Capitulo 10

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Aleska PDV:

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Aleska PDV:

Hoy es el día en que Josep llegara a Italia. Pasaron dos dias desde que convencí de forma malvada a Kyler para que Josep se quedara con nosotros. Según Kyler, vamos a quedarnos en una pequeña casa cerca del bosque ya que Josep no puede saber de la existencia de la manada.

Me incomoda llegar a la conclusión de que obligue a Kyler a venir conmigo, pero, el mismo Kyler me dijo que viene para no dejarnos solos en la misma casa. Tambien él aporto la idea de que solo Josep se quedara en esa casa y nosotros nos quedaramos aqui, pero, quiero pasar tiempo con Josep porque no se que pasara en el futuro. Y eso me preocupa.

Luego de un rato divagando en mis pensamientos me levanto del sofá caro pero cómodo de la sala. Voy hasta "mi habitación" luego de una gran caminata por esta enorme casa, entro y me dirijo directamente al armario. Aún recuerdo cuando le pedi a Kyler privacidad, por ello tengo mi cuarto propio.

Saco unos pantalones color carne, una camisa manga corta negra y me coloque un sueter negro muy comodo. Unas botas de tacón negras tambien, y listo. Agarro el celular, mi maleta y la de Kyler, bajo hasta la cocina para esperarlo. Según y que me viene a buscar en unos minutos ya que Josep llega a Italia en tres horas, y como Italia está algo lejos de donde habitamos, tenemos que salir temprano. Desordeno un poco mi larga cabellera para darle un toque salvaje pero sensual mientras espero a Kyler.

El sonido de la corneta de su auto me alerta y salgo soplada hasta el carro. Abro la maletera que gracias a dios es facil de abrir y meto nuestras cosas.

Entro en el carro, me coloco el cinturon y respiro agitada. Mayor carreron que pegue.

-Buenos dias Aleska.

Jesús que voz.

Algo sonrojada volteo hacia el pedazo de dios griego que está a mi lado. Sus hermosos ojos azules me examinan con ternura y algo de cariño pero manteniendo su rostro sin emociones. Tan serio.

-Hola Kyler -suelto algo nerviosa.

Él me sonríe rapidamente y luego arranca. Observo su atuendo y está vestido todo de negro, es su color. De verdad que se ve sexy en el.

Pasamos casas y avenidas hasta llegar a la gran muralla que nos separa del mundo exterior.

Kyler maneja hasta llegar al enorme porton, baja el vidrio y observa a uno de los guardias de seguridad. Él hombre rapidamente hace una señal y el porton se abre. Italia alla vamos.

 Italia alla vamos

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