Capítulo 44- El celo es peligroso.

174 12 4
                                    

(Punto de vista de Shin)

–Te extrañé mi perro callejero...– soltó de repente frente a mi.

Lo tenía en vuelto en mis brazos, después me todo este tiempo podía sentir su calor una vez más y gracias a eso mi ira se había disipado ya.

–Y yo a ti...– Lo abracé con más fuerza asegurando que no pudiera salir de mi agarre nunca más.

Pasaron unos segundos y después hablo.

–Umm... ¿S-shin...?–

–Dime– me sorprendí al ver como me intentaba separar de él. –¿Hay algo mal?–

–No es eso e-es solo que mi... Mi cuerpo está...–

Me detuve unos instantes frente a él, parecía como de costumbre solo que sus mejillas más rojas de lo habitual lo que le daba un toque más lindo.

Y entonces lo noté, cuando me moví para acomodarme mejor sentí un ligero roce en mi pierna era algo... Duro.

–¡Oh! Ya se que es lo que pasa...–volteo su cara y se cubrió con las manos para ocultar su claro sonrojo. –Ya estas así solo por estar sobre tí–

–C-callate... Yo no...– moví adrede mi muslo entre sus piernas al ver como estaba. –¡Nya!–

"¿Huh? ¿Que había sido eso?" No me digas que... Jeje esto será divertido.

–Vaya vaya ese fue un nuevo sonido para mi, Ryuu...– me acerque a su oreja. –¿Podría ser que estás en celo?–

–C-celo... Yo nunca... ¡Hya!– me moví otra vez.

Me abrí espacio entre sus piernas hasta estar en una buena posición y comencé a levantar su playera hasta quitarla por completo.

–Pero mira que animado estás aquí...–  puse mi mano derecha sobre uno de sus pezones ya duros mientras daba pequeños besos y mordidas en su oreja.

–A-ah... Shin yo...– intentaba decir entre jadeos.

Baje sus pantalones junto con cualquier otra prenda que molestara en el camino.

–Y aquí...– con mi otra mano comencé a masajear su miembro que exigía atención, baje de su lóbulo al pecho.

–S-shin...– repitió.

Levante mi rostro y lo dirigí al suyo para depositarle un beso apasionado haciéndolo excitar más.

–¿Si?– dije separándome un poco de sus labios y daba repetidamente besos cortos sin detener mis otras acciones.

–Me siento... ¡Ah! Raro–

–¿Como raro...?– detuve la mano que se encargaba de su miembro y la dirigí a su entrada. –¿Raro mal o... raro bien?– inserte un dedo bastante mojado en él.

–¡Nya! Haa– se cubrió la boca.

–Oh no, eso no, no te cubras. Déjame oir más de esos– No voy a mentir me estaba excitando más que nunca con esta situación ¿y quien no? Digo en esta situación cualquiera estaría como yo.

Puse un dedo más e hice movimientos de tijeras mientras que con la otra mano volví a darle pequeños masajes a su miembro.

–N-no... Ah– Soltó una lágrima.

–¿No? ¿Se siente mal? ¿Quieres que pare? ¿Qué es Ryuu?– mi voz sonaba con más lujuria que otras veces.

Volvió a desviar la mirada y (si se podía) sus mejillas carmín aumentaron su color.

Como Perros Y Gatos. [Yaoi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora