Mi payasa.....

Su nombre...

Me desperté oliendo al sabroso olor de las tortitas.Bajé a la cocina y cuando me acerqué al salón para dar las gracias a Niall alli estaba él

-¿Otra vez tu?

-Veo que os conocéis-dijo Niall riéndose de mi expresión.

-Si pero ojalá no hubiera sabido de su existencia-aunque eso no era asi me alegraba tanto de volver a verle no habia parado de soñar con él en toda la noche.

Era el chico que conocí la anterior noche en el baño.Soltó una carcajada y me fui a desayunar sola a la cocina. Me habia puesto toda la boca con sirope y justo entró él.

-El sirope en la cara te queda muy bien-soltó una carcajada y no pude evitar sonreír.

Será mejor que te limpies si np quieres volver a parecer una payasa.

-Que casualidad que siempre me pillas cuando estoy echa una payasa.

Los dos nos reimos y fue la primera vez que levantamos ña mirada y nos miramos a los ojos.Ahí supe que quería a ese chico.Niall al ver que su amigo tardaba vino a la cocina y nos cortó ese intenso momento.

-Zayn,¿pasa algo?

-No tranquilo es que no encontraba....

-La despensa-respondi yo

-¿No ibas al baño?No hay quien te entienda

En ese instante me di cuenta de que vino a la cocina sólo para verme a mi.Una gran sonrisa se dibujó en mi cara.

-Si,fui al baño pero me entró hambre y por eso vine a la cocina.

Niall convencido con su respuesta se fue otra vez al salón.

Lo único que salió de aqullos maravillosos labios fue

-Adios payasa.

-Adios Zayn.

Terminé de desayunar y fui arriba a vestirme.Niall me dejo una camisa y unos shorts de su hermana Naya.Bajé corriendo pero Zayn ya se habia ido.

-Gracias Niall.

-De nada,si necesitas algo este es mi número.

Le di dos besos y un abrazo.

Iba a coger un taxi cuando un chico en moto se paró enfrente mia.

-¿No te apetece dar una vuelta en moto?

-No te conozco

-Yo creo que si

Me miró y enseguida le reconocí.

-¡Zayn!

Lo grité tan entusiasmada.Él se río de lo fuerte que lo dije.

-Ahora que sabes quién soy,¿subes?

Le miré desconfiada pero aún asi me subí.Me agarré de él y soltó una carcajada al ver como abrazaba su cuerpo.

Llegamos a mi casa y antes de entrar me agarró la mano y me puso contra su cuerpo.Nuestras narices se rozaban y sus manos empezaban a bajar cada vez más.Nuestros labios se empezaban a rozar,pero yo me aparté de él sabía que sólo le conocía de una noche y eso no estaba bien.

-Espero verte otra vez.

-No lo dudes mi payasa-dijo sonriendome y no pude evitar soltar una de mis mayores carcajadas.Cada vez que el pronunciaba esa palabra que para algunos es un insulto,para mi era la palabra que me hacía sonreír.

Subí a mi habitación despacio y me tumbé en la cama.No paraba de pensar en ese momento que tuvimos junto a su moto.Estaba tan cerca de besar esos preciosos labios.No paraba de repetirme a mi misma que era Tonta pero fue lo mejor.No queria arriesgarme a saber con cuantas chicas habia jugado a este juego tan infantil pero tan romántico.