Erit

Capítulo 8 - Savia.

Edwin empalideció de inmediato al escuchar eso, entonces puso su cabeza en la mesa y se la tapó con sus manos. Quería que esa pesadilla terminara cuando sintió una mano sobre las suyas y escuchó a helena decir:

- no te preocupes, yo estoy para ayudarte y lo haremos lo más pronto posible.

Él sacó la cabeza entre las manos y miró a helena que tenía una sonrisa muy confiada, con más valor edwin le dijo:

- gracias, hay que intentarlo.

Mark se levantó y se fue indicándoles que fueran a dormir. Ellos salieron y se dirigieron a su cuarto de forma silenciosa hasta que edwin dijo:

- por tu expresión en el comedor también debo ser el primer humano que un guardián le habla sin formalidad.

Ella no lo miró y contestó:

- sí, me sorprende también que tú seas un humano corriente. Lo que me han enseñado por años los guardianes es que el humano piensa que sueña y resulta que no es así porque forma un cuerpo en esta dimensión y es controlado cuando duerme.

Edwin se quedó callado mientras caminaban y preguntó después de un rato:

- ¿cuando fue la última vez que un humano se apareció por acá?

Helena se puso a recordar y dijo:

- fue hace 13 años, cuando tenía 9 años

Edwin algo curioso le preguntó:

- ¿viste como era él?, ¿se veía más relajado?

Helena algo molesta dijo:

- no recuerdo sus expresiones porque lo ataque y me detuvieron.

Él algo asustado porque ella era salvaje desde pequeña no le quiso preguntar las razones pero helena comenzó a hablar:

- hace muy poco que me habían traído a este templo y los aprendices de los guardianes eran malos conmigo por no nacer como "ser", entonces una tarde estábamos cenando cuando apareció un humano junto a un guardián y yo me lancé a atacarlo instintivamente por confundirlo con un shiro y Todos me detuvieron, esa noche todos me atacaron y me golpearon, fui la burla por años hasta que cumplí 12 y me largue.

Él algo incómodo por esa confesión no supo que decir, sin embargo helena no paró de hablar:

- aprendí a protegerme sola y no confiar en nadie, no sé como ahora hablo esto contigo pero me siento en confianza. Cuando cenamos observe brevemente a mi alrededor y vi a unos de los guardianes que me atacaba cuando era pequeña, me miraba con odio y eso no esta permitido en los guardianes porque se corrompen.

Edwin la miró algo incómodo y no supo que decir, en cambio helena lo miró con una sonrisa cansada y llegaron a su cuarto.

Edwin entró y con cansancio se echó en la cama, helena se acerca y dice:

- yo debería ayudarte en todo pero yo duermo en la cama, tu en el suelo.

Edwin se molestó pero ella se puso en posición de pelea con una sonrisa, él agotado se echó al suelo y se durmió.

A la mañana siguiente él se despertó con el cuerpo adolorido, se levantó y estiró su cuerpo haciendo sonar varios huesos, entonces miró a helena y estaba tapada en la cama con el cabello cubriéndole el rostro, con ganas de irse se acercó a ella y cuando le iba a poner el pie encima para despertarla helena rápidamente dijo:

- tócame y yo te rompo la pata.

Edwin alejó rápidamente la pierna y le respondió malhumorado:

- ser llama pierna y es una pena que me digas eso después de dormir en el suelo por ti. Vámonos ahora que no quiero estar más acá.

Ella se levantó muy seria y edwin la observó, estaba envuelta con telas en sus pechos y en su cadera dándole aspecto de ropa interior muy primitivo, avergonzado giró la cabeza para el lado y helena se vistió con su traje hecho de piel.

Ella le dijo que estaba lista y edwin se llevó la mochila, salieron de la pieza yendo hacia la izquierda del pasillo blanco. helena se detuvo en el ascensor y apenas tocó la puerta, ésta se abrió para dar con el interior del ascensor y edwin se puso a mirar el llano que había tras la ciudad que había abajo, helena le dijo:

- siguiendo en línea recta hacia allá esta el templo del este.

Edwin sin ganas preguntó:

- ¿como llegaremos allá con tan poco tiempo?

Ella le respondió:

- no te preocupes por eso, yo me encargaré del transporte, Tú sólo encárgate de aprender bien el uso de la espada.

El tratando de calmarse se sentó en el suelo y helena dijo:

- abajo

El vértigo llegó sólo al bajar a esa velocidad increíble, parecía que el ascensor se caía. En un instante la velocidad se detuvo y ambos cayeron aplastados al piso, helena asustada tocó la puerta y esta no se abrió, comenzó a golpear la puerta y cuando vió que era inútil se agachó y afirmó su cabeza con las manos muy asustada. Edwin le dijo:

- ¿Que pasó?, ¿porque estamos encerrados acá?

Ella apretando los ojos le dijo:

- no se que ocurre... necesito salir... Falta aire... Es muy pequeño el lugar... Otra vez no...

Él comprendió que eso era claustrofobia, abrió la mochila y sacó la espada, apretó el botón y cuando la espada estaba lista edwin con fuerza apuñaló la puerta, esta era muy resistente pero él pudo atravesarla. Entonces comenzó a partir la puerta hacia abajo, cuando llegó al suelo empezó a entrar un líquido espeso y verde. Helena cuando lo vió se arrinconó y edwin comenzó a patear la puerta para abrirla y le grito a helena:

- !! Ayúdame ¡¡ nos podemos ahogar acá, trata de golpear con toda tu fuerza.

Helena volviendo en sí miró el pedazo de puerta rota, sacó su lanza y la metió en el centro del agujero para comenzar a tirarla, edwin la miró y con fuerza se lanzó a ella haciendo presión con la lanza y abriendo la puerta.

Cuando la puerta se abrió el pequeño ascensor se llenó de savia haciendo que edwin y helena se aplastaran contra las paredes, cuando la presión se normalizó edwin miró a helena y ella estaba ahogándose ya que el golpe le quitó el aire, él nado hacia ella y la tomó. Impulsándose con las paredes se lanzó a la puerta y salió flotando hasta que chocó con las paredes del axioma, el observó y era un cilindro lleno de agua tan largo que perdía la vista de arriba como abajo.

edwin comenzó a ahogarse y helena ya estaba inconsciente y se le ocurrió partir la ventana, preparó su espada tan rápido como pudo y tomando velocidad con las paredes se lanzó contra el vidrio que estaba al otro lado del ascensor y enterró la espada, el sintió la presión del agua saliendo, fue tanta la presión que la espada se escapó de las manos de edwin y salió por el agujero que crecía cada vez más, él asustado se alejó del agujero, comenzó a ahogarse y abrazó a helena que no reaccionaba a nada.

Por afuera la delgada pared de sabia que protegía el agua comenzó a resquebrajarse y cuando edwin apenas estaba consciente ésta se rompió completamente formando una cascada de gran caudal, edwin salió disparado con helena y pudo tomar una bocanada de aire antes de meterse al agua de nuevo, ambos iban en aquella cascada cuando edwin vió bajar la lanza de helena, sorprendido por la velocidad en que iba comenzó a estirar el brazo por el agua que caía a gran velocidad y lo tomó, con la lanza ahora en una mano mientras afirmaba a helena con la otra edwin tuvo una oportunidad de enterrar la lanza en la corteza exterior del árbol, cuando se enterró la lanza edwin afirmó a helena y dejaron de caer por un instante, el agua comenzó a suavizar la presión y cuando la cantidad disminuyó bastante, él soltó la lanza y se lanzó con helena, la caída fue bastante rápida y chocaron con el suelo fuertemente, edwin arrastrándose se llevó a helena fuera del agua y vomitó bastante savia causándole dolor de garganta y nariz, cuando volvió a respirar con normalidad se acercó a helena para ver cómo estaba y cuando la se aterró, ella estaba muerta.