1.3 Podemos estar en secreto...

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Cuando volví de la escuela, como siempre el autobús del colegio me dejo en la parada, y ahí di la vuelta para ir a mi casa, también de re ojo miraba la casa de Chuck, por si estaba afuera y me estaba viendo, pero no, se veía todo muy oscuro en su casa. Me decidí a entrar a mi casa y en cuanto cierro la puerta y volteo hacia el comedor, vi a Chuck hablando con mis papas, me sonrojé de inmediato, y no me quedo otra más que ir a saludar, pero me hice la que no conocía tanto a Chuck. Me acerqué al comedor y mi mama me dijo:
- Hola cariño, como te fue en el colegio?

- Bien mama, gracias.

- Supongo que no conoces a nuestro nuevo vecino de enfrente, el es Chuck Bass, y quería que ustedes se conocieran - dijo mi mama mientras me tomaba de la mano.

- Si lo vi un par de veces por la calle, espero que seamos buenos amigos Chuck - le dije en un tono burlesco, ya que lo conocía muy bien, lo había estudiado de pies a cabeza, ósea por dios!

- Claro que si ___, cuando quieras ir a mi casa y yo te ayudo con alguna tarea - dijo Chuck mientras me sonreía - bueno señor y señora Rose, gracias por el café pero es hora de que me valla, adiós ___, nos vemos pronto.

- Adios Chuck - le dije muy sencillo, cuando yo quería despedirme de él de una manera no tan formal, quería besarlo, pero con mis papas ahí, era imposible!!!

Después de un par de horas, sabía que Chuck estaba haciendo ejercicio en el parque del fraccionamiento, así que me puse un traje deportivo y salí a hacer ejercicio haciéndome la desentendida como si no supiera que Chuck estaría ahí.
En cuanto llegue vi que él ya venía corriendo para donde yo estaba, así que rápidamente empecé a correr frente a él, como si no lo hubiera visto, pero él si me vio...

- Hola ____! Que me estás acosando? - me dijo riéndose.

- Hay Chuck, ni que tuvieras tanta suerte - dije tomándolo del hombro - siempre vengo a ejercitarme aquí - dije un poco nerviosa ya que jamás había ido a ese parque más que a sacar a mi perrita claire.

- Ah si? Nunca te había visto, sin que es bueno que una amiga tan linda me haga compañía, no crees? - dijo mientras me ponía una mano en la espalda.

- Pues si? Supongo que así nos veremos más - dije un poco tranquila, cuando por dentro estaba muriendo de la emoción.

- Oye, ahora que tus papas me conocen ya podremos salir sin escondernos, claro no pasarnos se limite - dijo torciendo la boca - por qué a mí si me interesaría romper esos límites.

- Cuales límites? - dije totalmente roja, ya sabia a que se refería, solo que quería que él me lo dijiera.

- Pues como eres menor de edad, y pues no puedo hacer algunas cosas contigo sin culparme de crimen.. - dijo con un poco de decepción.

- Oh vaya, creo que estoy entendiendo, y Chuck, una pregunta, soy yo la que te vuelve loco? - dije riendo

- Creí que jamás lo ibas a adivinar, desde que te vi caí loco por ti - dijo agarrando mi mano.

- Pero Chuck, como dices, eres mayor y yo aún soy menor de edad - dije ya con un tono serio.

- Pero eso no nos puede impedir nada, podemos estar a escondidas, mi casa está sola, tus padres ya me conocen, y no falta mucho para que seas mayor.

- No se Chuck, lo pensaré - y cuando dije eso me fui corriendo sin despedirme

No podía creer que Chuck me quisiera a mi, cuando él podía tener a quien quisiera cuando quisiera, y yo no era la Reyna de belleza pero me había elegido a mi, oh Dios mío, en ese momento estaba tan roja y emocionada de tener un amor secreto con mi amor platónico, creo que esta noche soñaría con el.....

 VECINOS CONECTADOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora