Finite

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Saltar.
Arriesgarse.
Darlo todo.
Tan rápido como el aliento en el frío aire.
Tan dramático como la muerte de la fe.
Perderlo todo.
Ganar todo.
¿Qué diferencia hay?
¿Cuánto tiempo ha pasado desde que te enfrentaste a tu humanidad?
¿Qué es lo que en verdad quieres?
Eso , aquello que ves iluso, es tu verdadero camino.
................
Era cautivante ver cómo Piscis movía sus dedos.
Meñique con meñique, anular con anular. Así con todos sus dedos. Al revés y de regreso. Movimientos rápidos y ansiosos. Le recordaban a las olas.
Recostada en sus piernas , "mirando" la pantalla.
Hace unas horas el chico rubio había llegado a su casa. Con expresión nerviosa y dolorida. Ansiosa ella había intentado sacarle la verdad , pero el chico no habría de decir nada. Rendida puso una película.
Había tenido  unos días duros en el trabajo. Su suplente había llegado. Al igual que varios chicos nuevos.
Así que se recostó en el sillón , pero Piscis la obligó a usar sus piernas de almohadilla.
Aquello era demasiada confianza. Le daba en cierta parte más libertad física a Capricornio. Pero la ponía nerviosa y somnolienta.
-Que te pasa? Dímelo...... Escuchare para ti-susurro ella con un tono cariñoso. Realmente quería escucharlo. Comprenderlo. Sentirlo más cerca de ella.
Cerró los ojos y espero.
Lo curioso de cerrar los ojos es que todo parece ir mucho más lento.
Para ella, Sagitario hacía que todo corriera rápido , más rápido que ella, más rápido que nadie. Y ella ya no recordaba cómo correr. O tal vez había corrido demasiado tiempo.
Pero ahora , lejos de aquel incendio , se sentía tranquila. Como si ella misma fuera la flama de una vela.
Y Piscis fuera su reflejo en el agua.
Tranquilo , quieto, fresco , infinito.
Cuando Piscis levanto su cabeza y la apoyo sobre el sillón. Abrió los ojos rápidamente buscando el por qué.
El chico estaba de rodillas frente a ella , apoyado de codos en el sillón y observándola con vacío.
Ella no se levanto, ni se sorprendió por la repentina cercanía del chico.
Espero.
Y dejó una puerta abierta para las palabras de Piscis.
-Capricornio ...-susurro, con voz dolida y cansada-... ¿Es que acaso no lo vez? ¿O te niegas a verlo? ¿Eres tan adicta a el como yo lo soy a ti?-sonrío con ironía y dejó que sus palabras llegaran a la chica de oscuros rizos-... Pero de los cuatro , no soy yo el más dañado , ni siquiera el más importante, yo solo.... Estoy, esperando día y noche algo que probablemente no hay en tu corazón... Me gustaría dejar todo , pero no puedo , tú lo impides... Aun así , te espero , día y noche, espero algo que no se sabe...... Y sonrió mientras veo tu corazón consumirse por alguien que no te merece.... Y me rompo el corazón , todo por que el tuyo me es más importante.... Dolerá , será difícil, sentirás que no hay nada más que el vacío , pero eso no es cierto , por qué estaré yo ... Esperándote , así como la luna espera a que alguien la mire... Y estaré ahí , no lo dudes , cuando sea necesario tú volverás.... O esperare a la nada, pero tienes que aceptarlo... Sagitario está con otra , Sagitario no te ama, Sagitario te está dañando, Sagitario no es para ti.... Y yo , estoy perdidamente enamorado de ti - beso con delicadeza la frente de la chica de mirada perdida , lágrimas ardientes y corazón roto.
Se levanto , tomo su chaqueta y salió del apartamento.
Y probablemente de la vida de Capricornio.
Mientras que esta sentía una avalancha sobre ella. Un desastre que ha estado gritando su llegada. Un peso muerto en donde debería latir su corazón .
Y un desazón en sus labios.
Miles de réplicas y palabras que nadie sabía ni sabrá. Por qué murieron en sus labios.
Al igual que muchas cosas más.
Como su primer amor.
Sus anhelos.
Y la despedida al chico que se adentró en su alma dulcemente.
Lágrimas caían.
Por mil y una razones.
El dolor de la ilusión rota.
Algo que ya se sabia.
Sin embargo había más que solo dolor.
Había ganas.
Ganas de levantarse y correr hasta alcanzar la espalda del chico de ojos azules.
Ganas de ir.
Pero todo murió justo en ella.
¿Cómo puedes ser la fuente de vida y la muerte de esta?
Y de pronto dejó de llorar.
Por qué eso nunca a sido lo suyo.
Quiso cerrar con llave esas heridas, pero no pudo encontrar cajón.
Era algo que no cabía en ella.
"Bip, Bip"
Un mensaje.
Sagitario respiro hondo y observó a Piscis llorar mientras arrancaba yerbas del jardín.
El mensaje se había enviado.
Igual que muchos otro en ese instante , pero ninguno como aquel.
Que decía mucho menos que todos, y para el decía un poema.
Pero a pesar de lo que haría , no se atrevió a secar las lágrimas de Piscis.
Y solo miro de nuevo el mensaje enviado.
"Voy para allá"

CapricornioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora