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-Abrochense los cinturones, vamos a despegar. -Decía la azafata a través de un micrófono.

Malia, sentía miedo, pero sonreía. Decía que cuando en la vida te pasan muchas cosas malas, por probabilidad, te tiene que pasar una buena, y tenía la esperanza de que esa, era la mejor opción. Irse, rehacer su vida, encontrar a nuevas personas... cambiar.

-Hola. Soy Jack. -Le empezó a hablar el chico que tenía en el asiento de al lado.
Malia, se asustó, lo primero que pensó era un amigo de Stiles, vió su vida pasar, y por un acto involuntario, se alejó todo lo que pudo mientras comenzaba a llorar.

Jack era un chico de su edad, de Omaha, que iba a Inglaterra por trabajo. Intentó tranquilizar a Malia, y lo consiguió.
Era la primera vez que Malia hablaba con confianza a alguien, que se reía, que sintió amor por alguien.

-Bueno, parece que ya hemos llegado...-Decía Jack mirando por la ventanilla del avión.

-Si...-Suspiró. No quería que llegase ese momento. Se tenía que alejar de Jack, la única persona con la que en 10 horas, cogió confianza, ahora, tendría que volver a empezar. A confiar, a querer.

5 MinutosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora