SeHun frunce el ceño y arruga la nariz al entrar al cuarto de LuHan y notar que no hay absolutamente nadie dentro. Las sabanas de satín negro están bien acomodadas en la cama, sin ninguna arruga de por medio. Chasquea la lengua y pasa su mirada una última vez por todo el cuarto. Al no encontrar a LuHan, cierra la puerta con un fuerte azotón.
Camina con tranquilidad pero con el ceño fruncido por el largo pasillo. LuHan no le había notificado en ningún momento que no estaría en el segundo círculo hoy. Piensa en ir a preguntarle a BaekHyun pues después de aquel incidente en el que LuHan perdió sus alas negras, su castaño amigo se había vuelto inseparable de su Demonio. Claro que LuHan no parecía muy cómodo pero por lo menos ya se estaba acostumbrando.
Pero al estar frente a la puerta del cuarto de BaekHyun, lo dudó. No sabía si golpear la puerta con sus nudillos pidiendo permiso para entrar o simplemente abrir la puerta. Desde que había llegado ChanYeol, era cierto que ambos estaban imitando a los conejos y sería jodidamente incomodo encontrarlos en pleno acto. Así que, soltando un largo suspiro, negó con la cabeza y siguió caminando.
Al entrar a la sala enorme donde, a pesar del tamaño del cuarto, el lugar sólo estaba adornado por una enorme mesa y varias sillas a los lados. Vio a uno de los tantos Demonios de los que no estaba interesado de entablar conversación, leer con tranquilidad un libro de quién-sabe-qué. Observó la sala y sus ojos inspeccionaron los cuadros que adornaban las paredes de mármol blanco. Estos cuadros tenían pintados artísticamente personas tocándose de manera poco inocente, fornicando, besándose.
Rodó los ojos y se sentó en una de las tantas sillas libres. El Demonio que leía con tranquilidad un libro, alzó la mirada para percatarse que ya no era el único en aquella sala.
—SeHun. —saludó, alzando un poco el mentón.
—KyungSoo. —devolvió el saludo, observando con atención aquellos enormes ojos que lo miraban con curiosidad.
— ¿Qué haces aquí? —preguntó, haciendo que SeHun ladeara la cabeza para inspeccionarlo.
Su cabello era tan negro como la noche, sus ojos eran como dos enormes canicas de un bonito color café, sus labios eran gruesos pero tenían una bonita forma de corazón. Sus mejillas regordetas le daban un toque más tierno.
SeHun negó con la cabeza y soltó una bocanada de aire.
—Sólo que no encuentro a LuHan y me he cansado de buscar.
KyungSoo se quedo en silencio, desviando su mirada a uno de los cuadros que estaban atrás de SeHun. Su ceño se frunció levemente y volvió su mirada al Demonio frente a él. En realidad él no había hablado con SeHun, eran pocas las veces donde alguno de los dos se dirigía la palabra. Si no fuera porque SeHun era de los Demonios más fuertes, seguramente no sabría de su existencia. Y si Kyungsoo no fuera ese algo con Jongin, tampoco SeHun sabría de él.
Le parecía gracioso como pequeñas cosas te llevaban a otras.
—Pensé que ya estaría aquí. —comentó distraídamente, regresando su atención al libro que antes leía.
— ¿Sabes dónde está?
KyungSoo asintió sin muchos ánimos de dar un por qué o decirle dónde estaba. Notó como SeHun fruncía el ceño y se paraba con molestia de la silla. Él ni siquiera se inmuto, dejó que sus ojos se siguieran moviendo de un lado a otro para leer aquellas líneas escritas en el libro. Cuando escuchó fuertes pasos apresurados, sonrió y negó con la cabeza.
—Será mejor que lo esperes en tu habitación, SeHun.
+
BaekHyun caminó con las manos metidas en las bolsas de su pantalón, su mirada parecía perdida pues aun estaba sorprendido por lo que acababa de pasar. Observó detenidamente a su lado, donde LuHan se encontraba mirando sus manos con una sonrisa satisfecha. Se sentía bien porque lo que LuHan tenía en sus manos era algo muy importante pero también se sentía inseguro por saber la reacción de SeHun.
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Dark Lustfulness {HunHan}
FanfictionLa tensión sexual es sólo un paso a nuevas aventuras. Los sentimientos vienen de la mente, no del corazón. Y sin darse cuenta, los Demonios pueden tener el amor más puro existente. SeHun sentirá después de tanto tiempo lo que es la confusión. ¿Qui...