Sábado 9 de Julio, 2005
–Taeyeon, baja inmediatamente –Sonó la voz autoritaria de su padre por el teléfono de la habitación.
–Es muy temprano...
–Buenos días preciosa.
La menor de 13 años colgó rápidamente aquel teléfono, se preguntaba si la voz de su padre era un sueño, aun sentía sus ojos pesados y no era de menos, se quedó hasta altas horas de la noche mirando su ordenador, sus padres eran las personas mas adineradas de la ciudad, no era de esperarse sus días fuera de casa por reuniones y fiestas de gala, nunca escuchó un "Ve a la cama ahora mismo a dormir" o "apaga aquel aparato". Solo tenía un hermano mayor, de 5 años más que ella, todo un adolescente que sólo iba de fiesta en fiesta, no era un irresponsable, lo admiraba de hecho, pero casi nunca lo veía.
Bajo lentamente las escaleras, sus padres vuelven esa misma mañana pero no se quedarán por mucho, sabía que su próximo viaje saldría esa misma tarde. - * "Tal vez una de las cocineras dijo que no dormí anoche, hoy me divertiré haciendo la vida imposible a alguien en esa cocina-" pensó la traviesa niña mientras corría a saludad a su madre.
–Mi niña, cada día creces más –Dijo la madre besando las mejillas de la menor.
–13 años mamá, soy toda una mujer.
–No me hables así, Taeyeon. –contestó su padre, haciendo tensar el rostro de la menor. –Aun eres una niña.
–Pubertad, padre –Respondió la menor abrazándolo.
–Tenemos cosas que hablar mi pequeña...
–Será mejor que se apuren, su vuelo sale en pocas horas y no empacaron, cuando regresen en 7 días exactamente será genial... -explicaba completamente emocionada.
Se sentó en el gran sillón de la sala mientras veía como sus padres se colocaban frente a ella –"que alguien me diga que no será aquella "charla" de cómo vienen los bebés"- -"Cállate, parece algo importante"- -Tal vez me quedé algunos días con la abuela, nada de otro mundo- Batallaba con sus pensamientos cuando su padre la interrumpió.
–Cariño ¿Te encuentras bien?
–¿Qué? –al darse cuenta de su distracción se enderezo y mostró su mejor sonrisa –Discúlpame, es que estoy despertándome, los escucho.
–Supongo que no es sorpresa para ti que volveremos a viajar esta tarde. New York es una ciudad llenas de oportunidades, es algo que debes estar aprendiendo mi pequeña princesa. El viaje se alargará más de lo esperado.
–Una semana más ¿acaso?, 14 días entonces. Contando desde aho-
–Dos meses
–¡¿Qué?!
–Preciosa, sé que tenías planes pero...
–Teníamos planes...todos juntos.
La menor bufo, intentó contener sus lágrimas, era una niña muy sensible cuando se trataba de sus padres. Su madre la consoló abrazándola, sosteniéndose entre su cuello, recordando cuando ella dormida de pequeña de esa manera. Vio a su padre parado frente a ella sin mostrar algo de pena por ella, lo miró con enojo.
–Me parte el corazón que me mires así.
–Me parte el corazón tenerlos lejos.
–Y aquí iniciamos otra conversación.
– ¿Quieres ser un poco más humano? Es tu hija –Alzó la voz la madre mientras limpiaba delicadamente las lágrimas de Taeyeon.
–Cuéntame...
–Tu hermano por lo que veo no se encuentra en casa...Yo he hablado personalmente con él. A lo que voy...tendrás una niñera.
–Debes estar bromeando.
–Taeyeon escúchame.
–No. –Se separó de su madre mirando fijamente a los ojos de su padre. –Una niñera... Suena tan ridículo.
–La decisión ya está tomada, su nombre e-
–¿Piensas que es por la niñera? USTEDES SIEMPRE VIAJAN, SIEMPRE ESTAN FUERA. Acaso ¿Te acordaste de mi último cumpleaños? O de la reunión por fin de semestre...de que me sirven las condecoraciones por las buenas notas que me exiges si nunca vas a verlas.
–Prometemos que cuando volvamos tendremos todo el tiempo del mundo para-
– ¿Para qué? Cuando vengan, mis vacaciones de verano habrán terminado. Solo vendrás para avisarme que tienen otra "Reunión importante en un país muy lejano".
La menor empezó a expresarse con un tono elevando en su voz, las lágrimas empezaban a caer, se sentía frustrada, no querida. Iba a continuar soltando todo aquello que guardaba por respeto a sus padres, cuando se escuchó como tocaron la puerta.
–Señores Kim, la señorita Jung se encuentra aquí. ¿Le digo que pase?
–Que pase...
Taeyeon de inmediato volteo para limpiar sus lágrimas, no soportaba que la vieran débil, ni sus padres. Vio como una chica con mirada tímida entraba a la sala, saludando cordialmente.
–¿Interrumpo algo? Lo siento, quería ser puntual Señores Kim.
–Ella es nuestra hija menor, Taeyeon. –Dijo la madre, dándole una mirada seria obligando a la menor a saludar.
–Esto no termina aquí –Dijo ella molesta caminando hacia las escaleras. –Oh disculpe mis modales –Se dio vuelta dirigiendo una mirada asesina a sus progenitores- Que tengan un buen viaje, señor y señora Kim –Sin más, corrió hasta su habitación, cerró la puerta lo más fuerte que pudo, demostrando todo su enojo acumulado.
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(*) Pensamiento o conciencia de Taeyeon
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Libérame.
Fanfiction"Nunca creí en un cielo hasta que te conocí. Nunca creí en los ángeles hasta que te encontre, y ahora que sé de ti, no pienso dejarte ir." Taeyeon, una chica de 23 años leía un trozo de sus poemas que escribía de pequeña. Cuando era feliz, cuando la...