-¡Con la ropa no coño! - grité, ah conchetumare mucho reality. - ¡Con la ropa no, mierda!
Las viejas culias me ignoraban y seguían echando la ropa al bolso, ni siquiera doblaban las hueás.
Claro po, por puro que estas weonas no estuvieron toda la tarde doblando la cagá de ropa, bueno yo tampoco, pero el Alex sí.
Alex nana 2.0. ¡Si necesitan un nano, llame! ¡Solo $200.000!
Me volvieron las contracciones.
-¡Ya po vieja culia llévame al hospital luego! - grité y sentí como mi guatón bajaba.
Ups, ¿no conté?
La guagua será guaguó, jiji.
-¡Alex culiao! ¿donde estaí? - grité y el weon llego con dos maletas en sus manos, ah tan lindo.
-¡Ya hice mis maletas, faltan las tuyas! - me dijo y le tiré una pelota que me habían pasado las enfermeras para el estrés.
-Joven la señorita es más importante.
-¿¡Qué?! - le gritó - ¿usted sabe gracias a quién ese bebé está ahí?. Gracias a este piquito, así que no me webeé.
-¡Ya saldrá! - grité y sentía como se me rompía el choro.
¡No conchetumare, cesárea, yo quería cesárea!
Sonó mi teléfono y el Alex contestó.
-¿Aló suegri? - le dijo super normal. ¿este culiao es weon? ¡que no me ve, weon! - Bien para el tiempo, si ayer fuimos al cine, ¿sabe cual vimos? ¡Si esa! ¡Siiii era super cool...
-Alex re conchetumare, corta esa cagá o te voy a sacar la chucha! - grité y el cortó. - gracias, mi lov.
-¡Ya vamos! - dijo la enferma y me subieron -porfin- a la ambulancia.
Sentía que mi choro se rompería en cualquier momento y saldría mi bebé y chao pescaó.
-Todo estará bien, Rafaela - me dijo una enfermera.
-Cruel es bueno. - me dijo el Alex.
¿QUÉ?
-¿Qué? - le pregunté y se rió.
-Es que eso fue igual a la escena de correr o morir cuando le dicen a Thomas "Todo estará bien, Thomas" y luego la weona le dice "Cruel es... - le pegué en el pico
-¿Hace cuanto están juntos? - nos preguntó la enfermera.
-MUZHOAÑOH - le dijo el Alex. - que no ve, que ya esta vieja.
-¿Su primer hijo?
-Que no ve, esta echa pico.
-¿La quiere harto?
-Que no ve, esta llenita de amor.
-¿Usted es tonto?
-Que no ve, irradía aweonaismo. - dije yo.
-¡Oye! - me gritó y le tiré un beso.
Oh se me olvidó el dolor, conchetumare, ¡se me olvido!
-Llegamos a urgencias.
-¡AHHH ME DUELE! - grité.
Volvió el dolor, volvió.
-¡Joven vaya a ponerse la ropa para entrar al parto! - le dijo la enfermera al Alex.
El Alex asintió y se fue corriendo, oh este culiao desgraciado no me dijo nada.
Cerré los ojos buscando fuerzas de no sé donde hasta que sentí unos labios en mi frente.