La casa de Woo Hyun era grande. O eso era lo que Sung Kyu pensó en un principio. No fue hasta que entró al sitio que comprendió su error. Aunque en honor a la verdad debía admitir que se trataba de un simple error de perspectiva. La mayor parte del sitio era ocupada por un restaurante familiar, propiedad, al parecer, de la familia Nam.
—Ahora es una hora tranquila, así que no hay muchos clientes —comentó Woo Hyun con alegría, tomándolo de la mano para obligarlo a seguirlo—. Ven, te voy a presentar.
Sung Kyu abrió la boca para negarse, arrepintiéndose un poco de haber aceptado su ayuda.
Lo primero que vio fue a un chico de cabello castaño, grandes ojos y un delantal de flores alrededor de la cintura. Y con un rostro tan hermoso y delicado que bien podría tratarse de una escultura.
—Mira, él es Sung Jong. Ya te hablé de él. Es mi hermano menor.
—Hola —murmuró Sung Kyu con vergüenza—. Soy Kim Sung Kyu.
—Hola. ¿Cómo te va?
Saludó el chico con alegría.
—Bien, gracias. Y, ¿a...?
No pudo terminar siendo interrumpido por un chico alto, de cabello rojo cereza.
—¿Dónde está Dong Woo?
—Dino fue al mercado.
Respondió Sung Jong con tranquilidad.
—Él es Sung Yeol —indicó Woo Hyun, sin soltar a Sung Kyu—. Dos años mayor que Jongie. Y Dino es el hermano mayor.
—¿Quién es?
Inquirió Sung Yeol, cruzándose de brazos y mirando a Sung Kyu de arriba a abajo.
—Es Sung Kyu. Un nuevo amigo.
—Yo que pensé que por fin te habías conseguido novio, Woo Hyun —y el alto rió—. No es saludable ir por la vida recogiendo "huérfanos". Ya tenemos suficiente con Myung Soo y Ki Bum.
—Con Myung Soo no te metas.
Saltó al momento el niño del rostro hermoso, sorprendiendo un poco a Sung Kyu. Había aparentado tanta tranquilidad...
—¿Saben donde está mamá?
—Fue con Dino al mercado.
Replicó Sung Jong, sin dejar de mirar mal al pelirrojo.
—Vale, entonces iré a instalar a Sung Kyu.
Y tiró una vez más de él, conduciéndolo a un pequeño pasillo y de ahí a unas escaleras en forma de caracol.
—Woo Hyun...
—Te daré algunas sábanas limpias, un cepillo de dientes y algo de ropa, aunque habrá que conseguir algo para cuando te crezca la barriga. ¿Crees que se noté mucho? Una de mis primas tuvo gemelos y no se le veía casi nada. Ah, pero mi cuñada Soo Min parecía un globo...
—Woo Hyun, ¿que quiso decir tu hermano con "huérfanos"?
Woo Hyun se detuvo entonces, con el ceño fruncido y un mechón de su dorado cabello cubriendo su frente.
—El abuelo siempre dijo que este mundo era tan injusto que uno mismo debía encargarse de hacer el equilibrio. Y mamá opina igual.
—¿Qué significa eso? ¿Qué me ayudaste por lástima?
—No. Tú me inspiras de todo menos lástima.
—¿Qué significa eso?
Replicó Sung Kyu de nuevo, totalmente confundido, pero Woo Hyun pasó de aquello, mostrándole una pequeña habitación.
—Era del tío Sang Ho, pero tuvo que irse. Tenía piedras en los riñones, aunque...
—¿Todos en tu familia están enfermos o qué?
Woo Hyun rió ante aquello.
—Creo que eres adorable, Sung Kyu. Y serás aún más adorable cuando tengas a tu bebé en brazos.
—Deja de decir esas cosas —murmuró Sung Kyu, avergonzado ante la mirada del rubio sobre él—. Además no estaré aquí para cuando mi bebé nazca.
—Ah claro. Supongo que querrás estar con su papá. Es decir su otro papá.
—Yo soy su único padre.
Y Woo Hyun sonrió aún más al escucharle decir eso. Sin embargo no pudo añadir nada más, un estruendo en el exterior de la casa los hizo dar un salto a ambos.
—¿Qué fue eso?
—Creo que Dino ha arrasado con nuestro buzón de nuevo —y Woo Hyun rió de forma despreocupada—. Descansa un poco. Ya conocerás a los demás después.
—Espera, Woo Hyun.
Lo llamó Sung Kyu, haciendo que el chico se detuviera, con una mano en el picaporte.
—¿Si?
—Si no fue por lástima, ¿por qué me ayudaste? ¿Por el equilibrio o no sé que cosa?
—No. Ya te dije que no me das lástima.
—¿Entonces?
El joven Nam se mordió el labio inferior un segundo, parecía un poco asustado, pero al final soltó un suspiro y respondió:
—Porque aunque acabo de conocerte me gustas y me hubiese encantado conocerte antes. Me hubiese gustado ser yo el otro padre de tu hijo.
