PRIMER ENCUENTRO

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  Siete de la mañana, los rayos del sol eran obstruidos por las cortinas cerradas de la muchacha que dormía plácidamente en su cama

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  Siete de la mañana, los rayos del sol eran obstruidos por las cortinas cerradas de la muchacha que dormía plácidamente en su cama.

Sus ojos se abrieron de golpe, se levantó para dirigirse a las cortinas y abrirlas para ver la hermosa mañana.
Decidió asearse, luego ir a desayunar y por último llamar a su mejor amigo para que salieran a divertirse.
Por otro lado, Vegeta había salido sin permiso de su casa para encontrarse con sus amigos y estar un rato con ellos hasta que llegara la hora de irse.
Mientras caminaba paso por la casa de su enamorada, a lo cual nunca había amado, solo por diverción estuvo con ella, paró por un momento, decidió darle fin a esto, ya que no llegaría a nada bueno, se dirigió a la casa, tocó el timbre, por el intercomunicador dijo su nombre para que saliera, espero unos segundo y la muchacha salió de su casa con una cara de felicidad al verlo.
-¿En dónde habías estado?-dijo la muchacha muy alegre, preparándose para darle un tierno beso en los labios al joven, a lo cual el rechazó.
-Estela...terminamos-lo dijo con la seriedad que lo caracterizaba.
-¿Por qué?-le espeto con unas lágrimas que salían de sus ojos.
-Eso ya no importa pero no es tu culpa.
Luego de esa respuesta, Vegeta se marchó sin decir nada, no miró para atrás, no quería ver a la muchacha en ese estado de shock que él mismo le había causado.
(...)
Ya había terminado de desayunar, estaba sentada en su sofá, esperando a su mejor amigo.
Luego de unos segundos tocaron el timbre y se paró de su asiento para ir a abrirle.
-Hola preciosa-dijo el joven con una ternura propia de él.
-Hola... ¿nos vamos?-espeto con una sonrisa que siempre se le dibujaba al verlo.
Decidieron irse al centro de atracciones. Luego de un rato de divertirse, decidieron darse un descanso y se dirigieron a unos asientos que se encontraban en el lugar.
-Cuéntame Bulma... ¿algún galán que oigas hecho llorar?
-amigo... ¿qué te fumas?
Ante la respuesta de su amiga, él muchacho soltó una risa y su amiga no dudó en seguirlo.
-Hablando enserio ¿alguien nuevo?
-Unos cuantos pero todos quedaron en lo de siempre.
-Qué mala.
-No es mi culpa que ninguna cumpla con mis expectativas.
-¿y yo?-
-¿Tú qué?-
-¿yo no cumplo con tus expectativas?
-Goku,ya hemos hablado de esto, te conozco desde los cinco años, si en verdad me gustaras ya estaríamos desde hace tiempo.
-tienes razón-dijo el muchacho tocando su nuca con una mano y soltando una pequeña carcajada.
-te invito un helado, ¿Qué sabor quieres?
-Fresa, chocolate y vainilla-
-Glotón-dijo la muchacha con una sonrisa.
-Ya sabes que me gusta comer-dijo el muchacho parándose de su asiento
-Bueno, anda haciendo cola para la siguiente atracción, mientras que voy por los helados.
Mientras tanto, Vegera regresaba a su casa una hora antes de irse.
-¡¿en dónde estabas?!-espetó la mujer muy alterada.
-salí a divertirme con unos amigos.
-por las puras me molesto...anda a alistar las cosas.
-Ya lo sé...por cierto, he decido ir porque sería interesante ver la reacción de esa gente ante mi comportamiento-dijo con una sonrisa malvada.
-Esa gente son amores de persona, no les vallas a hacer nada, si te mande ahí es para que se te quede un poco de ellos y no sigas en esos malos pasos que andas...por favor no lo hagas.
-Bonito tu discurso pero no cambiare de pensamiento, ya está decidido-
-Por favor...
-voy a ir a alistarme, no quiero ver tu cara.
-¡Espera!.. Si te devuelvo la bici moto, ¿lo pensaras?
-Trato-dijo con una faz de confianza y dirigiéndose a su cuarto.
-Mañana la tendrás en la casa que te hospedarás.
Goku dejó a Bulma a unas cuadras de su casa, se despidieron con un tierno beso en la mejilla y siguieron sus caminos.
El carro que llevaba a Vegeta había parado a unas pocas cuadras para que él continuara su camino. Vegeta se encontraba a pocos pasos de la casa en la que se iba a hospedar pero decidió conocer más la ciudad e ir a pasear por un rato.
Bulma iba distraída escuchando música por medio de sus audífonos, de un momento a otro choco fuertemente con un joven que también iba caminando escuchando música pero más centrado en donde estaba.

:::Espero que les halla gustado,nos leemos n.n:::

GLOFERA

INESPERABLE(VegetaxBulma)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora