Poema: «El tiempo».

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El tiempo ha hecho su jugada.
No se ha quedado callado.
A su fiel amigo le han ganado,
pero él no piensa ser derrotado.

Todos temen, y piensan,
que quizás con este si no pueden.
Se les cae la esperanza.
Toda fe ha sido perdida.

¿Qué podría hacer este humilde ejército?
Si el tiempo es inevitable.
Nadie puede detenerlo,
nadie puede adelantarlo.

Siempre está presente,
aunque tú ni cuenta te des.
De ser oscuro pasa a claro,
demuestra su poder con un simple cambio.

Muchos lo culpan de todo,
creen que si no los aman es por él.
Creen que el tiempo pasó muy rápido,
o que quizás pasó muy lento.

Pero no todos están en su contra,
hay heridas que creen en él.
Corazones rotos,
que esperanzados se entregan a él.

¿Cómo hago para detenerlo?
¿Qué podría hacer para adelantarlo?
¡Quiero retrocederlo!
¡No quiero que siga avanzando!

La espera nos tortura,
la rapidez también.
Nada nos hace felices,
él tampoco puede complacernos a todos.

El amor desesperado recurre a él,
ya no sabe más qué hacer.
Siente que el tiempo ha sido perdido,
que no supo aprovechar su momento.

Pero las reglas son claras,
el tiempo podrá jamás ser alterado.
El amor sabe muy bien eso,
pero no perdía nada intentándolo.

El tiempo ha ganado al amor.
El amor se ha acabado,
se ha extinguido la llama.
Fue solo puro tiempo perdido,
imposible de recuperarlo ahora.

Poeta de madrugadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora