Marissa:
Recuerdo que solía llamarte M. Aunque no recuerdo por qué. Me sería de gran ayuda ahora mismo recordarlo, pues tantas cartas no pudieron dejarme olvidar tan fácil.
Nunca escribí la fecha de ninguna y solo pude ordenarlas cronológicamente por lo que describía acerca de mi enfermedad. Me toca ser el mártir de esto tan nuestro. Te las dejo todas.
No hagas nada más que leerlas, para cuando las encuentres ya estaré de nuevo lejos de la ciudad. Haz lo que creas conveniente con ellas, que ahora son tuyas; siempre han sido para ti, M. Y me hace sentir culpable dejartelas, si es que todavía podría dolerte. Yo, dolerte a ti, de la misma manera en que me dueles. Eso, me siento mal en dejartelas, pero tenía que dejarlas en algún lado.
Ten siempre un bello día. Yo ya tengo uno.
-P.
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Ojalá supieras cuánto te quiero
Historia CortaP es como cualquier otro hombre enamorado. M es una mujer de la que cualquier hombre como P se enamoraría. Ahora bien, una mujer como M jamás se enamoraría de un hombre como P. M es de esas princesas que terminan siempre enamorándose del dragón. ...