Mucho Es Poco

Capitulo 8

NARRA DANIELA:

Mi tono de llamada comenzó a sonar. Rápidamente me desperté para ver quien llamaba y vi que era un número comercial, así que no lo cogí. Mire la hora, ¡Eran la una y cuarto pasadas! Ayer es cierto que me acosté muy tarde, pero no tan tarde como para despertarme más tarde del medio día. Hice la cama y coloque un poco mi habitación, después fui al baño y me hice un moño alto que no me convencía del todo, pero bueno nadie me iba a ver excepto mis tíos y mi prima, que por cierto, ninguno estaba en casa. Ya que la casa estaba sola decidí hacer un pequeño tour por ella. Primero fui a la habitación de mi prima. La puerta estaba abierta y la habitación por fuera parecía bastante desordenada y como prevenía por dentro estaba desordenada. Las paredes estaban repletas de fotos, entre ellas había fotos de ella con un grupo de chicos y chicas, esto me hizo pensar en si encajaría rápido en mi nuevo colegio. Es cierto que iré a clase de mi prima, pero hay una cierta posibilidad de que a sus amigos no les caía bien y aunque si soy una persona sociable me da cierta vergüenza conocer a las personas. Después de ver todas las fotos que tenía mi prima colgadas en aquella pared decidí sentarme un rato en el sofá al ver la tele. Es extraño, pero hasta ahora no he visto nunca la televisión española, no tengo ni idea de los canales que hay. Al encender la tele el canal que salió primero fue el canal 1 en el que estaban dando un programa de política al parecer.

Después de un buen rato cambiando canales cada rato decidí por dejar un canal musical. Estaba sonando la canción de NO de Meghan Trainor cuando sonó el timbre de casa y rápidamente me levante para abrir a la que seguramente fuese mi prima. Al abrir la puerta me encontré a mi prima junto a un chico que llevaba una camiseta color cian junto con unos pantalones cortos y un sombrero en la mano. ESPERA UN MOMENTO. Ese era mi sombrero y ese el chico que me trajo ayer a casa. Al mirarle la cara ya deduje que era él. El chico al verme agacho la cabeza y mi prima fue la primera en tomar la palabra:

- Bueno supongo que vosotros ya os conocéis - Dijo mi prima mientras sonreía.

En ese momento me di cuenta de que yo si se cómo se llamaba el, Niko, pero él no tenía ni idea de cómo me llamaba así que dije:

- Hola Niko, si es así como te llamabas, yo soy Daniela - Dije, aunque decidí añadir - Muchas gracias por lo de ayer.

Vi como su mirada cautivadora se fijó rápidamente en mí, yo perdí mi mirada en sus preciosos ojos azules que se asemejaban al color de su camiseta. Vi como sus labios se abrieron:

- De nada Daniela - Dijo tímidamente - Bonito nombre por cierto - Añadió mientras desviaba de nuevo su mirada al suelo.

Entramos en un silencio bastante incómodo para ambos; pero mi prima decidió llevar ella el rumbo de la conversación:

- Me lo he encontrado en el portal preguntando si aquí vivía alguien Italiano, supongo que quiere darte el sombrero - Aclaro mi prima mientras me miraba muy fijamente.

- Si toma Daniela - Hablo de de repente Niko - No iba a quedármelo porque es el precio de estos sombreros, mi madre tiene unos cuantos - Añadió mientras me entregaba el sombrero.

- Mumuchas gracias - Dije tartamudeando.

De nuevo hubo un silencio incomodo en el que ambos no sabíamos que hacer, y de nuevo mi prima abrió la boca:

- Niko puedes pasar a tomar algo si quieres - Le sugirió mi prima - Ya son casi las 3 y bueno tenemos canelones de comer - Añadió mientras se le escapaba una risa floja - Aquí mi madre es Italiana y bueno ella también lo es y se come mucha pasta.

En este mismo instante el chico me miro, me miró fijamente a los ojos y yo hice exactamente lo mismo, le mire. En ese momento desvió su mirada y se fijó en mi prima:

- Hace mucho que no como canelones - Dijo mientras se tocaba su pelo rizado - Pero... - En ese momento me volvió a mirar - Creo que estaré encantado de probar canelones made in Italy.

Ante ese comentario los tres nos empezamos a reír, aunque yo algo disimuladamente.

Los tres estábamos sentados en la mesa del comedor comiendo unos cuantos canelones. Era mi primera comida aquí y ya estaba comiendo acompañada de mi prima y de un medio desconocido. Mientras comíamos no hablamos mucho excepto para decir lo buenos que estaban los canelones. A decir verdad mi tía conocía igual que mi madre y tampoco me sorprende mucho comer este tipo de comida, pero Niko estaba encantado con los canelones, dejo el plato impecable.

- Estaban riquísimos eh Raquel - Dijo dirigiéndose a mi prima.

- La verdad es que mi madre cocina genial - Dijo mientras recogía los platos.

Niko a simple vista no parece un chico vergonzoso, pero conmigo le costa hablar, pero contra todo pronóstico me pregunto:

- ¿Y tú como es que siendo de Italia estas por aquí? - Dijo después de dar un sorbo al vaso de agua.

- Bueno, he repetido curso y a mis padres les gustaría que terminase el instituto en España - Dije mientras miraba la televisión.

- Me gusta tu acento españoitaliano - Dijo mientras sonreía - Si es así como se dice - Añadió mientras se le escapaba una carcajada.

Al oír esas palabras me puse muy roja y no sabía que responder, así que decidí preguntarle algo.

- ¿Tú no eres de aquí? - Pregunte - Lo digo por tu acento - Decidí añadir.

- Eh no - Dijo mientras sonreía, siempre sonreía este chico - Soy de Uruguay, aunque llevo aquí desde los 7 años - Respondió a mi pregunta - Que por cierto tengo 17 años - Añadió.

Niko, 17 años, nació en Uruguay pero lleva en España desde los 7 años. Había averiguado muchos datos suyos, así que decidí que el también podría saber algunos míos:

- Yo tengo 16 años - Dije - Y bueno ya sabes que soy de Italia - Decidí decir entre un incómodo silencio - Concretamente de un pueblo llamado Tragliata.

El chico me miraba con cara de interesante y la verdad es que era muy atractivo.

- ¿Como el restaurante de comida Italiana no? - Pregunto.

Su pregunta me causo mucha gracia así que solo pude reírme y el hizo exactamente lo mismo. En ese momento mi prima Raquel llego y empezó a entablar una conversación con él, yo solo me senté en el sofá y miraba mi IPhone en el cual tenía algunos mensajes de mis amigos de Tragliata, de mis padres y de mi hermana. En todos los mensajes se me preguntaba qué tal me iba en España y en verdad he de decir que sigo sin estar de acuerdo con haber venido a España, pero no está siendo todo tan malo, he estado comiendo con mi prima y con un medio desconocido que me trajo ayer a casa y que me ha devuelto mi sombrero que se llama Nicolás, Niko para los amigos y que es bastante atractivo, ni tan mal este comienzo.