Capítulo 2

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~Narra Justin~

Vi como se iba del parque, sus pasos la alejaban de mi y la llevaban lejos de mi, tal y como habiamos estado hasta hoy, separados. Pero algo dentro de mi me decia que la volveria a ver, que no perdiera la esperanza en que ella mañana vedria aqui de nuevo, tenia esa corazonada. Necesitaba decirle que la necesitaba, necesitaba tener su sonrisa para mí toda la vida, tener sus ojos y que me iluminaran cada dia, hacerla feliz y no hacerla sufrir... en general la necesitaba a ella. Quiero despertarme y oler su perfume a mi lado, tenerla encima de mi pecho, paseando de la mano por el parque donde todo empezó. Ahora que ella se había ido no sabía qué hacer, en menos de cinco minutos había desaparecido. Me senté en el mismo árbol en el que estuvimos sentados, cerré los ojos y apoye la cabeza en el tronco pensado en ella, el unico pensamiento que me venia a la cabeza desde que por fin pude presentarme. Me agobiaba de pensar en no tenerla y en perderla para siempre. Coji mi skate y me puse a andar por donde ella se fue. «Podría ir a su casa… no, mejor no, igual piensa que soy un loco».

-Hey Bro! –una voz conocida me distrajo y me saco de mis pensamientos. Era Ryan, mi mejor amigo.

-Hola Ray!

-¿Qué haces? ¿Estas loco? Llevas tu skate de la mano -dijo sorprendido con razon, era raro que yo estuviera andando sobre mis pies en vez de encima de cuatro ruedas y una tabla de madera, era mi pasion hacer trucos con el skate y perfeccionarme cada dia mas pero hoy tenia cosas mejores en las que pensar.

-Nada… iba para casa, tengo hambre.

-¿Ya has hablado con el pivón?

-Si tío…

-¿Y…? –dijo haciendo un gesto con las manos para que siguiera hablando.

-No se bro, hemos hablado, nos hemos reído, pero no sé si mañana volverá. -dije con toda mi naturalidad sin querer que el notase mi tristeza o lo que pudiera ser eso que ahora sentia.

-¿Pero le has dado tu numero?

-No, tampoco sabía que decirle.

-¡Pero tu Justin! ¡Eres tonto! Como pretendes volver a verla si no tienes su número, me imagino que tampoco sabrás donde vive, ni como se llama, ni cuántos años tiene, ¡nada! -dijo moviendo los brazos para exagerarlo más en un tono irritante.

-Ryan, yo tengo mi forma de captar su atencion y poder conquistarla, no voy a hacer como tú, que le pides salir a una, al segundo día te la tiras, te olvidas de ella y haces lo mismo con otra. 

-Déjame a mi ¿vale? No quiero perder a esta chica, así que déjame hacerlo a mi manera, no a la tuya. –Le dije con voz de enfadado, pero haciéndole saber que no nos enfardaríamos.

-Vale Bro, pero me la tienes que presentar ¡Eh! ¡Eh! –Dijo dándome pequeños codazos en el brazo, le mire con una mirada asesina y le dije:

-Ryan, no te la vas a tirar, ni tú, ni yo, con quien quiera y cuando ella diga. Y con su novio, no con el mejor amigo de su novio.

-Estas un poco irritante ¿no?

-Tal vez el irritado eres tú, déjame anda. –Puse mi skate en el suelo, me puse encima de él y cogí velocidad dejándolo atrás, ya hablaria con el en otro momento.

-¿Y cómo se llama? –Dijo gritando.

- ¡¡Lucy!! -Me alejé más de él y me fui camino a casa.

Esperaba que mañana apareciera por el parque. Llegue a casa, saqué las llaves del bolsillo y abrí la valla de fuera de la casa, atravesé el jardín y abrí la puerta de casa, solo queria llegar a mi habitacion y tirarme sobre la cama, cruze el hall y el salon saludando a mi madre que actualmente estaba sentada en el sofa viendo una  pelicula, subiendo las escaleras que conducian hacia mi habitacion abri la puerta de esta y me deje caer en la cama tirando mi skate en el suelo. Parecia que un camion de un par de toneladas habia pasado encima mio, no era capaz de pensar coherentemente porque lo unico que queria era volver a vera y sentia una impotencia monumental al no poder ir de nuevo a donde ella y decirle que no se fuera, parecia mentira como me habia obsesionado con ella despues de haber estado unos dia viendola en aquel parque y seguramente al que le contara esto pensaria que soy un lunatico idiota queriendo a alguien a la que apenas conozco, pero la verdad  es que la necesito en el sentido de que solo puedo pensar en ella, las 24 horas del dia estan hechas solo para pensar en como conseguir en tenerla entre mis brazos y poder vera feliz a mi lado.

No dejes que me rindaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora