...

94 2 0
                                    

Todo andaba bien, Cristina, ya más alegre, estaba más pendiente de Johnny y lo que le sucedía, había salido de la casa a caminar y a pensar un poco, ahora se sentía más tranquila al ver que tenía a Johnny y que Danny seguía ahí con ellos aunque no esté físicamente.

Johnny se encontraba en la casa de Charlie haciendo tareas, cuando de repente llamaron a la puerta; Charlie se puso de pie y fue a ver quien era: un chico de tez blanca, cabello castaño, ojos cafés claros, alto,de aproximadamente 16 años, no muy delgado pero confortable, y labios delgados. Vestía una camisa de cuadros rojos y negros manga larga, jean rojo y tennis negros.
Charlie lo reconoció al instante.
-¡Holaaa!- Dijo Charlie sorprendido y alegre.
-Qué tal primito- Dijo Sebastian dedicándole una sonrisa.
-Adelante, pasa, tiempo sin hablar -Dijo Charlie abriendo la puerta del todo.
Sebastian entró y le dedicó una mirada a Johnny que estaba sentado en la mesa principal.
-¿Quién es?- Preguntó Sebastian a Charlie.
-Es mi mejor amigo, ven te lo presento.
Charlie y Sebastian fueron hacia Johnny.
Johnny, mira, este es mi primo Sebastian, del que tanto te hablo.
Sebastian estiró su mano hacia la de él, saludándolo cortésmente.
Cuando se tomaron de las manos para saludarse, Johnny sintió una especie de conexión, algo que nunca había sentido ni con la hermosa hermana de Charlie, pero eso le pareció estúpido y lo ignoró... Aunque Sebastian también sintió lo mismo, aquél era bisexual, así que no le pareció para nada extraño, sólo dejó que pasara y ya.

Sebastian tomó asiento.
-¿Y qué haces por acá?- Preguntó Charlie.
-Estoy viviendo por acá hace dos semanas, sólo no había tenido tiempo de venir ya que casi no encuentro tu maldita casa y estaba ocupado haciendo las cosas para poder ingresar al colegio.
-¿Estudiarás en el mismo colegio que nosotros?- Preguntó Johnny.
-Si, en el mismo curso; llegó tu tormento Charlie- Sebastian soltó una risa burlona y luego lo golpeó.
-Jajaja calma primo, he aprendido cosas nuevas- Dijo Charlie riéndose.
-Bueno, vamos a comer algo, muero de hambre- Dijo Sebastian mientras se incorporaba.
-Está bien- Dijeron Johnny y Charlie.

Y así pasaron los dos días, con la llegada del primo de Johnny, ahora eran 3 amigos, muy buenos amigos, pero Johnny no dejaba de pensar en lo apuesto que era, su sentido del humor, su mirada... Joder... Le encantaba su mirada.
Mientras Johnny y Sebastian se pensaban mutuamente, Charlie no tenía ni la más mínima idea de lo que estaba pasando.

Relatos Adolescentes.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora