Sentido comun.

976 50 4
                                    

¿Qué maldito problema tenía con las cerezas?
Pensó mientras metía otra cereza en su boca , disfrutándolo, de principio a fin.
Con lentitud pasó su lengua sobre sus labios , pensando en qué pasaría si aquel príncipe oscuro la besara , ¿Se volvería adicto al sabor de sus labios? ¿Los labios tenían sabor? ¿El la besaría algún día?
-lo hará , tiene que hacerlo ...-susurro mientras pasaba su mirada distraída por su oficina.
Nada más que un montón de cubiculos de madera, cada uno con computadoras , una silla incomoda y trabajadores aburridos.
Se removió incomoda en su propia silla incomoda , si , ella era una de esos trabajadores aburridos.
Ella era la chica del cliché básico, en una vida de lo más común , una más del montón. Nada destacable de ella. Pero era bonita, y eso tenía que hacer algo bueno por ella. Ella cumplía en toda regla con el papel de la chica cliché, así que tenía que esperar a que su príncipe llegará por ella y le solucionara la vida.
Algo bastante simple , pensó mientras se metía otra cereza a la boca.
Miro su reloj , las 9:30 am en punto.
Y de pronto la sangre en sus venas empezó a calentarse. Su corazón empezó la cuenta regresiva.
¿Estaba sufriendo un paro cardiaco por el reloj o por qué faltaban 5 minutos para que su jefe llegara?
Por su orgullo ella diría que es por qué tiene que entregar un trabajo a las 10, (que de hecho así es) , pero ella solo mira hacia el elevador.
Hace dos meses que ha cogido este problemático hábito. Si bien la manera en la que se conocieron fue la más apropiada para comenzar un romance de película, de esas que siempre acaban con un buen sabor de boca, él nunca más se le acercó personalmente , más que en lo profesional y en general.
Nada de sonrisas escondidas , nada de miradas indiscretas. La ignoraba cómo se ignora la pequeña mancha en la alfombra del elevador , o la diminuta marca de café que había sobre la mesa de descanso.
Por más que ella diera oportunidad e indirectas para ello.
Para muchas eso podía ser deprimente , un claro signo de que ahí no había nada por lo cual persistir.
Pero eso no se aplicaba para Aries.
Eso es exactamente lo que ella esperaba, ¿qué tipo de príncipe oscuro te mira dulcemente?. Esto no era un cuento barato , y pobre de aquel que se atreva a decirlo.
El elevador se abrió , dejando ver al terrible jefe para algunos , el modelo de pasarela par otras , y que un reto para Aries.
El paso rápidamente junto a ella , parecía estar preocupado por algo, lo cual era bastante extraño , él nunca dejaba entrever ninguna emoción.
Aries tuvo el impulso de levantarse y seguirlo , pero eso sería incorrecto. Le daría su espacio , ya después lo acosaría.
Y la excusa perfecta era entregar el trabajo.
En exactamente 20 minutos..... Maldita letanía.
Tomo otra cereza , esta vez sin preguntas tontas.
Mientras observaba como su príncipe oscuro cerraba la puerta de su oficina de un portazo.
Aries espero impaciente , pero espero lo cual ya era ganancia.
"-Buenos días, aquí tengo el trabajo , ¿le sucede algo?-
-Si , estoy enamorado de usted, cásese conmigo por favor-
-lo lamento , pero yo no lo conozco...."
Alguien arruinó su sueño con un pequeño golpe en su hombro.
Era un chico tan parecido como distinto de su príncipe oscuro. Cabello oscuro , pero a diferencia de su príncipe con tono rojizo, ojos chocolates , y piel blanca. También emitía ese misterio , pero mucho más agresivo que su príncipe.
Aries lo miraba con los labios rojo cerezas entre abiertos , y sus bonitos ojos azules entrecerrados , si , bonita expresión tenía.
-Disculpa , podrías decirme dónde está la oficina de Carlos Cabrera-preguntó en tono amable mirándola directamente a los ojos.
Ella intentó recuperar su expresión y recordar dónde estaba la oficina de su príncipe.
-Cla-Claro ... Al fondo junto a la puerta verde- ella señaló a lo lejos , el chico miro confundió a todas partes. Aries dando un suspiro desgastado se levanto para llevarlo a la oficina, chocando accidentalmente con el chico.- disculpa-
-no hay problema , ¿Te refieres a la que está frente a la copiadora ?-preguntó un poco más serio.
-si , justamente-
-Gracias-murmuro el chico y desapareció rumbo a la oficina, vaya persona más grosera.
Aries se volvió a sentar pero al momento de acomodar su silla se atoró con algo. Al revisar se encontró con un teléfono entre la ruedas.
Lo tomo con curiosidad. ¿De dónde saldría?
Al prenderlo apareció la imagen del chico grosero sonriendo dulcemente en el hombro de una chica muy bonita. La chica tenía un parecido fantástico con su príncipe , rizos oscuros y azulados , piel pálida , facciones afiladas y frías , una nariz demasiado respingado, labios delgados y rellenos de un tono vino, y los ojos oscuros más hermosos que había visto.
-¿Serán hermanos?...-murmuro para si mientras seguía admirando a esa chica, ella y el chico grosero se veían perfectos juntos , ojalá y fueran pareja.
Dejó el teléfono en la mesa y se puso a trabajar , que necesitaba excusas para ir a la oficina de su sexy jefe.
"... Después de los cambios en el sector de alimentos del año..."
Alguien tocó su hombro.
Aries tardo un poco en mirar a su espalda pero cuando lo hizo sus mejillas se colorearon de un bonito rosa. Su príncipe la miraba con una calma impoluta.
-Aries , entiendo que le guste el trabajo , pero no me quiero hacer responsable si se pierde su hora de comida- murmuro mirándola fijamente con esos bellos ojos, acelerando su respiración y volviéndola torpe.
Ella quiso responder pero no sabía que carajo decir , se supone que debería decir algo inteligente , que lo hiciera reír y los volviera más cercanos , pero nada salía de ella.
Así que recurrió a la mímica para decir ok. Ridícula.
Él asintió y se alejó sin dejar de mirarla.
Aries empezó a llegar al limite de su conciencia, terminaría convulsionándose en el piso si él no la dejaba de ver. Así que su mente recordó algo importante.
-mmm... Un chico dejó su teléfono, creo que lo conoce ....-gran frase Aries , por qué no te vuelves escritora. Tomo el teléfono y se lo mostró.
Su jefe miro el teléfono y lo tomo con expresión de fastidio y decepción.
- si , se a quien pertenece, gracias - dijo él mirando la pantalla con expresión de dolor.
Y la pregunta de Aries salió antes de que pensara lo que estaba punto de decir.
-¿Quién es la chica? ... Es preciosa-dijo ella con curiosidad nata.
Su jefe tardo unos segundos en alejar su mirada del teléfono para mirarla a ella con sorpresa.
-Es mi hermana... Y si , ella es preciosa-respondió el mucho más bajo y amable , incluso su tono de voz era más claro.
-¿Cómo se llama?-
-Carmen- El parpadeo intentando alejar algo de su mente.
-¿Dónde está ella ahora?-preguntó Aries en un tono dulce al notar el cambio.
-esperándome-respondió el alejando su mirada de ella.
-oh , en ese caso me retiro- Aries miro a su alrededor dándose cuenta que estaban solos.
Mirando al piso se alejó con su bolsa en el hombro.
-Aries , ¿todavía quieres el helado ?, el sábado inauguran una heladería cerca de aquí ...-preguntó el.
Aries se dio la vuelta con una mirada sorprendida y una sonrisa enorme.
-es un trato-respondió cortándolo.
El la miro con diversión y se alejó , guardando el teléfono en su bolsillo.
Recordando el rostro de su hermana , y su tranquila expresión al cerrar su ataúd.

CapricornioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora