-Esa joven... ¿Kate?, ¿Qué es suyo?.- me pregunto la señora, yo abrí la boca para responderle cuando una Jovencita de unos dieciséis años, suponía. Me hizo la seña de "parar". Me orille y pise el freno.
-¡Discúlpame!, ¿Puedo montarme?.- me pregunto desesperada.
-Si, claro... pero atrás no hay puesto, no sé si te ¿quieres montar adelante?.- ella me sonrió y asintiendo se monto.- ¿A dónde vas?.
-A mi casa. Lo que pasa es que no soy de aquí, soy de Venezuela.-me dijo sonriendo.- Y la verdad no sé donde ando... yo...
-Hola soy Luis.-dijo el muchacho interrumpiéndola y a su vez sonriéndole con picardía, este le tendió la mano. La chica alzo una ceja y tomando su mano se presento.
-María.- Luego quito su mano y la paso hacía mí.- ¿Y tú eres?.-me dijo sonriendo, yo le devolví la sonrisa.
-Niall.-dije tomando su mano.
-Yo soy Alicia.-dijo la señora captando la atención de todos. Yo sonreí y me concentre en la carretera.
-¿Y bien... que paso con Kate?.- me pregunto Luis.
-¿Quién es Kate?.- pregunto María confundida. La señora Alicia y Luis le explicaron todo.-¡Hay una historia!, ¡Amo las Historias!.- exclamo la muchacha con emoción.- Mi abuela siempre me vive contando, como se conocieron mi abuelo y ella. Y como fue el noviazgo de mis padres y toda la cosa... Por favor Niall... ¡No te detengas! Quiero saber cómo conociste a Kate-me dijo mirándome y sonriendo. Yo suspire...
-De acuerdo...- María, Luis y la señora Alicia me miraron atentamente. Yo suspire y seguí contando mi vida.
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9:55pm.
Niall estaba cansado de lo mismo, trabajo-casa, casa-trabajo. Llevaba toda la vida de casado manteniendo a su esposa... y ¿para qué?. Esa zorra se había metido en la cama del primer hombre que se encontrara por allí. Suspirando giro el volante a la izquierda metiéndose en el barrio de los ricos. Había unas casas hermosas y enormes, muy enormes. Encendió la radio y se dispuso a escuchar Marck Antony uno de los artistas internacionales más famoso de la historia, él tipo era de nacimiento... puertorriqueño.
Estaban pasando la canción "Valió la pena" . Le subió todo el volumen y se dejo llevar por la música.
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Kate estaba caminando por las oscuras calles de San Juan, Puerto Rico. No sabía que iba hacer, se sentía perdida y humillada. Harry era un imbécil de eso no cabía duda.
La chica se paro en una esquina esperando si llegaba un taxi, quería irse a su apartamento que había comprado cuando estaba en la universidad y trabaja a tiempo completo en una peluquería. Harry siempre le había dicho que lo vendiera, pero gracias al cielo Kate no le había hecho caso. Se juro a sí misma que no iba a permitir que ningún hombre la pisoteara. Su abuela la había enseñado que no importara la clase, ni el dinero... Todos éramos iguales. Había adorado a su abuela, siempre le decía:
-Kate , ya verás tendrás tu propio salón. Solo es cuestión de empeño.
Sí, pero Kate no tenía el suficiente dinero y pues claro Harry no le iba a montar ningún salón. Suspirando observo su reloj: 10:00 en punto. La chica alzo la cabeza para observar unas luces que venían del lado derecho, un taxi. ¡Bingo!, hizo la seña para que parara.
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Niall se orillo y espero que la mujer se montara, cuando lo hizo, piso el acelerador alejándose de la esquina. El Rubio la observo por el retrovisor, era una muchacha muy linda. Pero pudo notar que le caía una lágrima negra por su mejilla.
-¿Le pasa algo?.- pregunto el chico.
Kate lo observo por un rato, era un hombre muy guapo. Tenía los ojos color azulados, su cabello estaba largo y era rubio y tenia una sonrisa hermosa. Ella sonrió a media.
Niall estaba hipnotizado, la miraba por el retrovisor y podía observar sus hermosas piernas. La chica estaba sentada con las piernas cruzadas. Su miembro comenzó a palpitar e imágenes de él y esa chica desnudos lo ponía más excitado de lo que estaba. Obligándose a respirar y a dejar de mirar lo que no tenía que mirar; se concentro en la carretera..
10: 40pm
Niall tomo la autopista y siguió conduciendo. Luego con un impulso volvió a mirar el retrovisor. Kate lo pillo mirándola, así que cambio de posición, cruzando la pierna al lado contrario. Pudo observar por el rabillo del ojo que Niall la seguía mirando. Limpiándose las lágrimas que habían caído, le dijo:
-Me llamo Kate, ¿y tú?.
-Niall.- Ella sonrió ampliamente. Niall se obligo a mirar la carretera, porque si seguía mirando. La iba a desnudar allí mismo. Él se aclaro la garganta.- ¿Por qué llorabas?.- Luego de unos minutos, le respondió.
-Por un tipo, que cree que por ser rico... me puede venir a engañar.-le dijo ella.- Niall... ¿tendrás un cigarrillo?.-Le pregunto después de unos minutos. Kate llevaba años sin fumar, pero en ese momento no le importaba nada. Niall saco un cigarro de la caja y se lo ofreció con manos temblorosa. Kate sonrió.-Gracias.- Él le ofreció el yesquero, Kate se puso a la altura de él, para que pudiera encendérselo. Lo hizo con unos movimientos tan sensuales que Niall creía que su pantalón iba a romperse.
-No debes de caer por amores, debes de seguir adelante.- le dijo Niall mirándola por el retrovisor. En este momento el supo que era un masoquista.- Cuenta conmigo si quieres vengarte.
Kate se rió.
Luego de unos minutos Kate había hablado con Niall de todo. Mientras él conducía, ella le contaba su vida. Pero Kate sentía un gran deseo y una atracción por el conductor de este taxi, que no podía controlar. Lujuria. Eso era, tenía varias semanas sin tener relaciones y viendo a Niall Horan ¿Qué mujer no quisiera pasar una o dos o hasta un mes con este hombre?.
Niall la observaba por el rabillo del ojo, era tan diferente a Sharon. Kate era hermosa y de paso la pasaba muy bien conversando con ella. Ahorita de seguro estuviera discutiendo con Sharon. Niall sacudió la cabeza, provocaba ahorcarla.....
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