26. Le sacre coeur carroussel.

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"Llegamos" interrumpí la plática.

Nos quedamos de pie a unos cuantos metros del edificio blanco con sus grandiosas cúpulas; los árboles, flores y ambientación eran impecables. La gente se movía de un lado a otro con sus familias o parejas, había algunos grupos de adolescentes corriendo o riendo en varias de las bancas.

"Ven, vamos." Le indique que siguiéramos avanzando, "Tenemos que subirnos." Dije apuntando al gran carrusel que se robaba el estrellato de toda la explanada, "si no, no habrá valido la pena haber caminado tanto."

Nos formamos en la fila después de dos familias, la chica buscó entre su bolsa hasta sacar un pequeño cuaderno y pluma, la miré fascinado, ¿empezaría a escribir justo en este momento?

"Alik, ¿cómo se llama este lugar?" apuntó a la explanada, pero su vista se mantenía al carrusel

"Es Le sacre coeur carroussel, que significa..."

"El carrusel del sagrado corazón." Interrumpió casi suspirando sus palabras

"¡Excelente! Aún lo tienes." Rodó un poco los ojos mientras sonreía, "Es llamado así porque esta enfrente a La Basilique du Sacré-Coeur de Montmartre o La basílica del sagrado corazón de Montmatre, la cual es la colina que acabamos de subir." Apunté hacía el camino que acabábamos de hacer.

"¿Subimos una colina?" volteo a donde apuntaba, "¿Cuándo?"

Me dio risa su sorpresa, "Lo sé, lo sé, yo tampoco lo creía la primera vez, pero es verdad."

Años atrás cuando acabábamos de llegar a París y vivíamos en dos chambres du ___ las cuales eran pequeñas habitaciones que antes eran usadas para el personal de limpieza, estamos uno a lado del otro, éramos vecinos, pero vivíamos casi siempre en el departamento del otro, había sido bueno que habíamos ahorrado antes de venir y conseguimos una con baño independiente en la recamara de Leah, por lo que era donde comúnmente pasábamos la mayor parte del tiempo que estábamos en casa.

Jim fue a visitarnos meses después de la mudanza, llevaba un buen ritmo en la empresa de la familia Roberts y empezaba a darme a conocer con algunos de los clientes, iba subiendo poco a poco como le había pedido, no quería llegar siendo alguien, quería ganarme el respeto de mis compañeros y no llegar teniendo un camino mucho más adelantado que los demás, aunque sabía que tenía gran ventaja de cualquier manera.

¿Por qué no rentan un departamento más grande? Podrían recibir visitas y podrían vivir más cerca de sus trabajos y las atracciones de la ciudad. Podrían ir los fines de semana al carrusel.

¿Sabes cuanto cuesta la renta? No podemos pagárnosla. Había dicho casi de inmediato Leah, lo cual era cierto, las rentas en el centro o áreas importantes en París eran extremadamente altas.

Podríamos movernos a un mejor departamento, pero creo que no es el momento adecuado, tenemos poco viviendo aquí, apenas estamos acoplándonos. Rodé con mi brazo los hombros de mi novia, quien se tenso un poco, la voltee a ver, ¿Qué estaba pasando? Miré a mi amigo quién mantenía su vista directamente a mi brazo y su mandíbula se tensaba.

Puedo ayudarlos. Dijo subiendo la vista hasta mantenerla conmigo, Tengo un departamento en la ciudad, es de dos habitaciones.

¿Desde cuando tienes un departamento en París? Le pregunté curioso

Desde hace años mi tío tiene un departamento en París, se mudó hace unos meses y me lo vendió. Se encogió de hombros, Pueden vivir conmigo.

¿Estas bromeando? Dijo Leah emocionada

Claro que no, lo digo en serio, voy a pasar unos cuantos meses en París por algunos proyectos de la empresa, y me sentiría solo en ese departamento. Y muy mal que ustedes vivan... aquí.

Sonreí, Gracias.

La fila empezó a avanzar y nos adentramos al carrusel, le tendí la mano para que no tuviera dificultad en subir y escogimos dos caballos que estaban juntos, y un poco alejados de las familias.

"Nunca me había subido a un carrusel." Dijo Lyv rompiendo el silencio.

"¿Nunca? ¿Ni cuando eras pequeña?" la miré sorprendido mientras negaba con la cabeza, "Bueno, espero te guste." Sonrió nerviosa, saqué mi celular, "Te tomaré la foto del recuerdo." Un poco nerviosa, pero siguiendo mis indicaciones de fotos pasados empezó a posar, sonreí divertido dándome cuenta de que, si me había prestado atención, empezamos a avanzar y tomó fuertemente el tubo sosteniéndose para no caer.

Pronto, al darse cuenta de que iba más despacio que las personas caminando a nuestro alrededor bajo las manos y las acomodo en la pequeña correa del caballo. Tomé un pequeño video y guardé mi celular.

Bajamos y salimos después de las familias, podía ver a la chica un poco desorientada, supuse que se había mareado, "¿Estas bien?"

"Perfectamente." Su voz sonaba lenta y arrastrada.

"Creo que te maree con mi platica, ¿no es así? Dije removiéndome el cabello nervioso, había empezado a darle algunos de los datos curiosos que conocía del carrusel y sus alrededores. Me sentía mal porque se suponía que la guiaba para que conociera la ciudad y se divirtiera, no para que se sintiera mal.

Negó lentamente, "Claro que no. ¿Cómo crees?" sabía perfectamente que mentía, pero apreciaba el gesto, "Pero, parecías una especie de maestro, como el profesor Akan, el de literatura de preparatoria."

"¿Akan?" era uno de mis maestros favoritos, tenía pasión por su materia y se preocupaba por sus alumnos, era de los poco maestros que sabían de mis problemas con familia y siempre me alentaba a seguir adelante, me recomendaba y prestaba libros de la escuela, "¿Por qué te recuerdo a él?

"Siempre decía datos curiosos de todo lo que sabía."

Sabían que Rebelión en la granja había sido censurado en varios países, me miró fijamente, como en Inglaterra, la cual era aliada de la Unión Soviética, continuo por el pasillo dejando de verme, era porque era una sátira de la Revolución Rusa.

"Me compare á un professeur de soixante ans." Levanté dramáticamente mis brazos al cielo mientras reía.

"Mi francés esta definitivamente oxidado."

"He dicho, me compara con un profesor de sesenta años." La miré fijamente, "Creo que esas lecciones de francés tendrán que seguir en marcha." Asintió sonriendo, "¿Tienes hambre?"

"Por supuesto."

"Conozco un buen restaurante cerca." Sabía que probablemente el pequeño almuerzo que habíamos tomado no era lo que hubiera comido si supiera toda la caminata que nos aguardaba en el día.

Esperábamos para pasar una calle cuando cruzó un auto frente a nosotros, la chica me miró casi suplicante, "¿Crees que podamos pedir uno?"

Reí ante su comentario, "¡Oh! Por favor, te prometo que no esta lejos." Bajó dramáticamente la cabeza, "Ven."

Empecé a caminar y pude sentir como daba un pequeño trote hasta quedar a mi lado, la miré. Recordé que tenía que caminar más lento, la chica probablemente había apresurado todo el camino su paso; lo cual comprobé al ver como relajaba su caminata cuando empecé a caminar con pasos más cortos.  

The Choice [PV's Harry]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora