Como Perros Y Gatos. [Yaoi]

Capítulo 2- La reja.

(Punto de vista de Shin)

Las clases fueron de lo más aburrido, estaba sentado en mi butaca esperando que dieran el timbre de una maldita vez, y no es porque la clase fuera aburrida, sino que siempre e sido así. No me gusta estar encerrado en un lugar sin hacer nada por mucho tiempo, me gusta relajarme, si, pero no demasiado me gusta más correr y ser activo.

-Bueno clase eso es todo- Dijo mi maestro al ver que sonó el timbre de salida.

Sin pensarlo dos veces me dirigí a la salida corriendo y cuando por fin hiba a cruzar la puerta...

-¡Mierda! Kei me matará- Pare de correr y regrese al edificio, busqué la clase de Kei pero en el trayecto me cruzaba con diferentes personas (la mayoría chicas) que me detenían y saludaban, por supuesto no me molesto después de todo a mi me gusta estar rodeado de gente, pero esta vez hiba tarde.

Como pude llegué y como era de esperarse el estaba parado en la puerta de su clase con la mirada hacia arriba, aunque claro que no estaba sólo después de todo Kei era muy apuesto y siempre estaba rodeado de mujeres. Había una pequeña chica (imaginó de su clase) que le hablaba, cuando volteó y me vio.

-Pensé que nunca llegarías- Dijo mientras se despedía de la chica y se acercaba a mi.

-¿Me perdí? - Dije inventando una excusa.

-Si claro, tu que te la pasas fuera de clases para dar un paseo por la escuela-Dijo mientras Caminábamos a la salida

-Esta bien, me retuvieron muchas personas en el camino- Técnicamente era cierto.

-Se te olvidó, ¿verdad?- Me dijo mientras me veía con ojos de incredulidad.

-¿¡Qué!? ¿Cómo puedes pensar así de tu mejor amigo?- Dije un poco dramático.

-Shin...-

-Esta bien, lo siento, ya estaba harto de las clases sólo pensaba en salir de ese lugar- Dije mientras juntaba mis manos en forma de disculpa y me ponía en frente suyo.

-Shin, enserio ¿Qué te pasa? desde la mañana estas raro- Me dijo mientras seguía adelante ignorando mi gesto.

-No se a que te refieres con raro, actúo como todos los días-

-Shin, estas estas distante y ahora olvidadizo ¿A caso pasó algo?- Dijo con la mirada un poco preocupado.

Sólo seguí avanzando sin responderle a lo que me había dicho, "¿En serio estoy tan raro?" Pensé mientras seguía caminando a un lado de Kei. Sinceramente desde que me levante en la mañana siento como si algo me faltara, no se como decirlo es como si estuviera esperando a que algo pasara.

-Shin, ya me tengo que ir- Sacandome de mis pensamientos, Kei se dirigió a mi mientras me percate de que habíamos llegado a la intersección de su casa y la mía.

-Ah, Claro- Le di un pequeño golpe con la palma en el hombro.

-Shin sabes que si necesitas algo, puedes decírmelo-

-¿Eh? Ah, si claro, no te preocupes por eso, gracias-

-Bueno, adiós- Se despidió mientras me agitaba el pelo, y después se rascaba la cabeza.

-Si, adiós- Dije siguiendo por mi camino mientras Kei se hiba por el contrario.
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A unas cuantas cuadras de llegar a mi casa pase por un parque cerca de esta, lo cual era extraño ya que nunca voy al parque después de clases.

-Supongo que si me he vuelto raro- Susurré mientras miraba el cielo.

Me senté en una banca del parque, había unos niños jugando con una pelota en la cancha que había. Absorto en mis pensamientos no pude ver cuando el balón se estrelló contra mi cara para después ir más lejos. Maldición "¿Qué tiene este niño en el pie?" Pensé mientras me tocaba la cara.