Dos Sombras Intensas (MakoHaru/Yaoi)

Capítulo 1

POV* Haru

Despierta...

 Es lo primero que recuerda mi mente, me levanto y olvido esas palabras que se repiten cada día en mi cabeza.

Me doy una ducha y salgo de casa en silencio, que es lo que ha sido mi vida estos últimos años soledad y silencio. Para alegrarme el día me pongo los audífonos, enciendo un cigarro y voy camino al instituto.

 Voy a cruzar la calle, cuando una moto me roza y me tambaleo. Pero sera hijo de... Que se ha creído que la calle es de él.Cuando miro al suelo veo una cartera, bueno ya que no hay nadie más la recojo y lo único que encuentro son condones, pastillas y dinero. Me fijo en el motorista y en su ancha espalda y para que negarlo en su culo.Pero cuando me doy cuenta ya se ha marchado a toda velocidad.

Despabilo y sigo andando, me ha dejado un poco afectado el chico. En el camino veo una cabellera roja. 

- ¡Haruuuuuuuuuuuuuuuuu!- Grita Rin mi mejor amigo. Se acerca corriendo a abrazarme y me levanta.

- ¡Woooooow! Calma que solo hace 1 año que no nos vemos. - Le digo alegre.

- Jodeeeeeeeeer, es que no sabes cuanto te he echado de menos, ya veras es nuestro ultimo año y lo vamos a acabar ¡juntos!¿A que si?-Cuanta energía por la mañana, debería darme un poco.

-Claro que si, venga,ya puedes bajarme que la gente esta mirando raro.- En ese momento fijo mi mirada en una chica pelirroja que me mira atentamente.

-Hola...- Murmura bajo. Casi no la oigo bien desde aquí arriba.

-¿Kou, madre mía como has crecido!?- Me suelto y la abrazo con cariño, es como mi hermana pequeña.

-Venga, vamos que no llegamos. - Dice alegre Rin.

Ya en la entrada miramos unas listas con los nombres y curso correspondiente, he tenido suerte y he quedado con Rin. Justo cuando íbamos a entrar una gran moto verde eléctrico derrapa en la entrada. Y allí se baja él, mi motorista, el mismo que casi me mata esta mañana. Se quita el casco y se puede ver su desordenada cabellera marrón y esos preciosos ojos verdes que hacen juego con su moto.

Todos le quedan mirando, pero Rin tira de mi mientras me va hablando pero,  yo no le presto la mínima atención.

-¿Y... el de la moto quien es?- Le digo sin rodeos, rueda los ojos bufa y me ignora.

-Tachibana, Mako...to- Dice con cierta añoranza. 

-¿Le conoces? Parece que erais amigos o algo así, vaya cara has puesto.- Le digo intentando distraerlo un poco, se ha quedado perdido.

-No... no que va es de lo peor mejor ni mirarlo, de todos modos ¿ porque querías saber?-Dice frunciendo el ceño.

-La verdad es que casi me atropella esta mañana, simple curiosidad.- Le digo aunque lo que me preocupa es lo que encontré de él.

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Luego de acabar las clases, me dirijo al baño. El pasillo se llena de gente y es casi imposible pasar. Con esfuerzo salgo del tumulto y entro al baño.

 No hay luz, las ventanas están rotas y todo hecho un asco. Vaya mierda, entro al cubículo cuando escucho como dan un fuerte portazo.

-¡Te he dado una semana, dame el dinero!- Grita alguien. 

-Yo... Es que no lo he conseguido pero tengo la mitad... y pue...- Lo único que se oye es un grito ahogado. Y varios golpes.

-¡Cierra la puta boca y escucha bien! Tienes hasta las doce de esta noche, si no tienes mi dinero te vas a enterar, te voy a dejar sin piernas y entonces mientras te retuerces del dolor y desangres pagarás la mitad de la deuda, puede que haga una visita a tu familia... Ya sabías cual era el riesgo de meterse en esta mierda y aún así no cumples. Créeme no quieres verme cabreado de verdad.- Lo suelta y se va dejando al chico en el suelo con la cara llena de sangre.

Con un poco de miedo salgo del baño, para evitar que nadie me vea. Pero al salir choco con dos chicos uno de cabello negro y ojos celestes y el otro... es el que casi me mata esta mañana.

Los dos se quedan mirándome, evito su mirada pero el de pelo negro me agarra del hombro.

-Tú, ¿que has oído?- Mierda... Lo mejor es ignorar todo.

-Nada, ahora suéltame.- Le digo con tranquilidad. Pero el de los ojos verde no me quita la mirada de encima se aproxima me agarra del cuello y me estampa contra la pared.

-Mira niñato, tu no quieres que esta mierda te salpique así que lo mejor que puedes hacer es cerrar la boca, si no yo mismo me encargare de ello.- Me ahogo mientras me dice eso y por un momento creo que mira mis labios.

-Sera mejor que tu, no te metas conmigo... Yo cierro la boca y tu también. Yo no he visto nada, pero quiero algo a cambio. Además tú y yo tenemos más mucho de lo que hablar. Así que suéltame.- Le digo apartando su cuerpo del mio.

 - Tengo algo tuyo, si quieres que cierre la boca lo mejor es que me sigas. - Le digo mientras salgo hacía afuera.

Luego de unos minutos aparece, muy enfadado y solo. Me mira con el ceño fruncido. Y luego se muerde el labio inferior con fuerza. Cuando llega a mi lado, tira su mochila y casco al césped, sin apartar su mirada de mi.

-Se puede saber, que tienes tu de mi. - Escupe las palabras con rudeza.

-Calma... que esto solo acaba de comenzar. Lo primero,quiero tu nombre. - Le digo con la misma rudeza.

-Y eso que más da... Mira no me toques los cojones que no tengo tiempo para gilipolleces.- Dice acercándose, y haciendo que retroceda y choque con la pared.

-Tu nombre. Y hablamos.- Logro decir sin que me tiemble la voz, aunque me esta intimidando bastante. Y de repente lo vuelve a hacer,mira mis labios.

-Makoto...- Susurra cada vez más cerca de mí boca e hipnotizandome con sus ojos verdes.

-Y el tuyo...- Me dice al oído, respirando cerca de mi, creando un pequeño cosquilleo.

-Ha...- Y de la nada llega Rin, empuja a Makoto y le mira con odio.

-No te acerques a él, no es como tú. No arrastres a más gente, en tu mierda. - Una vez dicho esto me agarra del brazo y nos vamos.