Amor nunca te vayas de mi

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Joel me respondió simplemente sin palabras y mas con actos, me dio un beso muy bonito e intenso a la vez, me sentí ir hasta el cielo y volver a bajar, sentí como mi mundo se derrumbo por completo a los pies del hombre que en esos momentos consideraba el mas importante de mi vida, también había tomado tal vez la decisión mas importante de mi vida, esa decisión era la de estar con el hombre que amaba por completo, a que me refería con esto, me refería a estar con Joel en cuerpo y alma. No sabía Joel como tomaría esa decisión pero decidí arriesgarme y decírselo de una vez, así que tome el valor suficiente y le dije, Joel tu sabes que yo te amo mas que a mi propia vida, sabes que he decidido estar junto a ti por ser tu y no por apariencias ni nada mas a lo que te dije anteriormente cierto, el me respondió que por supuesto, que el sabía que yo estaba junto a el por ser el mismo y que le gustaba la idea de que no fuera por popularidad ni algo mas, tome aire profundo y le dije, Joel quiero que estemos juntos.

Me dieron muchas ganas de reír al ver su cara de sorpresa, sabía que tal vez era muy directa con mi comentario, pues siempre que tocábamos el tema yo lo evitaba, pero era lo que quería, deseaba que la primera vez que estuviera con alguien fuera por amor, tal vez podía estar loca pero lo que sentía por Joel era amor y deseaba que si tenía que pasar lo inevitable fuera con el.

(....)

Llego la noche y estábamos en la piscina con David, Arturo, Santiago, mi hermana, Joel y yo. Después de que le dije a Joel mi deseo el acepto, podía notar que aún era una sorpresa para el, pero igual sabía que no tenía que esperar a nadie mas, así que tome la iniciativa y me acerque a el oído de Joel y le susurre que lo esperaría en la alcoba. En la tarde tuve el tiempo suficiente para ingeniarme un buen plan, sencillo pero efectivo. Había decorado la habitación de una forma muy sencilla pero digamos con algo de romance incluido, había colocado en el protector de vidrio del bombillo papel seda rosado suave y la cama la había decorado con los típicos pétalos de rosa, pero no hice un corazón sino que escribí con los pétalos el nombre de Joel y el mio unidos por un signo mas.

Cuando sentí como una mano cálida tocaba mi espalda, salí de mis pensamientos, voltee a ver y era la mano de Joel, me dijo que ya se estaban despidiendo para irnos a acostar, así que hicimos lo mismo. Cuando entramos a la habitación el me dijo que estaba muy bonita la decoración, en ese momento sentí como si tuviera mariposas en mi estomago, me sentía muy nerviosa y estaba temblando, así que me acerque a el y toque su brazo, supongo que el noto mis nervios y lo único que salieron de esos labios fue déjame, yo lo hago, por favor solo relájate y disfruta el momento, así que me relaje y deje de estar tensa y prevenida.

Sentí como su mano acariciaba mis brazos y luego mi espalda, me relaje mas cuando sentí ese calor humano tan acogedor, nos sentamos en la cama, recordé que estábamos en traje de baño, así que sabía que seguía su paso era seguro, era desaparecer la parte de arriba del vestido de baño, efectivamente mi mente tenía muy claro todo lo que haría, ese fue su paso, con el pasar del tiempo y de después de darle besos a Joel hasta creer que no soportaría mas, no existía ninguna prenda de ropa que nos separara, me sentía insegura pero confiaba en Joel eso me bastaba,mire a Joel y entendí que pasaba por su mente. Me preguntó estas lista, le respondí que si, sentí como algo en mi se retorcía por dentro y sentí un fuerte dolor dentro de mi, pero en cuestión de unos minutos esa sensación desapareció y solamente sentía placer, luego de todo lo que paso, nos quedamos dormidos a la una de la mañana pero no me arrepentía de nada, había sido la mejor experiencia de mi vida.

Desperté por un suave beso en mi cuello, voltee a ver y era Joel, no le respondí nada y solamente bese sus labios de una forma que nunca imagine, luego sentí como tocaban a la puerta, era Arturo, abrió la puerta y lo único que se me ocurrió hacer fue correr al baño, me cambie y salí al acabar, Joel me dijo...

Nuestro CaminoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora