero yo no era una. -No lo creo, él no me llama la atención, en serio si quiere me puede acompañar hasta la puerta del baño y esperar hasta que salga de él, se lo suplico –dije tratando de poner ojos de gato apenado.

 

 -Bueno, bueno, no es necesario, te creo, te dejo pasar con la condición de que vas y vuelves lo más rápido que puedas y no le dices a nadie que te deje pasar porque si no me pueden despedir –dijo aun serio.

 

 -¡Gracias! ¡Gracias! –dije abrazándolo.

 

**********

 

 Estaba dentro del hotel. Estaba buscando desesperada un baño, veía como todas las personas corrían de un lugar a otro, se veían atareadas y yo, ahí viendo a todas las niñas pegadas a las ventanas, esperando ver señales de su ídolo.

 Estaba tan aliviada de poder haber hecho pipí, así que me dirigía a la salida, lo malo es que no sabía dónde estaba, me había perdido, y yo lo único que quería, era salir. No quería que me preguntaran que quien era y que era lo que estaba haciendo, podrían llegar a pensar que era una “Belieber”

 Miraba a todo mi alrededor, chocaba y tropezaba a cada rato con las personas desesperadas.

 Había visto el anuncio de “Exit” de la puerta trasera, ya me quedaba poco para poder salir de ese infierno, se me llego a formar una gran sonrisa cada vez que me acercaba a la salida. Estaba a unos pasos pero no pude seguir avanzado, ya que unas manos grandes me detuvieron. Yo voltee y vi que un hombre grande que parecía gorila me detenía.

 -Identifíquese señorita –me dijo serio.

 -¿Eh? ¿Qué cosa? –dije atónita sin saber responder bien.

 -Que se identifique le dije. Necesito saber quién es usted.

 -Ouh, emh, soy  Amy, iba de salida. Así que disculpe -dije soltando su mano de mi brazo y dándole una sonrisa fingida.

 -Necesito que me acompañe –dijo volviéndome a tomar el brazo-. Necesito ver si está registrada en el hotel, si no lo está, podría estar en serios problemas.