Est-ce que tu m'aimes? ©

3.Amigas

Una vez acabada el resto de la mañana me hice las mismas preguntas :

¿Por qué no había aparecido? ¿No se suponía que estaba allí? Si se fue, ¿Por que nadie me avisó?

Ya era hora de comer y como todos los días quedaba a comer con Annabella en nuestro restaurante preferido "Antica Focacceria San Francesco" ya que, solíamos comer allí cuando salíamos de la Universidad para contarnos lo que había sucedido en nuestras respectivas facultades esa mañana.

Una vez que llegue le pregunté por ese hombre...

-Hola, que tal tu mañana? - me preguntó Annabella

- Mejorable, ¿Y la tuya? - le pregunté

- Genial , llegó hoy un chico tan guapo y  encantador...ay- dijo ella con una cara de estar completamente enamorada. Ella es  así , creo que nunca la entenderé.

-¡¡ Y es S-U-E-C-O !! Sin duda ya he conocido al amor de mi vida. Mi día no podía ser mejor. - Casi me escupe en la cara,¡En la cara! cuando se pone así es de lo más estresante .

- Tía no será para tanto, ni que fuese la primera vez que lo dices.- le dije.

-Esta vez es diferente , este es perfecto nada que ver con los demás , además se va a quedar una semana sólo sería mala suerte que no consiga que se enamore de mi. -

- A saber como acaba esto...- Claro que sabía cómo acaba esto, ella y yo en su apartamento viendo películas de dibujos animados y comiendo gofres , después de una tarde de compras intensiva. Puede que no seamos como las típicas que ven películas románticas y helado, pero digamos que nos parecemos bastante.

Ya estábamos casi en el postre y me  había olvidado completamente de preguntarle por Él.

- Ann , ¿no sabrás por qué no se presentó mi primer cliente de hoy? - le dije en un tono muy curioso.

-No lo sé , sólo lo vi salir corriendo hacia su habitación con el albornoz. No te puedes creer como se quedaron todos los clientes mirándolo correr , todas las chicas se lo comían con los ojos. Ese es el motivo por que había tantas risas hoy. Siento no haberte avisado pero me había olvidado por completo de ti.-

- Lo raro , ahora que lo pienso es que solo lo vi cuando llegó al hotel , que yo sepa nadie lo ha visto salir del hotel.  - Puntualizó después.

- Es que me llamó la atención de que me dijeras que estaba y que de repente no hubiese nadie.- le contesté.

- Te tengo que dejar que tengo que ir a espiar a mi futuro marido.- me dijo guiñandome un ojo  con una gran sonrisa mientras se  marchaba.

¿Qué abría sido tan importante para ir corriendo por el hotel en albornoz? ¿ Y para no salir en todo su viaje ? Este hombre si era raro.

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En multimedia : Laura