1. Un día cualquiera

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Estoy durmiendo plácidamente, cuando de repente comienzo a escuchar unos terribles estruendos y tiros de pistola y metralletas. Doy un salto del susto y me pongo en pie lo más rápido que puedo; lo primero que veo son las noticias que están dando en un pequeño televisor, que antes no estaba ahí, que me encuentro en mi cuarto. En él, un periodista con un gran espanto en su rostro comentando algo que parece ser muy importante; pero nada agradable.

-- Nos comentan que; los creadores del virus están nuevamente atacando. Hemos averiguado que intentan destruir y controlar la zona oeste y este. Como ven todo está hecho un desastre debido a...

En ese momento veo al milímetro como al periodista le entra una bala por el lado izquierdo de la cabeza y le sale por el derecho. Después de eso no logro ver más que sangre por la lente de la cámara. La verdad es que aún no había visto nada igual, por eso al verlo ahogo un pequeño grito en mi garganta y se me pone la cara de espanto que antes llevaba el periodista asesinado. Cuando reacciono logro recordar que el periodista había mencionado la zona este. Cuando llego a entenderlo abro los ojos como platos y me tapo la boca. No solo por el terror que se me había producido, sino porque en el televisor habían dos hombres tumbados en el suelo idénticos a mi padre y a mi hermano. De eso empiezo a temblar y me caigo al suelo de rodillas. Después de unos minutos logro reaccionar y me pongo en pie lo más rápido que puedo.

Mi Mundo Roto |Pausada|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora