La skater.[Mario Bautista y tú]

Sin camisa.

Si tuvieran a su sexy vecino sin camisa a unos 3 metros de ti ¡ES IMPOSIBLE QUE NO TE MOJES! y era mi caso. Tenía a ese cuero a unos metros de mi, pero algo nos separaba.

2 ventanas.

Sin mentir llevaba 20 minutos espiándolo. Y así seguí otro par de minutos más, pero la puerta se abrió y dejé de hacer lo que hacía y me tiré en la cama haciéndome la "dormida".

-Seré menor, pero no seré pendeja, Diana ¡LEVANTA TU CULO, AHORA MISMO! y deja de espiar a Mario, por favor.

-¿ESPIAR? esa palabra no existe en mi vocabulario.

Dije indignada. Y me llevé una mano al pecho, dolida, "según". 

-No te hagas, depravada, si te vi cuando cerrabas la cortina, bueno, ni eso, la dejaste medio abierta y déjame decirte que a Mario se le ven bien los bóxers que trae (7u7).

- ¿QUÉ HAS DICHO, AMBER?

Y antes de terminar la oración ya estaba pegada en la ventana como "pedo". Bufé y le pegué a Amber.

-Mentirosa.

Y la fulminé con la mirada. MENTIROSA. Mario ya se había vestido. Esta fue una cruel broma. Y ella se echó a reír.

-Me retiro, JAJAJAJAJAJA, bajas cuando se te haya ido la calentura, depravada sexual.

-Uy ¡YA VETE, COÑO!

Y la escuché reír. Me puse algo cómodo: un pantalón deslavado, una camiseta negra que decía MB, y unos tenis X. La camiseta que decía MB, me la regaló mi prima favorita, Alex. Dice que es de su cantante favorito, ni idea de quién sea, a lo mejor se llama Marcos Bolillo.

Y me di una cachetada, primero porque por poco olvidaba mi gorra y otra porque nadie en su pinche vida se apellidaría Bolillo. Y si lo hubiera, ya tendría una razón para suicidarse, Jesús, JAJAJA.

Y cuando estaba abajo me topé con Charlotte.

Vale.

Verga.

La.

Vida.

Y mi día iba tan bien¬¬

- ¿Ya no saludas, hija?

-Prefiero que me violen 5 negros a saludarte. Es más, si me dieran a elegir entre morir hoy o vivir 100 años más pero tener que verte, prefiero morirme de una vez, odiosa.

-Veo que no te caigo bien.

-Uy ¡BRAVO! denle un premio por su brillante inteligencia.¬¬

-Qué malcriada eres, niñita.

-Y tú tan pendeja al creer que podríamos llevar bien.

-Pues, nos llevemos bien o no, me da igual, me importa tu padre y lucharé por él. Así que acostúmbrate a mi.

-Cállate, gata ¿no tienes nada que hacer? ¿algo que barrer? ¿trapear? ¿algo para desaparecer de mi vida?¬¬

-¡INSOPORTABLE!

Y se fue.

-¡EL GUSTO FUE MÍO!

Solté una carcajada y salí de la casa. Pero paré en seco.

Y ahí estaba el amor de mi vida. Mario.

MI MARIO.

Y sin camisa, mierda.

Cerré los ojos con fuerza, me convencí de meterme de nuevo, pero no podía.

Mario era taaaan guapo, pero era un imbécil.

Guapo o no, seguía siendo un imbécil. Y me metí a mi casa, corrí a mi habitación para después, tirarme sobre la cama y gruñir.

Era TAN GUAPO.

Tan guapo con o Sin Camisa.

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¡HOLA! TENÍA SIGLOS QUE NO SUBÍA UN CAPÍTULO DE ESTA NOVELA, PERO YA LO HARÉ, ESPEREN...

Dejaré de escribir en mayúsculas porque parece que grito JAJAJAJAJAJA.

Realmente me motiva que ustedes le den Votar y que agreguen esta historia a su Biblioteca.

Miles de besos,

-Laura7u7