Capri y Virgo estaban repasando la lista de las cosas que llevarían. Ropa, mucha ropa, comida, comida y más comida, y técnicamente eso era lo que llevaban, bueno, la tecnología no podía faltar. Todos estaban saltando de la emoción, ya estaban en el aeropuerto, y como era de costumbre, estaban malditamente atrasados gracias a la pretenciosa de Leo. Capricornio quería dejarla por egocéntrica, pero a petición de Sagitario, dejó que fuera con ellos.
— TODOS ARRIBA, MUNDO —dijo Géminis subiendo al avión.
Como estaban atrasados, solo subieron y se sentaron cada uno en su puesto. Cáncer iba con Libra, Tauro con Escorpio, Aries con Sagitario, Piscis con Virgo, Acuario con Capricornio, y Leo con Géminis. Iban la mayoría bastante cansados por haber corrido tanto, por lo que la mitad de ellos iban durmiendo. Quienes iban más activos, por así decir, eran Piscis y Virgo. Esos dos parecían canguros en la Luna, totalmente emocionados y ansiosos de llegar ya a su destino.
— ¿Nos imaginas a todos nosotros en la playa, tomando el sol, jugando voleyball y comiendo hasta explotar comidas exóticas? Dios, será genial —dijo Piscis estirando los brazos— ¡Vamos, Virgo, alégrate un poco! De hecho, tú misma y Capri organizaron este viaje, deberías estar feliz.
— ¿Qué pasa si algo resulta mal? —preguntó ella pensando si algo se le había olvidado.
— No deberías preocuparte, Virgo, si hasta Capricornio está relajada, mírala —dijo apuntando al lado, a la chica que escuchaba música junto a Acuario— ¡Piensa esto! Podría ser un viaje muy romántico.
— Odio los viajes románticos.
— Porque no estás enamorada, tonta —dijo él rodando los ojos divertido— Probablemente de este entretenido viaje volverás hecha una Dios del sexo y una pervertida profesional.
— Cállate —a Virgo se le subieron los colores y le dio un pequeño golpe en el hombro a Piscis.
Los otros dos chicos despiertos, eran Géminis y Leo, los cuales apenas se hablaban, ya que no se caían muy bien. Y Capri con Acuario, escuchaban música. Para ser más exactos, Me voy Enamorando de Chino & Nacho. Él no podía evitar mirarle la boca, ni los ojos o simplemente toda ella. Amaba todo de ella. Había aprendido a respetarla, aguantarla y quererla desde que tenía memoria, prácticamente. El avión aterrizó un par de horas después y los signos pensaron que había sido una eternidad.
— Nunca había visto a Capricornio tan relajada y feliz —dijo Cáncer bajando del avión— Pero me alegro de que sea así.
— Es porque Acuario le hace bien —comentó Libra.
Cáncer frunció el ceño y suspiró. Capri empezó a saltar hasta el interior del aeropuerto, seguida de los demás. Agarró su mochila y luego cayó en cuenta de que todo estaba alejado y la gente vestía raro, al menos más extraño de lo que vestían en donde vivían. Algunos se acercaron a las personas y empezaron a preguntar dónde rayos estaban, pero nadie supo responderles. Hablaban un idioma raro que desconocían.
¿Dónde demonios fueron a parar?
— Hola, ¿ustedes ser extranjeros que hablar español? —Piscis asintió y alzó una ceja— Oh, ustedes poder alojar en mi casa si ustedes no tener donde dormir.
Todos se miraron entre ellos.
— Sí, por favor, nos hemos confundido de avión —dijo Cáncer haciendo una mueca.
— Pues, extranjeros tontos, venir al tren con mi persona —Libra y Leo querían reír, pero se aguantaron las ganas— Llegar en treinta minutos a casa en playa, ustedes cómodos hasta partir.
— Oh, gracias, señora.
— Yo ser Chandra —algunos fruncieron el ceño.
— Perdone, ¿dónde estamos? —preguntó Géminis algo confuso.
— Nosotros estar en La India —Capricornio y Virgo casi sufren un ataque.
Sin embargo, todos siguieron a Chandra hasta el tren que los llevaría a la casa donde vivía la señora, o al menos eso se entendía con su español. Al subir al tren, Piscis podía sentir lo nerviosa y temblorosa que estaba la pobre Virgo, por lo que sigilosamente le tomó la mano para tranquilizarla. Ella no pudo evitar lanzar un suspiro de alivio al aire y apretar la mano de su amigo, quien gracias a Dios, se había dado cuenta de su nerviosismo.
El problema fue al bajarse del tren. No se bajaron todos. Faltaron Capricornio y Acuario, que no alcanzaron a bajar, y la próxima parada quedó más lejos de lo que creían. Si él no hacía algo, ella iba a entrar en pánico.
— Chicos, eh, chicos —dijo Cáncer, llamando la atención de todo el mundo— ¿Dónde están Capricornio y Acuario? ¿Bajaron del tren, no?
Miraron a todos lados.
— ¡Maldita sea! Chandra, ¿a dónde va el tren?
— El tren ir hacia Bombay —Cáncer pasó una mano por su cara.
— Joder, espero que estén bien, ¿sabrán dónde estaremos? —dijo Sagitario.
— Lo dudo, pero bueno.. ¿vamos a la playa?
Y todos empezaron a golpear al idiota e inmaduro de Aries, mientras Chandra reía exageradamente.
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Juegos del Zodiaco.
HumorDoce signos conviviendo día a día sin saber quiénes son o cómo llegaron ahí. Seis chicas completamente diferentes. Seis chicos totalmente distintos. Una vida para divertirse, compartir y enamorarse. Y la memoria, muerta eternamente.