Regreso a la normalidad

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En el departamento de Izaya (el de Shinjuku)...

Izaya: -Te irás mañana mismo a tu país

Nagareboshi: -pero no tengo como regresar

Izaya: -ya pague tu boleto del avión, Celty te llevará, ambas irán en primera clase.

Nagareboshi: -no tengo como pagarte

Izaya: -ya me has pagado

Nagareboshi: -¿lo dices por la transfusión?

Izaya: -desde el primer momento en que empezaste a acompañarme al trabajo, empezaste a trabajar para mí, no fue sólo hospitalidad de mi parte, tu estuviste costeando tu manutención desde el principio, y sin saberlo, además mañana tenemos un trabajo en Ikebokuro.

Nagareboshi: -¿es broma?

Izaya: -¿quieres golpearme o usaras tu navaja?

Nagareboshi: -¿todo este tiempo me usaste?

Izaya: -sí, ¡vamos! golpéame, córtame, haz algo

Nagareboshi: -me usaste, pero también me ayudaste, pero me usaste...

Izaya: -¡vamos!, adelante

Nagareboshi con lágrimas en sus coquetos y negros ojos camino hacia Izaya y lo abrazó, después dijo: -No voy a negar que acabas de lastimarme mucho con lo que dijiste, pero no te creó una sola palabra.

Izaya: -¿qué demonios estas diciendo?

Nagareboshi (aún con algunas lágrimas en sus ojos): -Izaya, no soy tonta, con migo no tienes que fingir, ni hacerte el fuerte, por favor... no seas tsundere con migo, no puedes decirme que nuestra amistad no significó nada para ti, porque yo se que también te importa, sabes... yo también te voy a extrañar.

Izaya: -vale, pero no se lo digas a nadie, Naga chan te voy a extrañar, nunca he pasado tanto tiempo con nadie, nunca me cuidan como lo has hecho tú, pero no puedes quedarte mucho por acá, tienes una vida con la que debes seguir.

Nagareboshi: -no puedo irme y dejarte así

Izaya: -si no te vas pronto, vas a retrasarte en la escuela

Nagareboshi: -llevó una semana aquí, ha sido todo una semana de inasistencia, seguramente ya me dieron de baja.

Izaya: -en eso te equivocas, moví algunas influencias para que eso no te afecte, no estarás dada de baja, si repruebas será tu entera responsabilidad

Nagareboshi: -¿cómo hiciste eso?

Izaya: -es un secreto

Nagareboshi: -¿por qué haces esto?

Izaya: -desde que te conocí, llamaste mi atención, tienes mucho futuro por delante, además de que fuiste la única persona que se quedó con migo tanto a pesar de mi carácter.

Nagareboshi: -¿pero qué será de ti?

Izaya: -me quedare en casa de Dotachin por un tiempo, por eso vamos a ir a Ikebokuro mañana

Nagareboshi: -si es con él, estaré tranquila

Al día siguiente...

Izaya: -Naga chan despierta,

Nagareboshi: -buen día

Izaya: -hice tus favoritos

Nagareboshi: -rollitos de huevo dulce, y salchipulpos con ensalada y leche de soya a un lado, gracias

Minutos después...

Nagareboshi traía la ropa con la que había llegado a Tokio aquel día, ella le entrego sus prendas al hombre de ojos carmesí, aquella chica terminaba de guardar sus cosas, al parecer su bata ya estaba en su mochila, pero algo faltaba, Izaya le regreso su celular y dijo que se podía quedar con su camisa, Nagareboshi guardo como recuerdo la camisa que acaba de regalarle el informante, ambos pelinegros se tomaron unas fotos juntos antes de partir hacia Ikebokuro.

El embrujo de los ojos carmesíDonde viven las historias. Descúbrelo ahora