Capítulo 2

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- ¿Se puede saber que te pasa?- Es lo primero que le pregunto a Rin cuando estamos en el pasillo principal del Instituto.

-¡No, que te pasa a ti! Te he dicho que no te acerques a él, no es buena gente y todos los que se involucran con el acaban mal. Créeme lo se de primera mano. Y no preguntes por que. Haru es por tu bien, soy tu mejor amigo solo quiero, que estés bien. Y todo alrededor de el se desvanece en un profundo agujero sin salida. -Luego de decirme eso bufa con nerviosismo, y me mira esperando una respuesta.

Puede que Rin siga pensando que soy ese Haru callado, tranquilo y feliz. Pero después de lo ocurrido hace unos años. Estoy más que hundido en las sombras, y nadie me comprende. Llevo demasiado tiempo huyendo. Un poco de peligro no me vendría mal para sentirme vivo. Al final y al cabo todo debe acabar como comienza.

Le miro fijamente, el pasea nervioso así lo mejor que puedo hacer es tranquilizarle. Aunque me da igual lo que le haya pasado con Makoto. Yo aún tengo varias cosas pendientes con él.

-Esta bien, intentaré mantenerme alejado... Pero tengo algunos asuntos con el, que tampoco te conviene saber. Solo vamos a charlar. - Le digo con toda la calma posible. Niega con la cabeza y comienza a andar hacía la cafetería.

Le sigo y comemos con Gou. Luego los tres nos marchamos a casa. Me despido de ellos ya que vivo unas calles más lejos.

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Lo primero que hago al llegar a casa es dormir, estoy muerto. 

De repente se oye un fuerte golpe en la entrada, asustado me levanto a ver que es. Y lo que me encuentro es algo o mejor dicho alguien muy enfadado. Solo me mira desde el umbral, y comienza a acercarse lentamente hacía mi.

Comienzo a respirar pesadamente y todo se revuelve dentro de mi. 

-Así que, tu perrito guardián es Rin. - Dice con burla. 

-No, solo es mi amigo. -Susurro despacio con miedo de que se marche. Le da una patada a la puerta y la cierra. Me acorrala con sus brazos y me mira intimadante.

-Bien... Ahora tu, como el buen chico que eres me vas a decir, que es lo que tienes tu de mi.

-Yo... Tengo tu cartera. Pero quiero algo a cambio.

-Genial y ¿que quieres, de mi?- Dice mientras aspiro su aroma abrumador.

-A ti.- Digo rápidamente. Me impresiono de las palabras que se escapan de mi boca.

-¿A mi? ¿Que parte de mi?- Dice cogiendo mi mano y pasándola por su torso mientras levanta su camiseta muy despacio. Mi mirada queda pegada en sus músculos. 

-Todo.- Le digo con voz suave. Entonces me levanta el mentón con sus dedos y comienza a acerca su rostro al mio. Cuando vamos a unir nuestros labios escucho un ruido. 

Entonces me despierto y es cuando me doy cuenta de que todo fue un sueño. Estoy sudando y muy agitado, vuelo a escuchar el ruido de antes y es mi móvil. Es un número desconocido.

-¿Si?

-Hola- Es él, me impresiono. 

-¿Mako...to? - Pregunto con inseguridad.

-Así es... Quiero verte. El viernes a las 21:00 en el club Opium. 

-Espera... ¿Como conseguiste mi número? - Le pregunto con curiosidad.

-Eso no importa, tenemos cosas pendientes, muchas cosas que tenemos que resolver. - Dice con una voz que me deja perdido durante unos segundos.

-¿Opium? 

-Si no tiene perdida, adiós. - Corta la llamada y yo me estiro en la cama. 

Ese sueño... Fue tan real, casi siento sus labios. ¿Como serán? Un momento, que estoy diciendo. Des de luego estoy perdiendo la cabeza. 

A eso de las 20:00 viene Rin con Gou a cenar conmigo y a mitad de la cena Gou recibe una llamada y se marcha a toda prisa. Rin suspira y maldice por lo bajo.

-¿Qué pasa?¿Porqué se ha ido?- Le pregunto con curiosidad.

-Lo que pasa es que hoy, hay carreras y pues... Su "novio" corre con ella. Cualquier día llega muerta. No le he dicho nada a mi madre, aunque tampoco es como si le importara. Siempre de viaje, y con su trabajo.- Suelta todo eso cansado.

-Bueno, porque no nos relajamos y luego la vamos a buscar. - Le digo enseñándole un porro.

-Vale ¿por que no? Además aún no me cuentas nada de lo que has hecho fuera estos años. - Enciendo el porro y le doy una larga calada. 

No he hablado con nadie después del incidente con mis padres, y la verdad prefiero no recordarlo. Se lo paso a Rin mientras voy soltado el humo poco a poco. Lo mejor es solo contarle por encima.

-Mis padres se divorciaron, me he peleado con los dos y no saben donde estoy o eso creo... De todos modos... A nadie le importa. Me he dedicado a viajar. Hubo alguien... - Se me quiebra la voz, los recuerdos aún siguen intactos, las sensaciones que no he vuelto a vivir, pero lo peor de todo los sentimientos que alguna vez estuvieron ahí.

-¿Y que paso con ese alguien? - Dice antes de dar una calada.

-Una gran mierda eso paso, prefiero no nombrar ni quiera su nombre. - El daño que me causo sigue presente y todos los sentimientos buenos son reemplazados por el odio que aún tengo dentro de mi.

Seguimos fumando y pasando el rato, y por mi mente pasa Makoto y Rin. ¿Que tienen en común? Así simplemente decido hacer la pregunta.

-¿De que conoces a Makoto?¿Por que lo alejas de mi?- Cierra los ojos, respira con fuerza y los vuelve a abrir.

-Le conozco desde hace ya unos años él, Sosuke y yo eramos inseparables... Pero casi pierdo lo más preciado que tengo por su culpa. Me apuñalo por la espalda, por eso mismo se que no es buena, persona solo causa daño.- Me mira fijamente a los ojos y pero su mirada esta perdida. Acerca su cara la mía, estamos muy cerca.

-Llevo mucho años esperando por este momento.- Es lo ultimo que dice al juntar sus labios con los míos. Es un beso lento, suave pero no envía ninguna sensación a mi cuerpo. Y cuando soy consciente lo alejo.

-Esto no está bien. - Me levanto y me voy al baño. ¿Que coño hemos hecho?

Dos Sombras Intensas (MakoHaru/Yaoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora