Esta es la verdad.

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-Listo, llegué -dijo Chat antes de tocar a la ventana de la casa de Marinette.

Eran las once de la mañana por lo que seguía enredada entre mis cobíjas, hasta que escuché que alguien llamaba a mi ventana. Me levanté aún en pijama y abrí la ventana, permitiendole el paso a Chat Noir.

-Buenos días Prrrrincesa.

-Hola Chat - contesté con un tono algo soñoliento, como si estuviera en las nubes.

-¡Wow! ¿qué pasa Princesa? Te ves como si algo realmente lindo te hubiera pasado.

-¡¿Ehhh?! - contesté despertando de mis sueños. No, no pasa nada.

-¿Segura? - preguntó aquel gato.

-Sí..., y, bueno, ¿para qué viniste hasta aquí? -dije tratando de cambiar el tema, era incómodo tenerle que hablar sobre lo que pienso.

-Tengo que hacerte una pregunta.

-Claro Chat, puedes preguntarme lo que quieras.

-¿Recuerdas al modelo Adrien Agreste?

-Oh, claro -dije al momento en que desaparecían todos mis ánimos.

-Y..., me dijeron que te gustaba ¿es cierto? - noté una pizca de esperanza en su voz, lo cual me extrañó.

-¿Y para qué se supone que quieres saber eso?

-Sólo curiosidad.

-¿No olvidas la frase, la curiosidad mató al gato? -dije bromeando.

-Vamos, es solo un dicho.

-Está bien, te diré la verdad, pero no quiero que le digas a NADIE. ¿Entendido Chat?

-Claro que sí Princesa.

- Lo odio. Desde hace dos semanas, recuerdo, estaba en la escuela, y yo como la grandísima tonta que soy, ¿sabes lo que iba a hacer? ¡Me le iba a declarar! No sé ni en qué estaba pensando en ese momento, Alya le dijo todo, te prometo Chat, que creí que a él le gustaba, aunque fuera sólo un poquito, pero creo que sólo fue mi imaginación, recuerdo que me sentí tan triste que un akuma entró a mi, y me volví una villana, ahí estaba en el parque congelando todo, hasta que apareciste tú, y me tragiste a la realidad, diciéndome que Adrien ya tenía a alguien más. Me sentía destrozada, pero entonces aparece Nath..., Nath, él..., él es mi único consuelo en estos momentos, me comprende y, principalmente, me quiere por lo que soy -claro que no conseguí decir todo esto sin alguna que otra lágrima. Y creo Chat, que todos aquellos sentimientos que tenía hacía Adrien desaparecieron, ya no quiero saber nada de él, así que ni se te ocurra mencionarlo de nuevo, ya he tenido suficiente - luego de decir esto, sentí como si un gran peso de encima se me quitara ahora que había soltado todo lo que sentía.

Chat se quedó asombrado, creo que no esperaba todo lo que diría y la forma en que lo diría.

- Lo siento Princesa, en serio no sabía que te sentías así. -Seguido de esto, me dio un abrazo, y yo se lo devolví, duramos así hasta que su miraculous comenzó a sonar.

- Adiós Princesa, me tengo que ir, sabes que te quiero, y puedes contar conmigo para lo que sea - noté el dolor en su voz. Pero ¿por qué? Bueno, creo que sólo fue mi imaginación.

- Adiós Chat.

Luego cerré de nuevo la ventana y me recosté en la cama, pensando en todo aquello que acababa de pasar y cómo la curiosidad de ese tonto gato era tan grande.

My Lady (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora