Alec y yo acabábamos de recibir la aprobación para adoptar a un bebé, los dos estábamos muy emocionados.
Era un brujo, era un bebé hermoso, tenía la piel azul, de un azul un poco oscuro, y sobre su pequeña cabeza se encontraban dos pequeños cuernos, al parecer él tenía dos marcas de nacimiento al igual que mi fiel amigo Ragnor.
Alec estaba feliz, desde que empezamos a salir el quería un bebé y a mi también me agradaba la idea.
Alec y yo estábamos pintando el cuarto donde se quedaría el pequeño Max, Alec había escogido el nombre en honor a su pequeño y difunto hermano, estaba quedando muy bonito tenía unos dibujos perfectos.
Estaba muy emocionado, en mis 400 años jamás se me había ocurrido tener un bebé, eso no era lo mio, lo mío eran las fiestas y los amantes de medianoche.
Esta experiencia iba a ser maravillosa, y aunque Alec se fuera de mi lado cuando su muerte llegara, siempre tendría algo con que recordarlo, mi pequeño Max.
Estaba terminando de acomodar la ropa que le habíamos comprado al bebé, y tendía unas mantas para la cuna.
-Te vez tan tierno haciendo eso.-dijo Alec asomándose por la puerta.
-Estoy muy feliz Alec, mucho.-dije.
-Yo también...me has dado lo más valioso Magnus. Una familia, siempre vamos a estar juntos pase lo que pase, vamos a cuidar juntos al pequeño Max para que sea un gran hombre.
-Te amo Alec, no sabes lo feliz que me haces. Siempre te amaré.
Alec se acercó a mi y me besó, sus manos temblorosas recorrían mi espalda, lo envolví en mis grandes brazos y lo besé con pasión.
El timbre sonó, debía ser Tessa ya que ella traería al pequeño Max.
Magnus fue a abrir la puerta y ahí estaba su amiga Tessa.
Le abrió la puerta y sus ojos fueron a dar de inmediato hacia el bebé.
-Aqui está Magnus.-dijo Tessa con una enorme sonrisa.
-Gracias por traerlo Tessa, adelante.
Los dos pasaron y de inmediato bajó Alec, emocionado.
Se acercó a Tessa y le dijo.
-¿Me dejas cargarlo?
-Claro que si Alec.
A Tessa, Alec le recordaba a Will, tenía la misma combinación: cabello negro y ojos azules.
Alec cargó al bebé y en ese momento supo que ya lo amaba y que nadie se lo iba a quitar ni a hacerle daño.
Magnus lo miraba con ternura, aquella imagen la guardaría en su corazón por toda la eternidad.
Nunca nadie se había querido casar con él, hasta que llegó aquél tímido cazador de sombras enseñándole de lo que se trataba el amor realmente.
-Los dejo solos para que disfruten a su bebé.-dijo Tessa despidiéndose.
-Muchas gracias Tessa, saludame a Jem por favor.-dijo Magnus.
Tessa se marchó y la pequeña familia subió al cuarto del bebé.
-Magnus...
-¿Mande?
-Gracias por todo esto, es maravilloso.
-Siempre voy a hacer lo mejor para ti garbancito, y para nuestro hijo.
-No sabes lo feliz que me siento.
Acostaron al bebé en su cuna y Alec pensó que aquella era el momento más preciado que tenía, tenía el amor y ahora tenía una familia a la cual cuidar.
Ambos se sentaron junto a la cuna y admiraron al bebé, era muy bonito a pesar de sus marcas de nacimiento era un bebé hermoso y tierno.
Magnus se acercó a Alec y lo besó.
-Jamas nadie quiso casarse conmigo...y me alegra haber esperado tanto. Valió la pena la espera Alec.
-Me alegra que seas tú con quien pase mi vida Magnus. No sabes lo mucho que te amo.
-Yo también te amo, Alec, mucho.
Magnus lo abrazó y le besó la frente a Alec.
-No has cargado al bebé, anda cargalo.
Lentamente Magnus se levantó y tomó al bebé en brazos, sintió raro.
Sintió que él si lo iba a cuidar y a querer como se lo merecía, no como su madre y padre habían hecho con él.
Sintió la vida entre sus brazos.
Unas cuantas lágrimas escaparon de sus ojos, se sentía feliz.
Alec lo abrazó y le quitó las lágrimas de los ojos.
-Siempre los voy a cuidar Alec, siempre.
-Estoy seguro de eso.
Magnus dejó al bebé en la cuna, y esté abrió lentamente los ojos, Alec pensó que eran los ojos más bonitos que él había visto, aparte de los de Magnus claro.
Alec le preparó leche al bebé, lo cargó mientras lo alimentaba.Minutos después Max volvió a dormir, Alec y Magnus se quedaron toda la noche junto a la cuna, Alec se durmió un rato al igual que Magnus pero en ningún momento se fueron a su habitación, querían quedarse toda la noche junto al nuevo integrante de la familia.
Espero les guste, me dio mucha ternura escribirlo.
¡Esta familia es hermosa!
Espero les guste y gracias por sus votos y comentarios.All The Love, MarcelaGao.