Capitulo 11
Un año después
Más de un año, había pasado más de un año cuando se separó de Harry.
Hacia un par de meses que había vuelto a su trabajo después de su excedencia. Y al volver le extrañó que cada ciertos días una parte de San Mungo les pidiera ingredientes para pociones. Intrigado por el asunto, cuando llegó la carta pidiendo más ingredientes, decidió llevar el pedido el mismo.
Con paso firme se dirigió hasta el ala Psiquiátrica de San Mungo. Como no sabía a donde llevar los ingredientes, decidió ir a la recepción; pero antes de llegar se encontró con la Medimaga Hermione Granger, quien era la que había pedido los ingredientes.
-Hermione -la llamó, porque era una de las pocas mentes que respetaba, ya que siendo joven había terminado sus estudios de medimagia y había ascendido rápidamente dentro de San Mungo.
Hermione se giró hacia quien la llamaba y sonrió.
-Ah Severus. ¿Tu mismo has traído los ingredientes que pedí? -preguntó impresionada.
-Si, quería saber porque los pides. ¿Por qué pides ingredientes de pociones cada poco tiempo?
-Oh, es que a Harry le encantan y preparar pociones es una de las cosas que le relajan -dijo como si nada.
Ante ese nombre Severus se puso pálido.
-¿Harry?
-Perdona Severus. Este paciente -dijo al tiempo que señalaba a puerta de donde había salido-, es un amigo de cuando estudiaba en Hogwarts. Su nombre es Harry Potter.
Ese apellido hizo que a Severus se le cayera el cofre en el que llevaba los ingredientes, destruyéndose contra el suelo.
-¿Severus? -preguntó Hermione confundida.
-¿Harry Potter? -preguntó, con incredulidad, para asegurarse.
-Si.
Sin esperar más palabras, Severus se acercó a la puerta que Hermione había indicado y miró por la ventana que había en esta para vigilar a los pacientes.
Se quedó estático y sin palabras por la imagen que vio. Allí dentro de la habitación se encontraba Harry, su marido. Estaba sentado cerca de la ventana por donde entraba el sol, con los ojos cerrados.
-Harry -susurró incrédulo.
-¿Lo conoces? -preguntó Hermione confundida-. Ah claro, Harry trabajaba en la tienda de pociones, seguramente lo conociste ahí.
-Hermione ¿qué hace él aquí? -preguntó sin dejar de mirar a Harry.
-A Harry lo trajeron sus padre hace cosa de un año. Según lo que sus padres lograron descubrir parece que Harry se había casado y que su marido lo había abandonado. Desde entonces, por lo que dijo el dueño de la tienda en donde trabajaba, estuvo unos tres meses deprimido, iba al trabajo y cumplía con él, pero se veía que su mente no estaba con él. Un día su madre fue a su piso y lo encontró en la cama bañado en un charco de sangre -Hermione tembló al imaginarse la escena-. Harry había usado un hechizo cortante para cortarse una muñeca. A su madre le fue imposible cerrarle las heridas así que lo trajo. Aquí los Medimagos pudieron curarlo. Cuando despertó, Harry estaba un poco desorientado, pero aun consciente de todo; pero todo cambio cuando el Medimago que lo atendió habló con él.
-¿Qué pasó? -Severus estaba horrorizado por lo que Hermione le contaba, pero tenía que saber lo que había pasado.
Hermione se secó un par de lágrimas que le cayeron de los ojos.
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Todo por un accidente
FanfictionSeverus es un pocionista en San Mungo y Harry trabaja en una tienda de pociones del Callejón Diagon. En su primer encuentro, un accidente los unirá; pero no todo será fácil entre ellos. Si quereis saber más leedla.