Cap 2

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CAP 2

Acaba el lunes y no me ha dirigido la palabra. Esto me mata me está destruyendo mentalmente y físicamente. No aguanto más. Me dirijo a mi habitación, cierro la puerta y a dormir. Que vayan a buscar a mi hermana ellos. Cierro los ojos y sueño en cómo empezó todo.

<< ¡Eric y Manuel me dijeron que iban a venir a verme a mi bar! Que ganas tengo y más por qué viene Eric. Es bastante alto, pelo oscuro, tiene un cuerpo bastante musculoso y la sonrisa... ¡la sonrisa más bonita del mundo! Llego a mi bar y se lo comento a mi madre ella me dice que no hay problema que baje a las 6:00 por qué mi hermana tiene repaso y así aprovecho.

Llego a mi bar, dejo a mi hermana y espero. Espero, espero y espero... estoy escurriendo unas bayetas de la pica y entran unos policías... detrás de ellos los veo entrar. Se sientan en una mesa y voy a ver que les sirvo.

- Que camarera más guapa nos atiende hoy eh Manuel... - escucho decir a Eric, antes de llegar a la mesa.

- ¿Qué os pongo? – pregunto.

- Una coca- cola – dice Eric.

- Una coca- cola – dice Manuel.

- ¿Con hielo y limón? – pregunto.

- Si. – dicen a unísono los dos.

Me cojo la bandeja y pongo tres coca- colas con hielo y limón. Dos para ellos y una para mí. Me llevo una bolsa de patatas para picar algo.

- Una coca- cola por aquí... y otra por allá. – digo poniéndoselas delante.

Nos la tomamos entre risas y cachondeo hasta que voy a coger las últimas patatas.

- ¡Oye! Que yo quiero... - digo intentando quitarle las patatas a Eric.

- Si las quieres siéntete a mi lado.

- No.

- ¿Segura?

- No. – me levanto y me siento a su lado, cruzo las piernas y me lio a comer patatas.

El empieza a rozarme con su mano la mía... a tocarme los dedos... a unirlos. Manuel nos mira y la aparto corriendo. Me levanto de la mesa y me dirijo a mi madre.

- ¿Mama me dejas el rato que queda para ir con mis amigos a dar una vuelta?

- Claro, y por cierto ¿Quién es él que te gusta?

- El que está mirando hacia aquí...

- Muy guapo... - digo que si con la cabeza y adiós con la mano.

Llego a la mesa y los dos me miran.

- ¡Nos vamos!- digo.

- Perfecto, aunque yo me tengo que ir ya. – dice Manuel.

- Vale, pues vamos.- Digo.

Durante el camino no paramos de reíros, y no sé cómo acabo diciendo que mi culo no se toca. Y justo es decir eso y Eric con su patín no para de darme golpecitos. A los cinco minutos Manuel se despide de nosotros y se va, Eric se empeña en acompañarme a casa.

Llegamos a un sitio y se detiene. ¿Qué le pasa? Deja el patín en el suelo y me atrae hacia el cogiéndome de la cintura.

- ¿Qué estás...? – no me da tiempo a acabar la frase. Me besa, me besa con dulzura. Lo dejo. No hay nada que me guste más que el...

Se detiene y me mira, se muerde el labio si empieza a andar. Llegamos a un poste y me abraza... y como no... me besa. ¡Dios, como besa el grandullón! Pasan diez minutos y se separa de mí. Me acompaña hasta la puerta de casa y me da un beso.

- Bella... no confundas sentimientos ¿vale? Sabes que llevaba tiempo queriendo hacer eso.

- Tranquilo Eric, sabes que estoy neutral... no siento nada por ti.- Miento.

Dicho esto me da un beso en los labios y se va. >>

Me suena el despertador y me levanto... es martes. Me pongo lo primero que pillo y bajo a mi bar. Me despido de mi madre y me voy. Llego justo a tiempo para la clase de francés. Me siento y me entero de que dentro de dos días tenemos examen. Se acaba la clase y salgo pitando, al salir por la puerta me topo de frente con Eric... no me mira. No existo...

Así pasa todo el miércoles y todo el jueves. Creo que soy la novia cadáver. Me planteo que el viernes no va a ser así, tengo pensado ir al cine y él no me lo va a joder ni por asomo.

¡¡¡Es viernes!!! Que contenta estoy. Me pongo lo más mona que puedo y me dejo el pelo suelto. Llego al instituto y le comento a Núria que no me voy a rayar que hoy voy a intentar hablar con él y si quiero solucionarlo, se soluciona. Si no, no. Me felicita dice que no me merece y que si no me escucha peor para él y mejor para mí. Entro del patio súper contenta. Hasta que veo a Arturo en la ventana. Eric está con él. ¿Qué pasa?

- ¿Qué te ha pasado Arturo?- pregunto.

- Nada tío, que estoy rayado...- dice.

- Mejor metete para dentro, yo me quedo – dice Eric mirándome.

- No. Yo me quedo. – Respondo.

- Muy bien... pues yo también – dice.

Me quedo con Arturo hasta que llega su tutora y me obliga a meterme en mi clase.

- ¡ERIC! Luego te secuestro. – Digo.

- Muy bien. Aquí te espero. – Responde.


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