Seguía encerrada en el baño, no quería ni ver a ese weon del Benja, ni menos no sé hablarle ni una hueá, además parecía la llorona con todo el maquillaje corrido.
Mi teléfono comenzó a sonar y salió el nombre de la barbi.
Ahora aparece la maraca.
-¿Aló? – contesté. - ¿Dónde estái, weona?
-¿Qué chucha estai llorando? – me preguntó - ¡Rafa!
-Si, tome algo y estoy vomitando – mentí – me asusté, solo eso ¿Dónde están?
-Ya nos vamos – dijo – esta wea es para hacerse cagar tomando y yo no puedo tomar po. Así que me voy ¿te vas con nosotros?
-¡Sí! – grité – espérenme, en 5 minutos estoy ahí.
Y corté.
Salí del baño y corrí hasta el auto del Lucasio –que no era muy difícil de encontrar que digamos- y me subí.
-¿Qué te paso? – me preguntó el Lucasio – te vei re fea, weona. ¿Qué estai postulando para hacer el aro o que?
-No me weí – le dije acomodándome.
-No se porque la Calentina de mierda nos rogó tanto para venir – dijo la barbi – "¡ay dile a la rafa que no se lo puede perder"
Hizo la voz de la Calentina.
-..."convence a la rafa de que venga po" – volvió a imitarla - ¡me tenia harta la weona!
-¿te rogó para que yo viniera? – le pregunté y ella asintió – ni me pescó la weona, con suerte estuve con el Benja.
Y PUTA QUE ESTUVIMOS WEON.
-No los vi – dijo el Lucasio.
Menos mal, weon.
-Ya vámonos de esta wea – dijo el Lucasio – me dio sed y de la brava.
Nos reímos.
-El Alex me mando una foto de su mamá pinchándole el poto – dijo la Barbi y nos mostró la foto – estaba preguntando por ti, le dije que estabas conmigo para que no se preocupara.
Asentí.
Me invade la culpa, conchetumare.
***
El domingo se pasó volando, ya estábamos a Lunes, eso significaba ¡colegio!
¡Yupi!
El domingo me lo pase en la iglesia. Sí. Aunque usted no lo crea, fui a confesarme porque me sentía como las weas.
El padre me dijo que dijera la verdad, pero no se como chucha decirla. Yo creo que hay que esperar un tiempo y alejarme de ese weon del Benja para que el Alex vea que no me interesa.
Porque así es.
-¡Rafaelaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa! – gritó mi mamá, mientras yo inflaba mis cachetes sacándome los bigotes. Ni cagando iba al colegio con estos tremendos bigotes.
OH, PUTA QUE DUELE SACARSE LOS BIGOTITOS DE ARRIBA.
CTM DOLOR INFERNAL.
-Oh, cabra sorda weon – apareció en la puerta – anda a comprar alguna wea para tomar desayuno.
-¿Qué compro?
-No se po weon, condones... una fusta – ironizó.
-Andai chistosa, weona.
-Pan po, alguna wea para echarle: jamón, queso, paté o cualquier wea. Y una bebida para el almuerzo.
Me tiro el envase.