Parte 2

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Llegué al bar y la vi una vez más, a la chica del breve concierto de piano que me había dejado anonadado con su talento nato, el cual no se mostraba interesada en ocultar. Esta vez parecía desarreglada pues no llevaba un vestido de gala al rojo vivo, en su lugar sólo traía encima unos mezclillas negros ajustados que resaltaban perfectamente sus apetitosos muslos, una sudadera negra que cubría su par de senos nada destacables (sí, en realidad no eran tan pequeños, pero de todas formas no se veían con ésa sucia  sudadera), su cabello desalineado en un chongo mal hecho y su rostro libre de maquillaje. A pesar de todo eso seguía siendo la chica más hermosa del lugar, y no lo digo porque quiera ser un cursi sin remedio ni como un poeta frustrado por la vida, es que en realidad lo era. Aparte de ella había otras dos chicas, una de la cual no puedo estar seguro si debería contar como "chica"  pues daba bastante la pinta de ser un hombre y la otra que simplemente era mas o menos atractiva, aunque no tanto como la recién llegada. De cualquier manera eso no importa en realidad, ella se acercó a la barra y pidió una cerveza, parecía agotada, casi tanto como la silla desgastada sobre la que se sentó; volteó hacia donde yo estaba y sonrió amablemente, por simple cortesía. 
-Hola- dije tratando de sonreír lo más natural posible. - Mi nombre es Dante.
-Eso ya lo sé tontito. - dijo dejando soltar una risa discreta.
-Es cierto jaja. - contesté apenado. Y hubo un silencio algo incómodo hasta que ella se decidió a decirme:
-Bueno, ¿Vas a invitarme una cerveza?

Zoey [...]Where stories live. Discover now