- Vaya - comentó - la letra de Alex no es de lo que se diga "legible".
Marta siguió abriendo la carta arrugada y un poco rota, y comenzó a leer:
“ Hola, soy Alex,
bueno, desde que ví a Marta, me cayó muy bien, de hecho me parecía muy guapa.
Cuando pasaron unos días, decidí invitarla a tomar algo, pareció gustarle. Más tarde la llevé a los recreativos, con algunos de mis amigos.
Fue una tarde genial, pero se tuvo que ir bastante más pronto.
Mis amigos y yo seguimos jugamos a un viejo futbolín que había allí, y estuvimos debatiendo sobre algunos temas..
La verdad es que me g
Estoy pensando en
Espero que nunca lo l”
- ¿¡Pero qué?! - se preguntó Marta - va sobre mi, pero... ¡FALTA UNA PARTE!
Su madre vino corriendo enseguida.
- Marta, ¿qué pasa? - preguntó asustada su madre.
- Pe.. Pero, ¿vosotras cuando habéis llegado? - dijo ella asustada - bueno.. Da igual, dejadlo.
Su madre y su hermana se volvieron a ir, Marta, confusa, guardo esa nota en su cajón de la mesilla.
« tengo curiosidad por lo que puede haber pasado.. » se dijo.
Pasaron los días, y Alex seguía sin venir, Marta pensó en desapuntarse, sin Alex la banda no era lo mismo.
Un martes, después del ensayo Marta fue andando para su casa, pasó por el puente más largo de la ciudad, cuando notó una sombra detrás de ella.
«¡MARTAA!» se oyó.
Marta no miró para atrás y siguió con una mueca triste en la cara.
«Serán imaginaciones mías» pensó ella.
«¡MARTAAA!» se volvió a oír.
Marta, extrañada, está vez, se dio la vuelta.
- A.. ¿¡ALEX?!? - gritó asombrada.
Era Alex, corrió hasta llegar a ella y cansado de correr dijo hiperventilando:
- Marta - sonrió él.
- Alex.. ¿qué haces aquí? - respondió mientras le retiraba la mirada a él y ponía otra molesta.
- Bueno.. Esto, yo.. quería pedirte perdón.
- ¿ Por qué ?
- Ya sabes.. por estar desaparecido este tiempo.
- Ah, eso...
- Si, bueno, Marta, desde que te ví, supe que eras una persona encantadora, y bueno creo que ya lo has notado, tu a mi me gustas, y..
- Yo.. no tenía ni idea. - se sonrojó.
- Y, bueno, no quería que eso afectara en la banda, no me lo tomaría en serio.
- Esto, yo... tú a mí también me gustas, pero, me daba vergüenza decírtelo, pensaba que tú y y..
En ese momento, Alex le agarró de la barbilla y la besó.
- Te eché de menos en los ensayos - dijo ella sonriendo.
Él le cogió su mano, y fueron al parque donde estuvieron hace unos días.
- Esto, creo que me tengo que ir.. - añadió Alex.
- Yo debería de ir a casa, pero aún no hay nadie.
Oye, ¿ y si te vienes a mi casa ?
- Pero, mis padres me esperan..
- Sólo será un rato. - dijo cogiéndole de su mano.
- Está bien ^^.
Llegaron a casa, Marta dejó su mochila en la mesa, Alex colgó su abrigo en la entrada.
- ¿ Y si vemos un poco la televisión ? - propuso ella.
- Me parece bien.
Marta fue a por un bol para unas palomitas, Alex se había sentado en el sofá.
Ella se dirigía al sofá, cuando se tropezó con los pies de Alex y cayó encima de él.
Ambos se miraron fijamente a los ojos, en un momento de tensión.
Marta cerró los ojos, hizo una mueca, él también los cerró y finalmente se enrollaron.
« BEEP, BEEEP » era el móvil de Alex.
Él se incorporó y se levantó, ella se quedó perpleja.
- Si?
- Hola. - se oyó en el teléfono.
- Ahh, hola mamá.
- Hijo, ¿dónde andas?
- Em.. Estoy todavía en el ensayo, estamos a punto de terminar - mintió.
- Está bien, vuelve pronto.
- Adiós mamá.
* cuelga.
- Em.. - murmuró Alex.
- Si, si.. Tienes que irte - le respondió Marta con una cara triste.
- Bueno, adiós - sonrió.
Entonces le abrazó. Marta se dirigió a la puerta, él cogió su abrigo.
- Adiós - se despidió ella, esta vez sonriendo, cerró la puerta y fue a recoger las palomitas tiradas en el suelo.
- Esta tarde ha sido flipante. Como me agarró la mano, y ese beso.. No tenía ni idea de que le gustaba. - dijo mientras recogía - Estoy deseando volverle a ver.
