One Shot Trunks y Pan

Reencuentro. ❤Trunks y Pan ❤

ONE-SHOTS DRAGON BALL

-Hola ¿Cómo estás? Tenía tanto tiempo sin verte -Saluda la mujer de ojos azules.

-Pues tienes razón, ¿Cuánto hace? -pregunta la mujer de ojos negros.

-Dos años, desde que nos graduamos no nos vemos, todo por culpa de Él tonto ese.

-Ya pues no te preocupes, mejor te invito a un café... -habla la azabache.

-Claro vamos...

La cafetería Cielo Azul era las más Famosa del lugar, no solo por el café que servían, si no por sus postres y su buena atención. Pero esta vez, la cafetería Cielo Azul es protagonista, ya que nuestras protagonistas están en este lugar.

-Cuéntame Bura ¿Qué ha sido de ti todo este tiempo?

-Bueno, no mucho, me gradué, en este momento estoy trabajando en un despacho contable.

-Me alegro ¿Cómo te va allí? -Sonrió pícara - ¿Algún chico por allí?

-JAJAJA ¿Cómo eres eh?... -sonrió - ¿Mejor tu dime Hay algún chico allí?

-Pues no, en este momento no.

-Que mal, eh. Oye mi mamá ahora está celebrando su aniversario número 100

-¡JAJAJA! No seas mala -rió a carcajadas.

-Ya bueno, pero ambos están viejos. ¿Vienes Pan?

La azabache bajo la mirada, no podría ir a esa fiesta. ¿Y sí se lo encontraba? No era mejor no ir.

-Mmm, me parece que no puedo ir, tengo cosas que hacer. Lo siento gracias por la invitación.

-No seas modesta, el no estará así que puedes venir y pasártela a gusto.

La azabache lo pensó, si era una buena idea ir a esa fiesta.

El día era perfecto, estaba nublado, el sol no quemaba, apenas y se asomaba entre las nubes, la brisa era fresca, pero no lo suficiente como para usar abrigos. La brisa acariciaba con un poco de bestialidad el cabello de la azabache.

Cuanto había cambiado en tan poco tiempo, su cabello era mucho más largo, su piel mucho más clara, el contacto con el sol era nulo. Así que su piel no estaba tan tostada como cuando era joven.

-Pan, tengo que dejarte voy a dentro a ayudar a mamá con la cocina.

-¿Quieres que te ayude?

-No como crees, eres mi invitada, mejor ve a la sala acomódate o ve a mi cuarto para mayor privacidad.

Pan hizo caso a lo que la peli-azul le dijo, pero cuando pasaba por la puerta de Bura miro la puerta de Él.

¿Y si entro solo para dar un vistazo? Bura dijo que él no vendría a la fiesta.

Pan entro a la habitación y lo primero que vio fue la cama desordenada, tanto tiempo y no cambio nada. Sus paredes del mismo color azulado las ventanas con esas cortinas blancas. Ni siquiera había cambiado de posición los muebles, todo exactamente igual como ella lo recordaba. Excepto una cosa, esa foto con la chica de ojos verdes.

-¿Quién será ella? -se pregunto a sí misma.

El serojo de la habitación comenzó a sonar. Alguien estaba entrando. La azabache como único escape se metió al baño.

-Que día... -se escucho decir desde afuera.

La azabache se encontraba observando desde la puerta del baño, nada del el cambio. Bueno, sí, un poco, estaba más delgado, un poco más moreno qué antes.